Negociación
"A veces amar no es suficiente"
Fernando dió el primer paso al enamoramiento. Él la descubrió en la mitad de la sala, dándose cuenta de su presencia cuando reía con Scarlett a su lado. La mirada castaña de Alondra se iluminaba al conversar con su mejor amiga y ese gesto flechó por completo al chico de ojos dorados.
—¿Vamos a dar una vuelta por los muelles? —le comentó él para salir la primera vez.
Alondra no pudo dormir en la noche. Se revolcaba en la cama, mirándose las manos, revisando mentalmente el lugar, calculando el tiempo que demoraría en llegar y meditando sobre el vestido que usaría. El revoltijo de emociones que se arremolinaba en su estómago le daba ganas de gritar de alegría aunque fuesen las doce de la noche.
Esa primera cita la recordaría por toda su vida. Aún siendo anciana suspiraría recordando ese momento donde el sentimiento hacia él nació.
Alondra sentía reventar su corazón con cada una de las aproximaciones de Fernando. Era pequeña, ingenua y desconocía cómo funcionaba los romances superficiales de los demás. Para ella cada uno de estos momentos quedaría grabado a fuego en su alma, se veía con el chico para toda su vida y tejió un futuro alrededor de las citas que tenía con Fernando.
Cómo cuando se juntaron para ir al museo que ella tanto quería. Alondra le comentaba que era uno de los más antiguos de la ciudad, con algunas remodelaciones que respetaban la esencia del lugar y el lugar donde vendían los mejores helados de chocolate a la vuelta. Fernando escuchaba esos discursos con cara de no prestar atención, para después aparecer con las entradas compradas para ir hacia ese lugar al terminar las clases.
Fue durante esa salida que Alondra se aproximó hacia él, tomando su mano por iniciativa propia. Fernando la miró con ternura, porque semanas antes no quiso avanzar tan rápido con ella, notando su inexperiencia en el amor. Tan solo tomó sus dedos aproximandolos hacia su boca con extrema ternura. El corazón de Alondra estaba por salirse de su pecho con ese simple gesto.
¿Podría sobrevivir al primer beso? ese cuestionamiento tuvo respuesta ese mismo día. Alondra estaba mirando una pintura embelesada por la técnica utilizada, por los colores vivos y por la pareja a punto de besarse. Entonces Fernando se arrodilló para quedar frente a su cara.
—¿Curiosidad? —le preguntó el chico riendo por lo bajo al ver cómo se coloreaban las mejillas de la chica, quién tomó valor y en vez de retroceder contestó.
—Muchísima —musitó tratando de mantener el contacto visual y no morir de amor ahí mismo.
Fernando depositó un beso en su boca entreabierta. La sensación se quedó grabada en el cuerpo de Alondra, la calidez de los labios, la sutileza del contacto, la necesidad de la cercanía y el aroma del cuerpo cálido de su acompañante.
Perdió la cabeza después de ese gesto. Todas las emociones reprimidas de Alondra salieron disparadas de su ser. Necesitaba saber donde estaba Fernando, cuando se verían de nuevo, cuando podría estar cerca de él, cuando volvería a besarse sin parar. No le prestaba atención alguna a Scarlett (rompió el corazón de su amiga sin saberlo), no estaba en su casa, mucho menos cumplía con sus actividades y terminó desterrando sus planificadores porque todo giraba en torno a Fernando.
Estaba llegando a niveles insanos de obsesión por el adolescente de cabellos claros. Dejó de comer, de leer sus libros favoritos y de pasear con Scarlett porque todo su tiempo era destinado a enamorar a su novio. Ella se sabía presa de la trampa del amor y anhelaba intensamente que él cayese también.
Pero eso no ocurrió porque Fernando nunca pudo enamorarse de ella. Estuvo luchando en contra de la enorme frustración de saber que amaba más que él. Cada vez que se aproximaba un poco más a su mundo, él la alejaba con ternura tratando de no herirla. No podía contarle sobre su pasado, porque se le hacía tan dificil confiar y porque estaba incapacitado para querer cómo ella anhelaba ser amada.
—Esto es todo Alondra —le comentó un día al verla tan triste —no hay más aparte de este cariño que puedo entregarte.
Después de ese día la chica terminó con él.
◦ ❖ ◦ ❁ ◦ ❖ ◦ ❁ ◦ ❖ ◦ ❁ ◦ ❖ ◦
—No sé porque nunca me dijiste que tú terminaste con él —Scarlett estaba en la casa de su amiga ayudando a sacar los recuerdos de Fernando.
—No recuerdo mencionar que él terminó conmigo —le contestó Alondra mientras revolvía los cajones dispuesta a terminar con todo.
—Pero dijiste que rompió tu corazón —le reprochó la pelirroja tratando de no mirarla a la cara.
—Porque lo hizo —finalmente pudo sacar del fondo del cajón un mechón de pelo que guardaba del muchacho —no con mala intención, no a propósito y mucho menos con algún afán de dañarme —tomó los últimos restos yendo hacia al patio —pero éramos incompatibles.
Mientras caminaban hacia el patio Scarlett no quiso comentarle que Fernando dijo exactamente lo mismo de ella.
—¿Estás segura de esto? —le preguntó por última vez mirando cómo arrojaba todo al bote de basura.
—Segura —Alondra arrojó las cosas sin querer darle más vuelta —entiendo que Fernando no me quiere... ya era hora de aceptarlo.
—No creo...
—Quizás "no quererme" no sea la mejor expresión —la melancólica voz de Alondra hizo que el corazón le doliese a Scarlett —pero él no podía amarme... fue una ridícula pensando que lograría su amor —su mirada se ensombreció al recordarlo —dejé de ser yo tan solo por una ilusión...
Scarlett se aproximó a ella poniendo su mano en el hombro de Alondra.
—Es triste sabes —le contestó deprimida —pero a veces amar a alguien no es suficiente.
La chica de cabellos lacios tan solo asintió ante esas palabras, observando cómo el camión de la basura se llevaba los recuerdos de su relación con Fernando.
ESTÁS LEYENDO
Incompatible #PGP2024
RomanceAlondra siempre tuvo cuidado con todos los pasos que dió en su vida. En su ordenada, pulcra y apretada agenda todo estaba calculado para tener una vida exitosa. Hasta que sin previo aviso le rompieron el corazón. Ella jamás pudo imaginar cuanto le...