La nueva frontera

Viejas tacticas nuevos males

Reino de Kaetelia

Palacio real

La situación era alarmante para Leonardo y Andrés quienes hacían lo posible para evitar que la sangre saliera del cuerpo de Joaquín todo mientras eran observados por la realeza quienes aún no entendían lo que sucedía

-¡¡Maldición no para de sangrar!!

-¡¡Necesitamos algo para detener el sangrado!!

-¡¡Usen esto!!

Y es que sin aviso ambos amigos mirarían como la princesa les entregaría un pedazo de ropa y fue que mirarían como este era de su propio vestido pero en lugar de siquiera preguntar sin dudar lo tomarían

-Gracias pero esto no servirá a menos que tengamos un medico

-¡¡Rápido traigan el medico!! – Gritaría la princesa a sus sirvientas y guardias quienes se mantuvieron quietos – que no escucharon, traigan al médico ¡¡AHORA!!

Con lo cual ahora con órdenes de la princesa estas comenzarían a buscar al médico mientras el grupo ayudaba al soldado herido quien producto de la herida volvió a despertar por el dolor

-¡¡AAAAAA!! ¡¡MIERDA!!

-¡¡JOAQUIN!!

-¡¡Esto duele!!

-¡¡Entonces es bueno!!

-¡¡Significa que tu cuerpo aun no funciona!!

-¡¡Ponte en mi... lugar... y luego me dices... si es bueno!! – Diría entrecortado Joaquín por el dolor – ¡¡Carajo... con que... me hirieron!!

-Una daga de mithril, eso fue lo que te hirió – diría la princesa – un arma peligrosa al ser capaz de dañar casi cualquier armadura e incluso se rumorea que puede dañar la piel de dragones

-Almenos... un arma peligrosa... fue lo que... me hirió – diría con dolor y humor Joaquín – sería una vergüenza... que algo tan débil... me hiriera

Pero antes de que pudieran seguir hablando fue que mirarían como un hombre llegaría al lugar y por su apariencia era el doctor que tanto esperaban pero que también mostraba estar acelerado

-Lo lamento majestad, vine lo más rápido que pude

-Rápido tenemos un herido aquí

-Entonces déjeme ver

Con lo cual apartándose permitirían que el medico comenzara a checar la herida del soldado

-Es una herida seria – diría presionando la herida – pero por suerte no daño nada importante

-¡Aaaa!

-Lo siento pero es bueno, significa que su sistema sigue trabajando, lo bueno es que tampoco estaba envenenada el arma

-Entonces... que sigue

-Debemos limpiar la herida con algo de alcohol, de lo contrario la herida se infectara – diría buscando en su mochila – maldita sea no esta

-¿Lo olvido?

-Lo siento no me prepare para que un wyvern atacara el palacio

-Esto puede servir – diría entregándole una botella de brandi – esto puede servir

-Perfecto servirá de maravilla

-Espera un... momento – Diría Joaquín tomando la botella – sería una pena desperdiciarlo

Con lo cual ante la mirada de incredulidad de los reyes este comenzaría a beber de la botella solo para que tras unos segundos este vertiera de la misma en su herida