Olvido

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Me encontraba en la terraza de mi departamento tomando mi café como todas las mañanas, pero algo estaba mal, tenía el presentimiento de que me olvidaba de algo, escuche el
sonido de mi celular, corrí a cogerlo,
era Emma James mi mejor amiga.

-Bueno.-dije con pereza-.
-donde estas!?.-contesto algo enojada y preocupada-.
-Pues en mi casa en donde mas estaría un sábado por la mañana?.-dije con sarcasmo.-
-Estarías en la prueba de mi vestido de novia BRUTA!.-dijo gritando la ultima palabra.-
-Dios mío Emma, lo siento tanto lo olvide por completo, estoy ahí en unos 15 minutos espérame.-dije colgando al terminar la oracion.-

Corrí directo a mi armario agarre unos jeans negros y una blusa rosa, tome mis zapatos de tacón negros y corrí al baño lo más rápido que pude, desate el moño que me había echo esa mañana y solo pase las manos por mi cabello tratando de peinarlo un poco, mire el reloj de mi iPhone tenía 10 minutos.

Salí de mi casa lo más rápido que pude y me subí a mi Jeep que con tanto esfuerzo me había comprado, maneje hacia la tienda más exclusiva de vestidos de novia que había en San Francisco, cuando por fin logre encontrar un estacionamiento camine lo más rápido que pude hacia el local pero mi falta de coordinación no ayudaba.
Entre y ahí estaba mi mejor amiga de la secundaria, mirándome con una de esas miradas que si fuera posible mataran.

-Ya llegue, ya estoy aquí no te enojes.-dije con la mejor cara de cachorrito triste que pude poner .-
-Ven aquí.-me dijo extendiéndome los brazos-.
Enseguida le correspondi el abrazo
-No puedo enojarme con tigo eres mi hermana, y este día es demaciado importante y te necesito con migo.
-Te prometo que nunca volveré a llegar tarde si?
-Esta bien, ahora quiero que veas mi vestido, vuelvo en unos minutos.

Me senté en el elegante sillón de cuero negro y acepte la copa de champaña que me ofrecían, tome un sorbo y me puse a pensar en lo perfecta que era la vida de Emma.

Era blanca con unos tremendos ojos azules que deslumbraban a cualquiera, un cabello rubio que le llegaba arriba de la cintura con un ondulado perfecto, un cuerpo de modelo que todas envidiaban y obviamente el novio perfecto Aaron Johnson.

No era que le tuviera envidia pero es que soy tan simple que alado de ella ni siquiera me noto.

Soy tan blanca como un papel, tengo mi cabello castaño que empieza lacio, después esta ondulado y al terminar las puntas risadas lo sé una extraña combinación, tampoco tengo un cuerpo feo ni nada de eso de echo voy al gimnasio, desde que era chica había tenido problemas con mi peso pero al cumplir mis 17 años decidí que tenía que cambiar eso y ahora tengo un buen cuerpo que cualquiera chica quisiera tener, pero simplemente me faltaban los hermosos ojos que ella tenía yo simplemente tenía los ojos café claro y unas pestañas largas y rizadas que es de lo único que puedo presumir.

Oh! y otra cosa que olvidaba ella tenía a Aaron el hombre mas guapo que podía existir en esta tierra y el hombre del cual e estado enamorada de hace mucho tiempo, de echo lo más curioso es que se conocieron gracias ami.

Aarón era mi vecino de apartamento en 2012, 3 años viéndolo todos los días y platicando de vez en cuando me basto para enamorarme de aquella anatomía perfectamente musculosa y de sus hermosos ojos Azules y ese cabello rizado que tanto me gusta.

Desgraciadamente para mi Aaron acaba de mudarse hace unos meses con Emma así que ya no lo miro todo los días, de echo es raro cuando me lo encuentro.

Salí de mi burbuja cuando escuche que Emma anunciaba su salida, cuando salió de aquel probador se miraba tan perfecta que me entraron las ganas de llorar.

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Espero que les guste no se mucho de escribir pero espero que sea de su agrado.

Julie...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora