Del Odio Al Deseo (Jake X Phill)

Derrumbe

Los ojos de Phil se reusaban a abrirse ante el sonido incesante de la  puerta principal siendo golpeada, más de una vez había fingido no estar ahí para evitar a sus vecinos y amigos y poder permitirse dormir un poco más, sin embargo el tono urgente del golpeteo lo terminó por sacar de la cama.

–Ya voy...– dijo perezosamente, tal vez para si mismo, pues su voz había salido tan baja que muy difícilmente su inoportuno visita te lo hubiese escuchado.

Caminó a paso moderado hasta la puerta de entrada y al abrir un desesperado Remy entró al departamento como si se tratará de su casa.

–¡Hey! Chico, calma, ¿Que carajo te pasa? Parece como si hubiera comenzado el fin del mundo.– dijo Phil tratando de tranquilizar al agitado chico frente a él.

–La policía...– respiró profundamente. –Lily Donford... ¡Desapareció!–

Las palabras dichas por el chico removieron todo el sistema nervioso de Phil haciendo que su cabeza comenzará a doler debido a la impresión.

–Pero, ¿¡Cómo!? Lily no tiene enemigos de ningún tipo... ¿A qué hora pasó eso?– dijo tomando a Remy del brazo y sacándolo discretamente de su departamento. –¿Cómo sabes eso?– cuestionó.

–Esta mañana.– dijo con voz ya más tranquila. –Un grupo de detectives llegaron al bar preguntando por Lily Donford, ya que una vecina vió a alguien desconocido sacando una bolsa grande por la puerta trasera al rededor de la 6:45 de la mañana, tomando rumbo al bosque...– dijo el chico mirando seriamente a su jefe.

–Dios... Pero, ¿Secuestrada? ¿Estas seguro?– volvió a cuestionar incrédulo.

–Bueno... No quiero ser pesimista, pero se sospecha... Se sospecha que fue asesinato... La policía está registrando su casa, pasé por ahí antes de venir para estar seguro y logré ver qué había mucha sangre...–

–¿Sangre de quien?– cuestionó una tercera voz que se unió a la conversación.

Las miradas de Remy y Phil se encontraron, una llena de miedo y la otra de pena, ¿Que debían decirle? Las cosas eran una bruma espesa aún, una que solo Remy podía deslumbrar.

–Jake, cariño...–

–Jake, Necesito hablar contigo.– dijo Remy interrumpiendo a Phil en el acto.

–No entiendo nada, ¿Que pasa? ¿Porqué parece que ustedes saben algo que no quieren que yo sepa?– cuestionó cruzando sus brazos, pero el sonido lejano del teléfono de Jake alarmando sobre una llamada lo hizo alejarse de ambos.

–¿Será Hannah?– preguntó Phil mirando a su novio caminar a la alcoba.

–Es plausible...–

[...]

Hannah relató con horror los sucesos ocurridos esa mañana... Cuando la policía tocó la puerta de su departamento por la mañana y le contaron lo sucedido la sangre se fue directo a sus pies... Sentía que la hermosa burbuja de calma y paz que había construido se había reventado aparatosamente, sus manos temblaban mientras sus dedos jugaban con la argolla en su dedo anular, veía como Thomas revisaba los documentos que la policía le entregaba a sus padres junto con los posibles escenarios sucedidos, de reojo, miraba la puerta entreabierta de la casa de su pequeña hermana a la vez que miraba su celular con desespero, pues la llamada con su hermano había terminado abruptamente...

Su cabeza, ya de por sí llena de inseguridad y estrés se estaba sobrepasando con lo sucedido, pero fue la cálida mano de su prometido lo que la sacó de aquel trance autoinfligido como método de defensa...

–Hay que tener fé en que ella está viva... Ya verás que las cosas... Las cosas estarán bien...– los brazos de Thomas la cubrieron con confianza y conford, aunque muy dentro de los pensamientos del hombre el conocía la verdad, la verdad dicha por aquellos documentos...

La familia Donford nuevamente sufría un golpe por alguien desconocido, alguien que sabía dónde tocar, alguien que conocía a su familia demasiado bien...

[...]

La llamada dejó a Jake devastado... Sus piernas temblaban y amenazaban con fallar en cualquier momento... Era verdad, tuvo sus roces con Lily, pero rápidamente aprendió a amar a su pequeña hermana, a la pequeña Donford de dorados cabellos y legua afilada... Y ahora, como si de arena entre sus dedos se tratará el mar del destino se la arrebataba sin aviso, sin remordimiento, de un segundo a otro...

–Cariño...– llamo Phil con preocupación en su mirar. –Yo... No soy muy bueno en esto...–

–No tienes que decir nada.– dijo interrumpiendo su hablar. –No es necesario...– las lágrimas silenciosas caían de sus ojos azulados resbalando por sus mejillas pálidas. –yo debí haber estado con ella...–

–¿Qué? No, Jake, nadie podría haber previsto esto, Lily tenía mucho tiempo viviendo sola, al igual que yo, que Hannah o Dan, nadie puede preveer que un maldito loco entrará un día a tu casa para atacarte.– dijo Phil demeritando la culpa de su amado.

–Pero... Yo debería haber estado ahí...–

–Pero nada... Llegaremos al fondo de esto, Jake.–