Capítulo 5

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Deja vu

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Ichiro y Mefistofeles se encontraban frente a aquella residencia abandonada, las hojas entraban por las ventanas y la cinta policial estaba rota en algunas zonas, claro que a Ichiro esto no le pudo importar menos por lo que se pasó por la cinta policial como si nada.

—Oye... ya te he dicho que cuando veas cinta policial no la atravieses.

—Vamos, Mefisto — Le resto importancia el humano.

Adentro no había mucho, los vidrios estaban rotos, y desplegados por el suelo, los muebles se encontraban cubiertos por mantas especiales, seguramente la policía las puso ahí para la investigación, y tal vez lo más escabroso de todo donde sea que pisaban había tuza blanca formando una silueta humana.

Ichiro, paseaba como si nada, Mefisto trataba de evitar pisar las siluetas en el suelo; el humano miraba por cada habitación echando un breve vistazo para después ir a la siguiente habitación.

—¿Notaste algo Akuma-Kun? —Pregunto su primo.

—Tal vez —Fue lo único que respondió.

Cuando los detectives llegaron al último cuarto, encontraron una sala bastante estrecha pero muy larga en el suelo había dos siluetas y de cada lado había dos círculos, nuevamente, no entendía que significaban, aprovecharía que su padre estaba ahí para consultar, así que en su libreta replico los símbolos de cada extremo en la habitación.

—Muy raro. —Finalmente dijo el humano.

—¿Qué cosa? —Pregunto el semidemonio.

—Normalmente en los suicidios colectivos, las sectas se reúnen en un solo lugar donde puedan seguir las indicaciones de su líder, es un proceso que se planea con antelación, sin embargo, parce que todos murieron en lugares diferente, y parece que se quitaron la vida con lo primero que encontraron, todo es como si hubiera pasado de la nada.

No era algo común, y las cosas no comunes debían tener una explicación.

Mefistofeles busco por el lugar, si encontraban alguna pista, mientras que Ichiro observaba los símbolos, no podía evitar sentir cierta sensación familiar... tal vez después lo pueda revisar mejor volviendo.

—Para eso venimos que decep...

El humano rápido callo al semidemonio, había escuchado el sonido del cristal del suelo rompiéndose en pequeños crujidos, alguien o algo se acercaba, la puerta dividía la habitación, por lo que le indico al semihumano que se ocultará detrás de la puerta junto a él, hasta donde sabían podía ser otra quimera, así que, con mucho silencio, el humano dibujo un sigilo.

—Elohim, Essaim... Elohim, Essaim, Oh, Escuchen mis suplicas, les concedo el Potestate Diaboli. —empezó a recitar en voz muy baja una vez termino, puso su mano en el pomo de la puerta y salió, en el exterior no parecía haber nada, pero seguían escuchando, los pequeños sonidos de cristal sonado

Clack.

Clack.

Clack.

Acercándose, sin ver nada, el lugar no tenía muchas ventanas por lo que estaban rodeados de oscuridad y una vez el humano pudo ajustar sus ojos a aquella oscuridad, noto como las hojas desplegadas en el suelo, se aplastaban lentamente; no podía ser posible...

Mefistofeles sintió como algo lo apretaba del hombro, y lo arrojo contra la pared.

—¡¿Que está pasando?! —Pregunto el semidemonio levantándose.

Egoista (Strophaia X Akuma-Kun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora