Capítulo 23

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En menos de cuatro minutos, tenía frente a mis ojos una hermosa castaña claro, con ojos color chocolate, parecía algo nerviosa. Me quedé observándola, era muy joven, era de la altura de Eunha. Le indiqué que se sentara en la silla para estar al frente mío, miró alrededor viendo la oficina a la que de seguro nunca entró. Fijé mi vista en Yerin que estaba a un lado de la puerta.

—Yerin, déjanos solas.

—¿Segura? —me clavó su vista, quería que le digiera que se quedara, pero no la necesitaba en este momento.

—Muy segura... —ella negó algo frustrada pero salió, cuando la puerta se cerró miré a la chica— ¿Cuál es tu nombre?

—Winter —afirmó la chica.

—Bien... —ella comenzó a frotar sus manos, su nerviosismo me hizo recordar cuando ingresé por primera vez a la Oficina de Wintour— No estés nerviosa no te haré nada, solo necesito un favor —le sonreí, sus rasgos faciales ahora parecían más relajados.

—¿En qué puedo servirte? —me sonrió, tenía una perfecta dentadura y preciosos labios, era hermosa, se notaba porque era modelo de VOGUE Korea.

—Necesito que salgas conmigo a patinar, quiero darle celos a alguien.

—¿Quiere que seduzca al hombre que le gusta? —ella estaba confundida.

—En realidad... a la mujer que me gusta —le di un poco de tiempo para que asimilara lo que acababa de decirle.

—Oh, no sabía que usted...

—Si bueno, eso no te molesta, ¿o sí? —la miré seria.

—No para nada —rio nerviosa— no es común en la sociedad por eso no creí que usted fuera así, pero tal vez si las chicas de la empresa se enteran querrán seducirla, lo sabe ¿no?

—Pero tú no dirás nada —le advertí— así que si nadie dice nada, nadie intentará seducirme.

—No se preocupe, no diré nada —hizo un cierre con su mano pasando por sus labios— así que tiene toda mi atención para ayudarla, ¿dónde iremos y qué quiere que haga? —me sonrió.

—Busca tu abrigo, te espero abajo en mi auto y ahí te explico todo —ella asintió y se levantó, pero antes de irse se giró para verme de nuevo— ¿Pasa algo?

—Es muy diferente a su tía, usted es más amable —sonrió— me agrada.

—Y tú a mí —le devolví el gesto.

En todo el trayecto, claro con el vidrio polarizado en el medio del auto separándonos del chofer para que no escuchara, fui explicándole lo básico que haríamos. Hablamos en todo el trayecto, para que ella me conociera en algunas cosas y yo también aprendiendo cosas de ella, para cuando nos encontremos con la otra pareja se note que por lo menos sabemos cosas la una de la otra.

Según Winter parecía que arriesgaba demasiado por una chica que me gustaba, pero era un acto lindo y que según ella la chica caería. Pero yo me arriesgaba de esta manera para tener a Eunha conmigo, y claro soltera, así sería más fácil y rápido enamorarla. Necesitaba que estuviera celosa, que provocara que dejara a su novio, sabía que no funcionaría en un día, pero tal vez en unos días sí.

El auto se detuvo, miré por la ventana y todos los edificios más altos que he visto en mi vida estaban a nuestro alrededor, así que significaba que habíamos llegado, estábamos en la Pista de Patinaje de la Plaza de Seúl.

—¿Sabes que está Jung Eunha aquí con su novio? —voltee a mirarla, me acerqué más a ella para ver en qué dirección miraba y a lo lejos vi como Eunha estaba abrazada a Jungkook.

—Sí lo sé... —ella me miró— ya que es a ella a quien le daremos celos.

—¡Oh! Okay... esto nos saldrá bien —me sonrió tomando mi mano— hora del show —el chofer abrió la puerta, cuando salimos Winter me soltó y entrelazo su brazo con el mío.

—Tienes mucha confianza —ella me sonrió, mientras caminábamos acercándonos a la otra pareja.

—Debo tenerla para que Eunha tenga celos, ¿no te parece? —dijo Winter.

—Me parece. Acuérdate que te presentaré como mi amiga, pero actuaremos como si fuéramos más que eso.

—¡Sowon! —ambas nos dejamos de mirar y miré a Eunha que me sonreía junto con su novio, nos acercamos a ambos.

—Oh, hola Eunha, em... Jungkook, ¿verdad? —miré al chico.

—Sí, así es —me extendió su mano y la estreché— un gusto al fin conocerte, Eunha habla mucho de ti, veo que son muy buenas amigas.

—Así es.

—Exacto —nos interrumpió Winter— perdón, yo también soy muy buena amiga de Sowon —giró para verme— ¿No es así?

—La mejor de todas —le sonreí.

—¿A-amigas? —preguntó Eunha con cierto tono.

Winter tomó mis mejillas y ni siquiera miramos a Eunha.

—Claro que soy la mejor —me soltó y beso mi mejilla.

—¿Son así de cariñosas siempre? —volvió a inquirir Eunha.

—Amor, déjalas. Se nota que se quieren mucho —el que habló ahora fue su novio.

—Demasiado.... —sacudió su cabeza.

—Que tonta soy, perdón. No me presenté, soy Winter.

—Mucho gusto Winter —dijo Jungkook.

—Si, si, mucho gusto —dijo Eunha irónica.







—Si, si, mucho gusto —dijo Eunha irónica

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30 días para enamorarla (Wonha)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora