Apocalipsis.

¿Pero qué es esto?

-Ya he terminado de quitarles las armas, ayúdame, por favor-

-Voy-

Fui al salón donde estaban los 3 mosqueteros y le ayude a Noah a atarlos a una silla, después, fui a por una camisa vieja que estaba por ahí y la ate a sus ojos con el fin de que ellos no pudieran ver nada.
Mientras que esperábamos Noah me confesó que el nunca había visto tulipanes, ya se que regalarle en su cumpleaños. El cumpleaños de Noah es el 24 de Marzo, por suerte, en primavera.

-¿Entonces nunca has visto tulipanes? ¿Ni en fotos?- dije sorprendida

-La verdad es que no, en fotos solo las he visto de fondo de cualquier persona pero no, nunca he visto un tulipán. Por cierto, ¿cual es tu flor favorita?-

-Mi flor favorita es-

Antes de que pudiera decir nada 1 de los 3 mosqueteros se despertó y empezó a moverse como un gusano, se despertó el chico.

-Hola- saludó Noah amablemente

-Que mierda queréis- dijo el chico de forma agresiva

-Para quien trabajáis- le miro fijamente al hablarle y esto lo noto el chico

-Lo siento, princesa, eso es información confidencial. Por cierto, ¿para que nos atáis los ojos si ya os hemos visto?-

A ver, razón no le falta. Supongo que algo puedo proteger, por ejemplo que no se aprenda la casa de memoria para que no vengan otra vez y sepan qué hay más entradas aparte de esta.

Noah se acerco al chico y le bajo el trapo que tenían en la cara, acto seguido se inclinó hacia el.

-¿Como te llamas?-

-¿Para que quieres saberlo?-

En ese momento me harté, aparte a Noah y me incliné yo misma hacia el para volverle a preguntar.

-¿Como mierda te llamas?- le dije casi gritando.

-Tranquila chica, se pone agresiva la tía-

-Mira tío, creo que no captas la idea. Yo te pregunto y tú me respondes, y todos contentos- le dije mientras cargaba una de las pistolas que ellos llevaban.

-Uyy, que miedo.  Además seguro que nunca has cogido una pistola en tu vida-

Le dispare en una pierna y el dio un pequeño grito de dolor.

-¿¡Estás loca?!-

-Yo te he avisado, ahora, responde a nuestras preguntas-

El muchacho no dijo nada y solo asintió.

-¿Cómo te llamas?

-Me llamo Liam, pero para los amigos Gael.

-¿Ves como no era tan dificil? Y supongo que al mencionar que para los amigos Gael es que quieres que te llamemos así - dijo Noah

-Tu no, pero la pequeña princesa rebelde si- dijo mientras me miraba y guiñaba el ojo.

-Por favor- dije con desaprobación.

Después de unos segundos una de las chicas se despertó y pareció calmada.

-¿Que queréis?- dijo esta chica mientras se colocaba su lindo pelo rubio.

-Hola, ¿cómo te llamas?- le salude de forma amable.

-¿Es necesario?

-Si, ahora responde por favor

-Me llamo Mía, tengo prohibido daros mas información- dijo mirándome.

¿Cómo me podía ver si tiene un trapo en los ojos? Esta chica es interesante. Le quite el trapo de los ojos y vi sus ojos color zafiro claro.

-¿Para quien trabajáis?- pregunté después de 2 minutos de silencio.

-Tenemos totalmente prohibido deciros información sobre eso- dijeron los dos a la vez

-¿Sois robots?- pregunto Noah confundido.

No pude aguantarme la risa y empecé a reírme a carcajadas.

-Obviamente no lo son, ¿no ves que cuando le dispare el chico sintió el disparo?-dije orgullosa

-¿Te han disparado?- pregunto Mía sería.

-No me duele, no te preocupes-

-Quitarme esto, YA- dijo Mía.

Esta empezó a moverse y se callo al suelo en el intento, grito algo raro y entraron 4 personas más a la casa, cogieron la silla con las personas y se marcharon.

-Mierda.

-No te preocupes, Lucía. Les he puesto un rastreador, ahora sabemos donde van a ir o donde se esconden- dijo orgulloso

-Me encanta lo listo que eres- pensé en voz alta

-¿Cómo?

-No, nada.

Mire fuera de casa y vi q habían rodeado todo con dinamita. Agarre a Noah de la cintura, le cogí de la mano y le arrastre corriendo hacia fuera de la casa. Le lleve a un descampado donde estaba lleno de flores y en uno de los lados había una pequeña cabaña en un árbol. Le lleve allí y cerré la puerta con un par de tablas de madera que había en el suelo.
La casa era acogedora, con una chimenea y dos sillones en una de las paredes de la casa, habían 3 habitaciones.
Ilusionada por la casa, fui corriendo al sofá y me senté, Noah hizo lo mismo y se puso a mi lado.
Nos miramos por 5 minutos, había un silencio incómodo increíble y Noah no paraba de mirarme.

-¿Noah? ?Estas bien?- le dije mientras me acercaba a el y le tocaba la cara con las manos.

Noah sin decirme nada, se abalanzó hacia mi y me besó. No me lo esperaba para nada, pero si os soy sincera, era algo q estaba esperando.
Cuando el paro, se puso rojo y se fue a la cocina.

Me quede un buen rato intentando procesar lo que acababa de pasar, fue tan repentino que se me hizo muy corto. Después de procesarlo un poco fui con Noah, le agarre de la mano y lo lleve fuera al campo lleno de flores. Nos tumbamos en el medio del campo y empezamos a tener una conversación bastante fluida sobre todo lo que nos ha pasado.

De repente se escuchó un sonido en la cabaña que teníamos Noah y yo.