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Yeonjun 29 años
Beomgyu 20 años
Nota: Estos eventos ocurren en el capítulo 11, durante la fiesta a la que Yeonjun no estaba invitado.
—¿Dónde estás? —dijo Soobin a través de la llamada.
—Ya voy para allá.
—Apúrate que tu novia te está buscando—hablo burlándose de la chica junto a él que había preguntado por Beomgyu varias veces.
—Ya te dije que ni siquiera me gusta—menciono molesta.
—Ya te dije que no es mi novia—se escuchó a través de la línea—. No importa, iré en un minuto.
—Hasta hablan igual—se burló una vez más.
—Más vale que llegue, me prometió que iba a venir—hablo enojada.
—Estuvo aquí antes que tú, pero se fue.
—¿A dónde?
—Su hermano se puso muy ebrio y empezó a hacer un escándalo.
—De hermano no tiene nada—afirmo sarcástica.
—Lo sé, pero eso dicen ellos.
—Los dos son unos tontos—se rio—. Pero no sé cuál de los dos lo es más—dijo indecisa—. Si el que dice que está enamorado abiertamente o el que lo niega.
—Ambos, por eso son tal para cual.
—Y tú y yo somos dos amargados sin pareja—menciono con burla.
—Yo por elección a ti te botaron—empezó la discusión.
—A ti ni siquiera te tomaron como opción—se quejó—. ¿A eso llamas elección?
—¿Vas a pelear por quien está más jodido?
—¿Lo quieres dejar hasta aquí porque sabes que ganas este jodido juego? —ambos discutían con la misma intensidad.
—¿Dónde está Beomgyu? —exclamo desesperado—. Dijo que ya venía.
—Cobarde—susurro la chica.
—Solo quiero que él llegue para que te cuide y yo me pueda ir.
—No necesito que nadie me cuide—grito molesto—. Te puedes ir.
—Bien—lo dudo unos segundos, pero lentamente se levantó del asiento dejando la mesa, sin embargo, al girarse y observarla, se dio cuenta de que no podía dejarla así—. Me quedaré hasta que él llegue.
Después de un rato de silencio ella susurro—. Gracias.
El plan original, propuesto por Beomgyu, era quedarse toda la noche con su amiga que recientemente había sido dejada por su novio, ninguno de ellos quería hacerlo, pero el menor los convenció de ir a esa fiesta y ahora ni siquiera estaba ahí, él se encontraba dormido en casa de su hyung.
Sin importar cuántos mensajes le enviaron y cuantas llamadas hicieron el no despertó hasta la mañana siguiente cuando vio todo el desastre que había causado.
—¿Qué tu qué? —exclamo sorprendido a Soobin—. ¿La besaste?
—Si, pero cállate.
—¿Pero cómo pasó eso? —pregunto confundido—. Solo los deje un rato.
—¿Un rato? —expreso molesto—. No estuviste toda la noche—se quejó una vez más—. Al menos podrías haberme dicho que no regresarías.
—Lo siento, pero aun así tu no me hubieras contestado—dijo con una sonrisa molesta—. Porque estabas muy ocupado besando a alguien.
—Tu no estabas haciendo algo tan diferente—Beomgyu sabía que no era cierto, pero no iba a negarlo porque estaba muy ocupado burlándose de él.
—Pero a mí no me rechazaron— una vez más estalló en carcajadas, tratando de imaginar el patético momento que vivió su amigo.
Y_E_O_N_G_Y_U
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