Así empezó todo

VEINTITRES

Para ser feliz hay que haber sido infeliz...

Habían pasado un poco más de tres años y ChanYeol creía que a sus veinticinco, había logrado más de lo que esperaba. Había vuelto del extranjero a Seúl y mientras caminaba con Junmyeon en el hospital a dónde había sido transferido, podía decir que más cosas estaban yendo mejor de lo esperado, tal vez demasiado.

-Me alegra tanto tenerte de vuelta, pareces alguien completamente nuevo- dijo Junmyeon, mientras ambos se paseaban por los pasillos del hospital, con las manos en los bolsillos.

-¿Qué puedo decir? Fue demasiado el tiempo afuera, ¿Soy yo o el aire de aquí es demasiado fresco?- el médico mayor río por la mala broma -Me alegra estar de vuelta, ciertamente no hay otro lugar donde me sienta como en casa-

-¿Cómo están tus padres?-

-Bueno, apenas con una semana aquí, no he tenido tiempo de nada, pero ellos saben que volví, los llamé, nos reuniremos la siguiente semana en mi nuevo departamento-

-Lo imaginé, deben estar orgullosos de su hijo mayor-

-Bueno, nadie espera a esta edad estar bien pero eso estoy haciendo y ciertamente me siento entusiasta-

-También escuché lo de tu nueva relación, estoy feliz por ti, no es una vida perfecta sin un poco de romance ¿No?- ChanYeol sonrió mirando su anillo de pareja en la mano, rápidamente deslizándolo fuera de su dedo para guardarlo en el bolsillo de su bata.

-Supongo que es así, Mackenyu y yo no hemos querido formalizar nada aún, me refiero a compromiso y todo eso, queremos ir un poco más lento, tampoco tiene mucho que se graduó y aún no consigue un trabajo estable, así que primero vamos por partes-

-Así es, la madurez en una relación es importante- ChanYeol asintió pensando en esa simple frase, pero rápidamente negó -¿Y YeolJae?-

-No lo he visto en todo este tiempo, al principio traté de hacerlo, pero...luego me enteré que BaekHyun no quería el dinero que yo enviaba, así que trate de llamar, pero no sé a dónde se lo llevó, ni siquiera sé dónde están- ChanYeol suspiró, en su rostro se veía reflejado claramente todo el peso que caía sobre sus hombros aunque ya no era ese joven chico de veinte años-Baekhyun se fue de Anyang poco después de que yo lo hice, hice que mi hermana los buscará, mi padre, incluso mi madre lo hizo, pero solo supimos que había renunciado a su trabajo y se había ido, nadie supo a dónde o cómo, fue como si la tierra se hubiera tragado a ambos, desde entonces los he buscado pero no he tenido suerte. Ahora que volví, esperaba yo seguir buscando-

-Debiste llamarme, no pudieron ir tan lejos,- dijo Junmyeon golpeando con poca fuerza su pecho -Se todo lo que pasaste por ese pequeño y no creo que sea justo que lo alejé de ti-

-Una vez me lo dijo, no es mi hijo, había cosas en las que yo no podía meterme y creo que al final, aunque se supone que terminamos bien, él ya no quería tener nada que ver conmigo, así que supongo que con el tiempo, también quiso hacer su vida-

-Es una lástima que haya actuado así cuando dejaste todo por ellos-

-No se trata de cobrar las cosas que hice, lo hacía porque amaba a ambos, Jae siempre será mi hijo, pero no sé dónde buscarlo, ahora debe tener solo cinco años, es joven e influenciable, si BaekHyun así lo quiso, lo habrá obligado a dejarme atrás-

-Los niños no tienen la culpa de los errores de los mayores, voy a ayudarte a dar con ellos, tu déjalo en mis manos, alguien tan brillante como tú no debería preocuparse por cosas como esas- Junmyeon lo tomo del hombros deteniéndolo en su andar -Te lo aseguró, daré con uno de ellos, no pueden solo haber desaparecido- ChanYeol soltó una risita, el rostro de Junmyeon parecía demasiado serio.