Capitulo 4

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Capitulo Cuatro: " Malestares. "


SEBASTIAN HILXMAN

Sebastian- me llamo Jordan entrando a mi oficina, suspire y aparte la mirada de los documentos

¿Si?- pregunte mirándolo

¿Sabes algo de Kenji?- pregunto, suspire y masajee mi entrecejo dejando los documentos, al mismo tiempo que me recordaba en mi silla

No desde esa cena...- casi gruñi las palabras- y mucho mejor, le partiría la cara de ser así, Lyra ha estado muy triste por sus palabras.- me queje, mirándolo sentarse frente a mi

Han pasado tres semanas Sebastian, deberíamos intentar hablar con él- me recline hacia el escritorio mirándolo a los ojos, apoye mis codos sobre la madera de mi escritorio

Anda si quieres, porque te aseguro que si lo veo le partiré la cara. ¿Quien se cree para hablarle de esa forma a Lyra?- lo mire abrir la boca, rodé los ojo. Sabia lo que iba a decir-, se que esta dolido y todo eso, pero eso no le da derecho de hablarle de esa forma. Mucho menos por esa mujer.- dije serio sin apartarle la mirada, suspiró

Lo entiendo, ¿sabes?, fue difícil verla en portadas de revista colgando de su brazo, verlos tan cercanos. Las miradas que se daban en las entrevistas.- lo mire en todo momento, sin decir absolutamente nada

《 Ella puede asegurar que no pasa nada, hasta jurarlo, de que solo son amigos y ya. Pero él no la ve de esa forma, lo noto, se que también lo notas. Se la come con la mirada. Reconozco su mirada, porque en algún momento yo, nosotros la miramos así.- me recosté en la silla mirándolo 》

《 La desea y anhela tanto como nosotros lo hicimos años atrás.- suspire

Di lo que quieras.- dije sin más- además, no se porque te importa tanto- me recline en mi escritorio mirándolo de forma seria a los ojos- tu novia es Fabiola, recuerdalo.- dije serio, el simplemente me aparto la mirada y yo solté un bufido

《 Ahora si me disculpas, tengo mucho trabajo por hacer.- señale la puerta, el no dijo nada, se puso en pie y salió de mi oficina, mire al techo 》

Sabía de qué hablaba, sabía a qué se refería perfectamente. Me molestaba ese hecho, pero tampoco era como que le dijera que se alejara de él o se distanciara, se enfadaria... Respiré hondo

《 Solo espero que no se de cuenta...- murmure para mi mismo

No era tanto como el la mirada a ella lo que me preocupaba, me preocupaba el como ella lo miraba a él. Sabía que tenía sentimientos hacia él, pero por alguna razón jamás llegaron a nada, y agradecía eso...

Sacudí mi cabeza sacando esas ideas de mi cabeza, confiaba en ella, confiaba en lo que sentía por mí. Aunque, si realmente ella sentía algo por él, no la culparia. El sabía cómo ganarsela, sabía como complacerla, sabía que decir y que hacer para que ella lo quisiera cerca, y eso era lo que más me irritaba

《 ●●● 》

¡Sebas!- salto a mis brazos contenta al verme entrar al departamento, vivíamos juntos desde que regresamos, los tres, y dormíamos en la misma cama con ella en medio de ambos. Era delicioso tenerla de esta forma, no podía negarlo, pero me dolía verla sufrir y entristecer por no tenernos a todos

Hola linda- dije con cariño cargandola luego de dejar caer mi portafolios al suelo, enrollo sus piernas en mi cintura, rodeando sus brazos mi cuello, beso mi labios y yo correspondi ese beso con total gusto

Estaba esperándote, cenaremos solo los dos.- dijo contra mis labios al separarnos de aquel beso, sonreí contento de la idea, acariciando su cintura

Me encanta la idea linda- dije con cariño, besando su mejía

Ya esta todo listo, sube a ponerte cómodo, ¿si?, yo terminare de poner la mesa amor.- dijo con la emoción latente en su voz, solté una risa y asentí con calma para así bajarla, recogió y portafolios y me lo entrego, poniéndose de puntillas para besar mis labios

Ya bajo entonces, no tardaré.- bese su frente, ella sonrió y asintió para así regresar al comedor entre saltitos

Solté una risa mirándola para así dirigirme a las escaleras, el lugar era grande, lo suficiente para tener comodidad total cada uno, sonreí de forma boba caminando por el pasillo para ir a la habitación y cambiarme, joder, la amaba tanto, tanto como el primer día, incluso un poco más que en aquellos años donde empezamos esta disfuncional y extraña relación

Me cambie sin apuro alguno y casi veinte minutos después baje las escaleras caminando al comedor

Estoy listo linda- dije mientras entraba- ¡¡Lyra!!- salte rápidamente al verla tirada en el suelo inconsiente con la ensalada encima- Lyra, Lyra mi amor...- le sacudí la comida que tenia encima para así cargarla yendo a la sala con ella en brazos, la deje sobre uno de los sofás para así correr al baño para buscar el botiquín de primeros auxilios

Sabía que había estado extraña los últimos días, a veces se quedaba completamente quiero por mareos, devolvía la comida e incluso dormía demasiado... Me preocupaba, pero ella aseguraba que estaba bien y que no era nada

Temía que esos malestares fueran algo grave, pero ella se negaba a ir al médico por eso...

Salto de FeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora