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Derek sonrió todas las veces que se encontró buscando detalles para dejarle a Stiles, sentía que lo correcto era tratar de acercarse un poco antes de que cualquier otra cosa pasara.

Enterarse de que se convertiría en padre fue una noticia muy sorprendente, enterarse de que Stiles llevaba su cachorro en el interior lo hizo derretirse por dentro y en el segundo en qué se dio cuenta de todas las cosas que hizo mal fue demasiado tarde para cualquier cosa.

Fue en busca de Stiles y lo que obtuvo fue rechazo, decidió comenzar a acercarse poco a poco y lo que siguió obteniendo fue rechazo. Entonces pensó que quizás lo que Stiles quería no eran cosas para el bebé, comprendió que Stiles se sentía rechazado y por eso decidió mandar hacer el triskel con la esperanza de avanzar un poco más.

Entonces obtuvo un acercamiento con el chico a pesar de que fue golpeado y atacado, se sintió bien de verlo, fue completamente sincero. Esperó que eso fuera un buen comienzo, a cambio Stiles le dijo que lo pensaría.

No fue un si o un no, aún tenía que esperar a tener una confirmación para poder acercarse por completo. En los siguientes días se encontró pensando en el bebé, en la imagen de Stiles con el vientre abultado, en esa hermosa sonrisa que le daba de vez en cuando y como serían teniendo un cachorro a su cuidado.

Cuando se paseaba por el loft, inconscientemente pensaba en un buen lugar para poner una cuna, en comprar un corralito de juegos y hacer de su espacio un lugar seguro para el bebé. Aún tenía la esperanza de que Stiles le diera la oportunidad de estar juntos, pero para eso tendría que recorrer un largo camino.

Pasó una semana para que Stiles apareciera de nuevo en el loft, esta vez con un semblante más serio y tranquilo. El chico se sentó en el sofá bajo la atenta mirada de Derek y después de suspirar comenzó a hablar.

—Estuve pensando demasiado en esto, por favor Derek, toma asiento que esto podría llevarnos un tiempo — Dijo con calma.

Derek tomó asiento tal y como lo sugirió, una emoción que nunca antes le recorrió cuando su mirada se encontró con los ojos llenos de determinación en el rostro ajeno.

BADUM : STEREKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora