Capítulo dos

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El grito los sobresaltó a ambos y se separaron abruptamente, mirándose con los ojos abiertos de sorpresa.

Chanyeol se levantó de su silla y se colocó entre medio de las piernas de Baekhyun, quien colocó su cabeza en el hombro del más alto, para ocultar su cara, no era momento todavía de mostrarse.

— Madre, ¿qué estás haciendo aquí? — Preguntó Chanyeol serio, llevando una mano a la nuca de Baekhyun y acariciándola, viendo a su madre con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

— ¿Qué estás haciendo tú? ¿Qué significa eso? — Ella replicó apuntando con su dedo.

Chanyeol podía sentir los dedos de Baekhyun tomando su camisa en un fuerte agarre.

— Estoy trabajando.

— ¿Trabajando? No me hagas reír, hijo. — La mujer puso los ojos en blanco. — Lo que vi es todo menos eso.

Chanyeol se encogió de hombros.

— ¿Qué haces aquí de todos modos? — Pregunta el alto. — No me gusta que vengan sin avisar y lo sabes.

— Te he estado llamando y no me has respondido, pero ya veo por qué. — Dijo la mujer acercándose. — ¿Por qué se esconde? Es una falta de respeto que no salude, aparte me gustaría verle la cara a la zorra que está con mi hijo.

Baekhyun se mordió los labios para no soltar una catarata de insultos.

— No le digas así. — Gruñó el alto.

— ¿Por qué? Si lo es. — Dijo en un tono desagradable. — Se está metiendo con un hombre comprometido.

Chanyeol iba a decir algo más pero la puerta se vuelve a abrir, llamando la atención de madre e hijo, dejando ver a otra persona que se quedó inmóvil cuando vio al alto y el cuerpo sentado sobre el escritorio.

El hombre mayor maldijo en voz baja cuando vio a su prometido, futuro ex prometido, Kyungsoo.

— Oh, cariño. — Dijo la mujer acercándose al hombre todavía inmóvil en la puerta. — Siento que tengas que ver esto.

Chanyeol se inclinó hacia abajo para susurrarle algo al padre de sus hijos.

No te preocupes, voy a hacer que se vayan, pero no dejes que te vean la cara, ¿bien?

Baekhyun asintió y soltó el agarre en la camisa del alto para poder abrazarlo por debajo de la chaqueta y envolver sus piernas alrededor de Chanyeol, sin importarle los visitantes que había en la oficina.

El alto no dijo nada y tocó suavemente el cabello del menor, viendo a su madre poniéndose delante de Kyungsoo para que no vea la forma íntima en la que estaban.

Sin embargo, Kyungsoo la rodeó y comenzó a caminar hacia su escritorio siendo seguido por su madre. Podía notar la mirada dolida en él, pero no le importaba mucho.

— Chanyeol, ¿Qué significa esto? — Preguntó Kyungsoo tratando de no romper a llorar.

Baekhyun frunció el ceño al reconocer la voz. ¿Era Kyungsoo? ¿Su primo? ¿Qué demonios?

Chanyeol resopló. Nunca había tratado con el pequeño hombre más que las comidas donde siempre estaba su madre o los padres de ambos, pero nunca habían tenido una a solas, así que, quién se creía para cuestionar lo que estaba sucediendo ahora.

— ¿Por qué te importa? — El alto se burló.

— ¡Chanyeol! — su madre lo retó. — ¡Es tu prometido, por esa razón le importa! Vinimos aquí para ir a almorzar y nos encontramos contigo y esa zorra que no quiere dar la cara.

Park's secret.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora