¿Hoyuelos? || 𝙹𝚞𝚗𝚐𝚆𝚘𝚗 𝚈 𝚃𝚞²

17

— ¿Tuviste un buen día ayer?— preguntó su mamá mientras tomaba de su taza de café.— Apenas llegaste a casa y te quedaste dormida.

— La noche anterior no pude dormir bien, estaba muy cansada.— respondió sin mucha importancia para luego darle una mordida a su pan tostado.— Jay está peor que yo, ni siquiera despierta. ¿Segura que sigue vivo?

— Hierba mala nunca muere, cariño.— contestó y ambas rieron.

— Por cierto, ¿papá a donde fue?

— A la empresa, nuestra cede aquí necesita de su presidente ahora que estamos en estados unidos.

— El padre de Chanyeol era el encargado, ¿verdad?

Asintió.— Sí, pero ahora que estamos aquí tu padre debe hacerse cargo.

— Eso quiere decir que no estará en casa muy seguido.— dijo y soltó un suspiro.— Tu igual tendrás que ir a ayudarlo, ¿verdad?

— Tu padre dijo que me quedara una semana más con ustedes, para que los pueda llevar a algún lugar si es que quieren salir y no se pierdan.

— ¿Lo dice por Jay?

— No te imaginas el escándalo de ayer, tuvimos que reportarlo como niño perdido en el centro comercial.

T/n soltó otra gran carcajada por lo que dijo su madre, imaginandose aquella graciosa situación y lo avergonzado que debió de haber estado Jay.

— Ugh... Hasta mi cuarto se escucha como hablan mal de mi.— aquella voz llamó la atención de ambas, viendo a JongSeong parado a unos metros de ella aún en pijamas, con el cabello desordenado y una graciosa expresión que delataba sueño.

— ¿Ya te viste la cara? Das miedo.

— Deja de molestar o te lanzo la cafetera.— dijo mientras se sentaba a su lado.

— Es muy temprano para pelear, ¿no creen?

— Ella empezó.— se quejó el contrario señalando a su mayor, quién solo sonreía con diversión.

— No es mi culpa que tengas una cara graciosa cuando despiertes, tarado.

Jay iba a responder de no ser porque su madre intervino, pasándole su plato de panqueques y su vaso con jugo de naranja.— Come o se enfriaran los panqueques, JongSeong.

El resto de la mañana transcurrió normal luego de eso, Jay y T/n seguian molestandose mutuamente mientras recibían regaños por parte de su madre. Lo típico.

— Cierto, babosa, ¿hablaste con JungWon ayer?

— No pude hacerlo porque al llegar a casa mi teléfono se quedó sin batería,— respondió, un pequeño puchero se formó en sus labios al recordar que no pudo hablar con su adorable novio el día anterior.— dentro de un rato le llamaré, quiero hablar con él también.

— Él dijo que te había llamado pero que no contestaste.

— ¡¿Enserio?!

Recordó como ayer mientras que hablaba con Lukas sintió algo vibrar dentro de su bolso, iba a ver de que se trataba pero Lukas la mantenía muy entretenida con sus anécdotas que ignoró por completo su teléfono.

Ahora se sentía como una idiota por eso.

— Le llamaré ahora.

Tarde pero hubo
actualización xdd, espero
les guste. ¡Cuidense!