El príncipe se reunió con sus padres esa noche por un motivo especial, enamorar a su prometido.
Keisuke quería que su matrimonio fuera bonito y lleno de amor como los de sus amigos o compañeros, el quería que chifuyu se derritiera con tan solo verlo de lejos pero sobre todo, quería amarlo y protegerlo.
El príncipe chifuyu le parecía totalmente precioso y descarado, no le daba miedo mostrar su forma de ser, ni siquiera le dio miedo abrirse ante un extraño que le ofreció un apoyo y una calidez que lo hizo sentirse como en casa.
El rubio solo fue sincero con el contrario porque previamente analizó cada parte de su rostro y expresiones y algo le dijo que aquel extraño era alguien de fiar y una gran persona, así que sin vergüenza ninguna, se fundió en los musculosos y cálidos brazos de su esposo, buscando calidez pero sobre todo, buscando cariño.
El azabache entró en el Salón con un semblante serio y despreocupado, luciendo impecable con esa chaqueta negra de la cual colgaban unas cintas azul marino y un par de cadenas color dorado para darle majestuosidad a su atuendo.
Se sentó y suspiro con preocupación al notar las miradas de sus padres, quienes con solo verlo sabían que tenía algo que decirles.
-Quiero enamorar a mi esposo, realmente quiero que tengamos un precioso matrimonio y tengamos un bebé en las cúpulas que tenga mi pelo y sus ojos-Habló rápidamente como si el tiempo en aquella enorme Sala fuese a desaparecer.
-¿pero tu estas enamorado de él? -Preguntó la reina dubitativa ante las palabras de su hijo.
-No, aún no, pero estoy seguro de que caere por él. Es precioso y me está gustando su personalidad-Respondio con total seguridad y confianza en sus palabras, pues el no mentía.
-Ganate su confianza y luego enciende la llama de la Pasión, es de un adolescente de quien estamos hablando, tendrá las hormonas disparatadas y quien sabe, tal vez la intimidad fortalecerá vuestros lazos-Anuncio el rey mientras miraba a su hijo, quien lo miro confuso.
-¿dices que el acto es algo tan íntimo que podemos fortalecer lazos? Pero eso es lo malo, no quiero aprovecharme de el porque sea un manojo de hormonas, quiero que el me lo pida porque realmente lo desee, entonces yo le daré a mi bello esposo el amor que me pida, hasta entonces no haré nada-Dijo en un tono serio pero seguro. Los Reyes lo miraron y asistieron contentos.
-Así se habla, se ve que has madurado correctamente, hijo-Le dijo la reina orgullosa al escuchar las palabras de su hijo.
Holaa
Les dejo por aquí la vestimenta de bajo y chifuyu (básicamente son las suyas de Príncipe en puzzreve, pero si no saben de cuales hablo,son estos:)
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Dulce mío;Bajifuyu
RomanceEl matrimonio arreglado era una condena para chifuyu, y más si su prometido pasaba de el la mayoría del tiempo, pero con el paso de los años, algo cambió