Capítulo 8

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P.O.V Madison:

Y aquí estaba enfrente de la casa de un chico al que acababa de conocer, si señores el profesor no tuvo una mejor idea que poner un proyecto el primer día de clase, respire profundo y toque dos, tres veces después de varios minutos apareció una mujer de unos cuarenta y tantos años.

- ¿Esta Elliot? -Dije mientras ella se apartaba de la entrada para dejarme entrar.

-claro, ¡Elliot aquí abajo hay una chica muy guapa esperándote! -grito a principio de las escaleras, al escuchar esa frase me avergoncé muchísimo baje la cabeza y segurísimo que me había puesto roja como un tomate, escuche a alguien bajando las escaleras ruidosamente levanté la vista topando e con el chico de pelo negro bajando apresuradamente las escaleras de seguro para que la madre no difieras más cosas vergonzosas.

- Oh, venga mujer no te avergüences de seguro que mucha más gente te lo abra dicho. - Dijo sonriéndome.
- Escuche a alguien carraspear. - Em, ¿nos podrías dejar solos mamá? - Dijo Elliot al segundo.

- Claro, pasarlo bien. - Tras decir esto subió os escaleras.

- Lo siento por el comportamiento de mi madre, siempre se comporta así cuando viene un chica a casa. - Entonces eso decía que muchísimas más chicas había pisado esta casa.

- No importa. - Dije sonriéndole.

- Bueno que prefieres, ¿cuarto o salón?

- ¿Salón?

- Pues vamos al salón. - Pasamos por un largo pasillo y al final de este pasillo nos encontramos en el salón había una televisión y un sofá que hacia esquina una chimenea y un comedor, un gran ventanal que daba hacia el patio trasero, el salón era algo elegante y sostificado algo sencillo pero bonito limpio y ordenado.

- Dios el salón el increíble me encanta. - Dije admirando cada centímetro de la casa, sentí a Elliot alado mía, me puse algo nerviosa este chico me atraía un poquito venga sólo tenéis que verlo, el chico es perfecto pelo negro, ojos verdes, Moreno con estiló skate, ¿quién podría resistirse a este chico?

- Me alegra saber que te gusta, ¿quieres algo para beber, comer? O no sé algo.

- no gracias, estoy bien.

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- Dios por fin hemos terminado el trabajo. - Dije apoyando la espalda en el respaldo del sofá y estirando mis brazos y piernas mire la hora en mi móvil, mire hacia la terraza. - Mierda, Elliot se me as hecho tarde, me tengo que ir dije cogiendo mi bolso y metiendo mis cosas correspondientes.

- Te acompaño. - Dijo levantándose del sofá.

- No, enserio no hace falta, es muy tarde.

- Exacto es muy tarde para que tu estés por estas calles paseándote sola, además tengo moto no tardáremos nada en llegar y de todas formas voy a ir a un sitio.

- Como la gran bocazas que soy, y claro la curiosidad me mat no pude contener a preguntarle. - ¿A dónde vas? - El me hecho una mirada y bajamos hacia el garaje y pude ver una moto negra, parecía una moto de carreras, el no me respondió la pregunta que le hice hace varios minutos, me entrego un casco y subí a la moto segundos después el se sentó alante mía y arranco la moto.

- Bueno si no quieres caerte de la moto, te recomiendo que te agarres a mi cintura. - Dijo mirando hacia atrás, no sabía porque pero estaba súper nerviosa.

- Eh, no da igual. - Después de estas palabras acelero y pegue un pequeño grito ya que no me espere a que fuera hacer eso. - ¿Pero, pero que coño te pasa en la cabeza? Por poco me caigo de la jodida moto. - Dije algo alterada.

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⏰ Última actualización: Jun 30, 2015 ⏰

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