—¡Knock, Knock! —su amable voz llega hasta sus oídos, y Jihyo recibe un cordial saludo de la peli-rosa en su puerta—¡Santa Claus llegó adelantado este año, Jihyo-ssi!
Queda pasmada viéndole sin perderse ningún detalle. Sí, definitivamente es Sana, es su vecina, es esa loca adicta a las galletas, la cuál ofreció su techo ayer junto a una cena maravillosa que jamás podrá borrar de su memoria. Oh como se fue toda embobada a su casa, su abuela la tuvo que pellizcar para despertar de ese sueño, ¡más de tres veces!
Era linda, era generosa, era todo lo que Jihyo no solía ser con facilidad, y estaba de más mencionarlo... le tenía cautivada.
Es ella... No puede apartar su vista, y ella muchisimo menos. Ambas se observan, y la sonrisa de oreja a oreja dibujada en el rostro de Sana la contagia un poco, quiere disimularla sin mucho éxito—. Hola, Sana —corresponde el saludo.
Su vecina con un sentido de la moda, bastante particular, hoy esta vestida de pies a cabeza con un trajecito tan Navideño que dolía de ver. Su cabello rosa chicle con ondas, su rostro sigue siendo suave y tierno.
Ayer era un reno, hoy era un Santa Claus. Su gorrito Navideño era la mejor parte de ese outfit. Se preguntaba como es que no temblaba por el frío con esos trajes, o sabía ocultarlo o soportaba ese infernal descenso en la temperatura de Seonmul.
Ella no ha venido sola, una tos demanda su atención también y sus ojos van hacía una cabellera rubia.
Sí, Sana iba acompañada de esa fortachona reina de la paranoía de ayer por la tarde. La joven usaba una camisa de cuadros cubierta por una chaqueta, guantes negros, botas de montaña–muy lindas por cierto–, y su cabello rubio desordenado debajo de su beanie gris. En esos momentos utilizaba unas gafas y las mismas se encontraban empañadas, probablemente por el frío supo identificar Jihyo.
Ahí su sonrisa decayó un poco. ¿Por qué tendría dos visitas a esas horas?
La chica cargaba un humor de perros, Jihyo dedujo que era por cargar tanto peso, típico de Sana... ya lo había hecho con ella ayer y dos veces con esa tal... ¿Jungyeon? ¿Chungyeon?
—Hola a ti también, Jiyeon —habló por fin la más alta. Jihyo rodó los ojos, ¿Ni siquiera se esforzó en preguntar su nombre? Ella menos, para ser justos. Seguro le cayó fatal ayer, y el sentimiento era mutuo, pues Jihyo no soportaba a las exageradas como ella.
—Es Jihyo. Mi nombre es Jihyo —corrigió de mala gana.
Una guerra de miradas se inicia entre Park y Yoo. Cielos, Sana se ve en el medio. Se pregunta cómo es que esas dos idiotas se juzgan con tanta facilidad.
El ambiente se volvió frío y helado como el mismo bajo sus pies. Así que Sana con su infalible carisma, irrumpió antes de que sucediera algo peor:
—¡Jihyo-ssi! ¿Podrías llamar a tu abuela? Hoy hemos venido a decorar tu árbol de Navidad. ¿Vienes, cierto?
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❝ My Christmas' hater ❞ ˢᵃʰʸᵒ
Novela Juvenil«Park Jihyo era alérgica a la Navidad, la detestaba con todo su ser... o bueno, algo parecido. Sana es la defensora número uno de los arboles de pino, la cocoa caliente y las galletas decoradas. ¿Qué pasaría si arrastra a su amargada vecina a su im...