] ́🍨 ... 𝙩𝙤𝙙𝙤𝙧𝙤𝙠𝙞! 𝗖𝗢𝗢𝗟, 𝗛𝗢𝗧, 𝗦𝗪𝗘𝗘𝗧 𝗟𝗢𝗩𝗘 轟 ₊˚ˑ ↷

── 𝗰𝗵𝗮𝗽𝘁𝗲𝗿: 𝘁𝘄𝗲𝗹𝘃𝗲 🍨 ! ↷

— ¡Ume, baja a comer! — Gritó la señora Amaigawa, desde el piso de abajo con esperanzas de que esa vez si bajara.—

Al no obtener respuestas, su rostro se entristeció por la preocupación. Subió las escaleras hasta quedar enfrente de la puerta de su hija. Dio tres ligeros golpes en su puerta, pero seguía sin contestar.

— Cielo... sé que estás triste, pero llevas dos días sin comer apenas nada...—

Bajó la vista, observando el plato de comida ya frío y con moscas que dejó el día anterior: Siquiera lo había probado. Lo tomó y dejó la comida recién hecha donde antes estaba la otra, con sus cubiertos y servilletas.

—Te dejo la sopa... te irá bien. No tardes en comerla, ya sabes que fría no vale nada...—

Al otro lado de la puerta, estaba oscuro pese a que tan solo eran las 2 de la tarde. Se debía a que las persianas estaban cerradas y las cortinas echadas.

Su teléfono volvía a sonar por decimoctava vez ese día: era, como ella lo tenía agendado, "príncipe helado <3". Decidió volver a colgar. No quería hablar con nadie, no quería hacer nada, siquiera comer.

— Veámos... Amaigawa... Amaigawa.... ¡Amaigawa! — Exclamó el bicolor en cuanto vio la placa donde estaba grabada el apellido de su amiga.—

Picó al timbre un tanto nervioso y preocupado. Hacía días que la estaba llamando sin obtener respuesta ni saber nada sobre ella. La puerta fue abierta por aquella misma mujer que se la abrió cuando fue a darle aquellas clases particulares a la de mechas rosadas.

— Todoroki, bienvenido.— Habló la señora.— ¿Vienes a ver a Ume no? .—

— Sí, señora Amaigawa.— Asintió con una reverencia.—

— No estoy segura de que quiera recibir visitas...— Habló mirando al suelo con semblante triste.—

— ¿Ha ocurrido algo? Llevo días tratando de contactar con ella, pero no responde ni mis mensajes ni mis llamadas.—

— Por lo que ella me comentó, llegaste a conocer a su abuela, ¿no es así? — El chico asintió.— El otro día nos llamaron del hospital: su abuela murió hace 3 días.—

— Vaya, lo sospechaba pero quería creer que todavía no había ocurrido.—

— Así que está muy deprimida, estaba muy unida a ella, fue quien la inspiró a ser heroína...—

El ambiente se volvió serio y oscuro. Era un tema complicado y delicado para todos los que estaban enterados y cada uno tuvo formas distintas de encajarlo.