Capítulo 31

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La cena fue una aventura entretenida con la madre de Harry preguntándole sobre todo, desde su color favorito hasta un juego por juego de cada uno de sus partidos de Quidditch. Ella jadeó de miedo cuando Harry le contó cómo casi había sido arrojado de su escoba durante la primera, y se rió cuando se enteró de que Hermione había prendido fuego a las túnicas de Severus, pensando que era él quien había estado maldiciendo a Harry. Ella escuchó con gran atención cuando Harry describió su primer encuentro con Fluffy, Cerberus de Hagrid, y lo abrazó de cerca cuando describió su encuentro con el troll en Halloween.

"Sin embargo, no puedo evitar preguntarme; si tú, Ron y Hermione tuvieron tantas aventuras juntos, ¿por qué pareces tan distante ahora?"

"Después del ataque y mi llegada a Potter Manor, Ron, Hermione y yo comenzamos a separarnos", admitió Harry en voz baja. "Para ser justos, estaba siendo bastante reservado. Acababa de aprender tantas cosas que sabía, y tenía tantos planes para trabajar, pero sabía que no podía confiar en que Ron mantuviera la boca cerrada si perdía los estribos, y Hermione habría corrido inmediatamente a Dumbledore una vez que se enteró de que yo estaba visitando con frecuencia la Cámara de los Secretos, y incursionando en magia más avanzada. La única persona en la que confié al principio era Daphne, y eso fue porque ella y yo pensamos que había pedido un viejo juramento de lealtad entre su familia y la nuestra. Pero entonces Daphne y yo empezamos a acercarnos, y empecé a hacer otros amigos. Basta con decir que Ron y Hermione no reaccionaron de una manera muy madura."

Su madre fue muy solidaria, y Harry sonrió mientras agarraba su muñeca y la apretaba tranquilizadora. El momento feliz fue interrumpido por un golpe en la puerta, y Daphne caminando seguido por el resto de los amigos de Harry. La oficina de Harry no estaría abierta a los estudiantes esta noche, dándoles un tiempo extra para estar juntos antes de que él y Remus cambiaran. Harry se levantó y envolvió sus brazos alrededor de ella, enterrando su rostro en su cabello mientras su pecho retumbaba contra su mejilla.

"Noche, Sunshine", dijo con una sonrisa mientras se alejaban. "Cómo fue tu día?"

Daphne se encogió de hombros. "Mismo viejo, mismo viejo. Malfoy es un imbécil, los BÚHOS nos están matando, aparentemente caminó por el Salón de Entrada empapado en algunos fluidos extraños y cubierto de heridas."

Harry sonrió tímidamente mientras ambos caían en su propio pequeño mundo, su madre, su padrino y su tío honorario casi olvidados. "Había un unicornio dando a luz en el bosque, y Acromantulas estaban tratando de atacarlo. Wilhelmina, Kyd y yo nos unimos a los centauros para defenderlos."

"Desde cuándo hay Acromantulas en el Bosque Prohibido?" Preguntó sirius.

"Un poco más de cincuenta años", respondió Harry. "Hagrid había estado criando secretamente uno cuando fue expulsado, y lo trajo un compañero algún tiempo después. Probablemente hay cientos, si no miles de ellos en lo profundo de allí por ahora."

"Y acabas de huir y luchar contra un enjambre de ellos?" Remus exigió.

"No sería la primera vez", dijo Harry. "Los conocí durante mi segundo año también. Esta vez, sin embargo, tenía un dragón de treinta y cinco pies en mi equipo y soy mucho más hábil mágicamente. Sin mencionar la espada forjada con duendes que corta cualquier cosa y los mata con un solo corte. Resulta que hay una manera bastante fácil de hacer que huyan sin arriesgar la vida y las extremidades."

"Qué hiciste?" Lily pinchó.

"Conjuró un basilisco", respondió Harry. "No era muy grande en comparación con la serpiente de Slytherin, y probablemente no habría tenido la mirada mortal, pero todavía hizo el truco."

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