Venganza// Marauders x skittles slytherin

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-No, James, le va a dar alergia a Harry.

-Todavía no nace, Regulus.

-Pero él va a salir parecido a mí.

-Por favor, Regggg- extendió la palabra, con cara de cachorro.

-Ya basta, James.

-Me lo debes- lo miró entrecerrando los ojos. Ambos se habían enterado de la venganza de Sirius, y James no hizo nada. Más que embarazarlo (con mucho cuidado y amor)

-Bien, pero ya quedamos a mano.

-¡SÍ!- gritó emocionado, abrazando al gato.

-Con cuidado, es pequeño

Y el gato resulta que lo sigue más a Regulus que a James.

Irónico.

[...]

-Maldito el día en que hice esa venganza- se quejó Remus, intentando levantarse.

Era obvio que con tanto semen iba a quedar embarazado.

No lo había descubierto hasta hacía poco. Y ya casi que lo tenía, faltaba menos de tres meses. Definitivamente el próximo bebé lo tendría Sirius.

Sirius rió, viendo a su esposo.

Boda pequeña y en casa, eso había sido.

Salió más caro el anillo que la boda en sí.

A Remus le pareció loco el hecho de que "comprara un anillo barato con sus últimos ahorros" y que fuese de oro puro, con diamantes incrustados. Al parecer sus últimos galeones habían sido demasiados. "Lo vales" recordó. "y vales mucho más que eso"

Remus lo miró. Últimamente estaba de mal humor.

-Perdón, cariño.

Remus se sentó sobre él, sintiéndose chiquito. Todavía recordando el daño que le había hecho a su esposo y como él era tan bueno y lo amaba tanto.

-Lo siento- se disculpó.

-¿Qué pasa, amor?- preguntó tranquilo, besando su hombro.

-Tu me amas tanto y yo te hice eso.

-Ya pasó, Moony.

-Lo sé, pero me siento culpable.

-Y yo me siento culpable de la broma.

-Ya te perdoné, Sirius. Lo comprendo, no lo pensaste, no sueles pensar las cosas. Solo querías hacerle daño a quejicus. No a mí. Yo sí quise dañarte.

-Porque yo te dañé, al ser un imbécil, lo hice.

 -Pero no tenías intenciones de dañarme, yo sí.

-Remus- habló serio- mírame- eso hizo- te perdono.

La sinceridad de sus palabras le terminó de sacar el peso de encima.

Teddy se movió dentro de Remus, y al estar tan pegados, ambos lo sintieron.

El ambiente cambió a uno de emoción total.