IN THE DARKNESS. BENNODA

capítulo: 4

Capítulo: 4

Ella estaba furiosa y quería destruir todo a su paso, porque el odio la estaba matando por dentro.

Y la rabia de no poder tener el control sobre él como antes, la hacía enloquecer a tal punto que no titubeaba para alejar a su hijo de él, porque sabía cuánto eso lo iba a herir.

Y sonrió con soberbia al ver como se iluminaba, la pantalla de su móvil con otra llamada entrante de Chester. Pero una vez más ella la rechazó sintiendo ese odio abrumador

Que le impedía terminar con ese juego enfermizo, de dejar que lo viera cuando ella quería o de que la llamara sin parar para poder escuchar su voz suplicante, pidiendo que le permitiera ver o estar con Draven. Porque samanta sabía que solo con el niño de por medio ella tenía esa pequeña oportunidad de hacerle saber a Chester, que haría de su vida un infierno y que por nada en el mundo ella aceptaría que su relación hubiese terminado. Y gritó al recordar cómo es que todo se vino abajo a causa de las constantes discusiones, que sostenían porque a él le costaba encontrar trabajo y ambos estaban cruzando el límite, de las discusiones en voz alta, a comenzar a gritarse el uno al otro, a no soportar estar por mucho tiempo en la misma habitación sin decirse COSAS hirientes, reprocharse cosas del pasado. Hasta llegar al quiebre total de su amor

El día que ella creyó que él la engañaba y cuando él lo negó todo, explotó en una pelea a gritos, golpes, arañazos, insultos y una denuncia de ella hacia Chester

A pesar de que el afectado había sido él, ya que cuando la policía ' arribó al lugar de los hechos.

El panorama que se presentaba era caótico, por un lado samanta lloraba desconsoladamente mientras destrozaba todo lo que tenía a su alcance y por el otro, Chester era sujetado contra el suelo por un vecino que acudió a ver lo que ocurría, por el escándalo que rompió la calma de esa fría madrugada de marzo. Fue entonces que la separación fue inminente

Ya que el hombre tras ser llevado a comisaría para declarar, también llamó a su padre adoptivo quien no dudo ni un segundo en ir con él. Y estar a su lado durante ese proceso legal al que su esposa lo sometió. Pero algo ocurrió semanas después de que ella lo llevara al juzgado por primera vez. Algo que el mancebo se negaba a contar desde que fue dado de alta en el hospital hace casi siete meses ya. Por lo que ahora estaban de nuevo en la contienda, luego de que samanta lograra recuperar la custodia de su hijo.

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Chester volvió a llamar a su ahora ex esposa, pero ella de nueva cuenta le rechazo y ni contesto sus mensajes. Él se dejó caer pesadamente sobre el viejo sofá, que yacía en un rincón des estudio de grabación que tenía junto con los muchachos que solo lo miraban sin saber cómo ayudarle.

En ese momento de oscuridad el hombre, de ojos pequeños y tez blanca comenzó a llorar y a golpear la pared con frustración, por no poder estar con su hijo.

-es que no es justo, yo nunca le hice daño a ella, nunca le puse una mano encima, a pesar de sus constantes celos enfermizos y su control sobre mí.- dijo cansado de batallar con los demonios que lo atormentaban. Y sus amigos lo sabían perfectamente ya que ella lo perseguía a donde él fuera.

- chas no puedes seguir así, hermano te estás exponiendo a que ella logre meterte preso y sabes que ella usara todo lo que tiene en su poder para hundirte.- expresó Brad deteniendo al otro hombre, de seguir golpeando la pared, el chico de cabellos chinos lo levantó para llevarlo a que se duchara. Porque ya llevaba varios días sin arreglarse y sin alimentarse o dormir bien.

Chester se resistió tanto como pudo, pero al final ebrio como se hallaba no tenía la fuerza suficiente para impedir que lo metieran a bañarse.

-Brad yo me encargo de él, tu ve con los demás a por comida y por hoy terminamos el ensayo. – dijo Mike tomando a Chester por la cintura y tratando de que el contrario no callera.