Venganza// Marauders x skittles slytherin

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Capítulo dedicado a Vhalonet  Lena_themoonchaser

Feliz cumple amores <33

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Walburga apareció en la casa de los Potter al siguiente día.

Ahí fue donde Euphemia y Fleamont se dieron cuenta de cuanto su hijo amaba a Regulus.

James solía ser miedoso en situaciones donde se involucraba la magia oscura.

Pero igual, el menor de los Potter se posicionó frente a Regulus y levantó su varita.

-Fuera- exigió.

-Solo vine por mi hijo, deja eso, traidor a la sangre.

-Dos, a las dos personas que más amo en el mundo heriste, así que no tendré piedad. Si su "sangre pura" tiene que correr por el suelo, lo hará.

Euphemia, asustada por lo que esa mujer era capaz de hacer, tomó las riendas de la "conversación", alejando a su hijo y yerno.

Fleamont se posicionó junto a James.

-Vamos, Walburga, eres pésima madre. ¿para que quieres que siga contigo? ¿para golpearlo? ¿hechizarlo?

-¡Es mi heredero! ya lo comprometí con una muchacha, y tu ni hables, Potter.

-¿No te das cuenta que no le gustan las mujeres? 

-¡Hola mamá, papá, ya llegué!- la voz risueña de Sirius se escuchó en el living-¡Vengo con mi novio! ¿Donde están?

Walburga se desmayó al verlo de la mano de Remus.

-Bueno, mejor muerta que molestando- se encogió de hombros Regulus- cocino yo hoy ¿que quieren comer?

Todos excepto Euphemia estallaron en risas.

-¿Que mieda? ¿Que hace acá? No me vino a buscar, ¿no james?- Sirius se abrazó al brazo de su mejor amigo, con fuerza.

-Tranquilo, Paddy. Vino por Reg.

-¡No! Regulus, escuchame bien, no vuelvas. Hazme caso esta vez.

-No lo haré. Mi vida está junto a James ahora- Sonrió Regulus, abrazándose al otro brazo de Potter.

Walburga salió de la casa de los Potter con la magia de Orión, quien tuvo que callarse y prometer que no volverían.

Walburga era estúpida para eso, él, en cambio, conocía a los Potter. Eran "estúpidos y sentimentales" pero increíblemente buenos en pociones y artes oscuras. Sí, la apariencia puede engañar.

[...]

-Mejor pedimos pizza- opinó Fleamont al ver a sus hijos y sus novios llenos de harina.

-Me limpian todo esto, jovencitos- habló Euphemia.

-Se puso la gorra- rió James. 

Pero los Black no tardaron más de un minuto en dejar todo limpio.

-Déjenos ayudar- pidió Remus

-No, hay que limpiar rápido, no queremos que la señora Potter se enoje- habló nervioso Regulus.

Ese era un hábito que a Sirius todavía no le podían sacar.

Hacer algo a cambio de un poco de humanidad, amor. Que para el matrimonio Potter era innato. No pedían algo a cambio por amarlos.

Pero los hermanos Black estaban acostumbrados a que si dejaban todo limpio, su madre no los castigaría. Era un pensamiento tan calado en sus cabezas, que no lo podían sacar.

-Sirius, te vas a lastimar las manos escurriendo tantas veces el trapo- habló Remus.

-No, es que esto no sale- se quejó Sirius mirándolo a los ojos, el pelinegro estaba llorando ya.

-¡Mamá!- gritó James.

[...]

Remus lo abrazó, intentando calmarlo.

-Bien, chicos. Por décima vez, hijo- miró a Sirius- cariño, si rompen o ensucian algo deben limpiar, normal, no sacarse media mano.No los reto, les  enseño. Y mi cariño no se retribuye con limpiar la casa, simplemente los quiero porque los quiero, porque me nace. Lo más lindo que tengo son ustedes- habló con el grupo- y no necesito retribución. 

Los ojos de Regulus se aguaron, triste, él pensaba que todas las madres eran como la suya.

Siempre prometía que cuando tenga hijos iba a ser mejor que ella, amoroso y comprensivo.

Pero su suegra... era la mejor madre que conocía.

Entendía, mierda, entendía por qué James era tan genial. Venía desde este hermoso núcleo familiar,