Capítulo 11

10 0 0
                                    

- Hombre trajeado: Tranquilo solo vengo a hablar pero no quiero que nadie se haga daño así que yo suelto lentamente mi arma y tu sueltas la guadaña.

- Alexy: Lo haré cuando la persona que está escondida detrás de la puerta deje de acecharme.

En ese momento una mujer muy joven salió por la puerta y le apuntó en la cabeza con una pistola a Alexy.

- Mujer joven trajeada: ¿Y qué vas a hacer si no?

- Hombre trajeado: Athenea estate quieta.

- Athenea: Es más fácil hacerlo hablar así Charles.

- Charles: Ay... te falta mucho por aprender chica. No subestimes a este hombre, te puede matar antes de que siquiera puedas apretar el gatillo.

- Alexy: Tch.

Athenea se estremeción y bajó el arma. De la misma manera tanto Charles como Alexy bajaron las armas.

- Alexy: ¿Y bien?

- Charles: Para serte sincero estoy muy interesado en ti. 

- Alexy: Mmmm... nunca probé a estar con un hombre pero siempre hay una primera vez para todo supongo.

- Charles: Eses no son los servicios que necesito de ti pero lo tendré en cuenta.

- Alexy: Y, ¿cuales son los que necesitas?

Charles comenzó a andar por la habitación. A pesar de sus formas semejaba ser un hombre tranquilo. Era de gran porte con voz grave y cálida. Además, era extremadamente gesticuloso cuando hablaba. 

- Charles: Tú y yo sabemos que sabes cosas de los juegos. La pregunta aquí es por qué. 

- Alexy: Poca cosa sé para tu desgracia.

- Charles: No te hagas el loco. Sabes, investigamos a todo el mundo que entra en los juegos pero de ti no encontramos casi nada. Me gustaría chantajearte es, digamos, un fetiche mío. Pero no puedo -decía mientras se acercaba a Alexy-, y eso me cabrea, al punto que contraté a varios detectives privados. Poco fue lo que descubrí ya que curiosamente cuando empecé a indagar cosas mis superiores me pararon los piés. Así que, dime, ¿qué hace tan importante al hijo de una prostituta muerta?

En ese momento Alexy le agarró del cuello y Athenea le apuntó a la cabeza.

- Athenea: Yo de ti me calmaba.

- Charles: Tranquilidad, tranquilidad -decía mientras levantaba las manos.

Alexy lo tiró al suelo. Charles se levantó y se ajustó la corbata.

- Alexy: Dadme una razón para no mataros a ambos.

- Charles: Para empezar no creo que te interese que matemos a Marie.

- Alexy: ¿En serio crees que eso vale de algo conmigo?

- Charles: La verdad es que sí que lo hace. Al final, la diferencia entre tú y yo es el valor que le damos a la vida ajena. Y ahí es a donde quiero llegar mi amigo. Únete a mí. Con un hombre con tu mentalidad y fuerza puedo ascender mucho más en la empresa. Quizás puedo soñar con ser director general algún día, quién sabe. A cambio, te concederé lo que me pidas. Pero antes tendrías que demostrar lealtad.

- Alexy: ¿Y cómo se hace?

- Charles: Debes traicionar a un ser querido.

- Alexy: Así que así es como entras. Matando a otra persona.

- Charles: A veces las traiciones más grandes no resultan en ningún daño físico. Mi compañera es un buen ejemplo de ello, traicionó a la única persona que tenía en su vida para entrar. Lo más gracioso es que la otra persona aún no lo sabe, estoy esperando ver su cara JAJAJA.

- Alexy: Y todo esto, ¿para qué?

- Charles: Poder Alexy, poder.

- Athenea: De todas formas no creo que el hijo de una prostituta vaya a entender de amor tampoco.

- Alexy: Charles, ¿me permites? -dijo con una mirada aterradora que hasta a Charles le produjo miedo.

- Charles: Bueno, ella se lo buscó.

Alexy de un solo salto llegó hasta donde estaba Athenea.

- Athenea: ¿Eh?

Le enganchó del cuello con la pierna antes de que pudiera envainar el arma y le arrastró la cabeza hasta el suelo dejandola así inconsciente.

- Charles: JAJAJAJ ¡BRAVO! ¿Dónde aprendiste a moverte así?

- Alexy: Ballet.

- Charles: Ya veo que no vas a hablar. Está bien, está bien. Entonces, ¿estás de mi parte?

- Alexy: Charles, ¿era?

- Charles: En efecto.

Alexy le hizo un corte de manga.

- Alexy: Métetelo por el culo -dijo con una sonrisa de psicópata.

Charles sacó su arma pero Alexy ya había cogido la guadaña del suelo cortandole así la mano. Charles agarró con la otra mano a Athenea y la tiró por la ventana. Tenía una fuerza abrumadora. Se abalanzó rápidamente contra Alexy el cual lo esquivó pero Charles dio una patada a ras del suelo que lo tiró. Alexy esquivó varios golpes desde el suelo y lo enganchó del brazo dandole la vuelta a la situación y dejándolo en el suelo. Todo el ruido había despertado a Marie, la cual se escondió debajo de las sábanas, y había alarmado a Dylan, el cual entró a toda prisa por la puerta. Vio a Alexy agarrado con un hombre así que le ayudó a separarlo. Charles viendo que estaba en inferioridad saltó por la ventana. Se llevó el dedo a la oreja.

- Charles: Tú lo quisiste.

- Helena: ¡AYUDA!

- Enriqueta: ¡NO POR FAVOR POR FAVOR NO ME HAGAS ESTO!

En ese momento varios hombres llevaban agarrados a Enriqueta, Débora, Helena, Manel y Amalie. Cada uno sacó un arma y les apuntaron en la cabeza. Alexy sacó rápidamente una pistola pequeña que tenía escondida en el zapato. 

- Charles: Fuego -dijo mientras aprovechaba para escapar con Athenea a hombros.

Alexy disparó matando a todos los otros hombres, pero solo pudo evitar que le dispararan a Amalie y Manel. Así, Débora, Enriqueta y Helena murieron en el acto. Todos se quedaron en shock. Amalie trató de despertar a Débora entre golpes y gritos sin resultado alguno. La situación se envolvió de un caos absoluto. Una pesadilla. Un mal recuerdo. Un día que ninguno de ellos querrá recordar. Dylan por su parte, tenía la mirada fija en otra parte. 

- Alexy: ¿Dylan?¿Qué ocurre?

- Dylan: Esa chica... me recordó a mi hermana. Creo que estoy empezando a enloquecer.

- Alexy: Deberías descansar.

Así, esa noche se dedicaron a hacerle un entierro a todos los muertos. 


Da CapoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora