-Que fiesta tan fea, vámonos- BaekHyun se encargó de limpiar el labio de su, ahora esposo, que había comido un montón de pastel y aún tenía crema batida al costado.
-Cariño, es nuestra boda-
-Me duelen los pies- Chanyeol hizo un puchero mientras BaekHyun volvía a acomodar el moño de color negro a juego con el resto del traje, mientras que BaekHyun llevaba uno color blanco, impecable porque si Yeol lo hubiera llevado, lo hubiera ensuciado todo, como su hijo que andaba por ahí, igual que su padre, lleno de crema pastelera.
-Tengo dos bebés, de verdad- BaekHyun volvió a limpiar el rostro de Yeol con un pañuelo, entonces al final, el más alto estaba esperando un pico en los labios, que esta vez, BaekHyun si le correspondía, al mismo tiempo que la mujer que habían contratado para las fotografías, les soltaba el flash, llamando su atención.
-Lo siento, lo siento, ¿fue un mal momento para la fotografía?-
-No, está bien, está bien- dijo Yeol, viendo como su hijo iba pasando por ahí, atrapándolo en sus brazos -De hecho, tómenos una foto ahora que estamos todos- Jae quiso escapar de su agarre pero no solo fue eso, sino que también BaekHyun lo tomó para limpiarle el rostro y que luciera bien para la fotografía.
-¡Ya bájame!-
-No, nos vamos a tomar una bonita fotografía- Chanyeol le peino el cabello a Jae, haciéndolo sonreír hacía la cámara, mientras BaekHyun se sostenía de su brazo, inclinándose un poco hacía él para casi recargar su cabeza sobre su hombro, al mismo tiempo que la mujer los hacía mirar hacía su cámara para captar la imagen, entonces al final, con la luz iluminando sus rostros solo por un momento.
-Ya, ya, eres libre- Jae salió corriendo apenas sus pies tocaron el piso y entonces siguió corriendo con los niños que estaba jugando hacía unos momentos. Entonces BaekHyun lo abrazó con fuerza por el brazo, sonriéndole mostrando toda la fila de sus dientes superiores, haciendo sonreír también a Yeol. -¿Qué pasa?-
-Estoy feliz, demasiado feliz de verdad- BaekHyun restregó su mejilla con el más alto -No había pensado nunca en casarme, no después de Jae, pero después de conocerte, quería todo, quería que Seúl presenciará mi casamiento con un hombre que llevaba en la genética todo lo que alguna vez soñé en alguien y desprendía amor en la mirada, de una manera en que nunca pude ver que alguien lo hiciera conmigo, entonces te conocí, entonces paso todo eso para llegar hasta aquí-
BaekHyun suspiró, mirando todo a su alrededor, era una gran celebración, no demasiado lujosa, pero elegante, toda su familia y amigos, se paseaban por el lugar con una sonrisa, ellos parecían compartir su felicidad, cuando reían, conversaban y bailaban por ahí. Quería ver eso desde hacía mucho, pero nunca pensó que tenerlo enfrente, sería tan satisfactorio.
-Ningún cielo se opuso a este sol que anunciaba el principio de una etapa en donde mi corazón se juntaba con el de alguien más por el resto de mis días y no había nada que dijera que no.- dijo BaekHyun, comenzando de nuevo -Hasta que mi mirada se topó con la tuya, descubriendo que era nuestra boda, y que tú no solo eras un invitado más. Y es entonces cuando aprendí, que las miradas también llevan ecos que suenan fuerte. Las nuestras decían claramente que algo debía estar bien, y que las cosas estaban echando raíces en el lugar correcto para florecer. Corea le ha susurrado a Seúl la verdad de esto, y sus cielos han empezado a llorar por semejante alegría. Cuando desperté de ese sueño, me di cuenta de que no sabía realmente que significaba este sueño. ¿Era una manera de decirme que en algún punto tendría que aceptar que la vida se detenía contigo y que tenía que aprender a sostener solo tus manos, encontrando otras maneras de amar? ¿O era una señal clara, de que no importa cuántos labios besara, nunca serían los que me hacían latir fuerte, porque no eran los tuyos? No lo sé, pero estoy feliz-

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Así empezó todo
RomanceCuando Chanyeol se fue de su casa con la idea de ser mucho más independiente y tener más libertad, en realidad no tenía en mente cruzarse con Baekhyun, un omega recién llegado a su nuevo edificio, con nada más que un montón de esperanza, sueños y un...