frozen heart- Gadri

frozen heart (chapter 1)

Regalo adelantado de navidad

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Un año exacto que ha pasado desde que le obligaron  a casarse con el alfa más...empalagoso del mundo, no entiende que hizo mal para tener esa mala suerte de toparse con alguien así, y peor haber cometido el grave error de casarse a la primera noche que follaron, ahora entiende porque el celo cuando coinciden, es realmente peligroso, debió quedarse en casa ese día y no salir en busca de supresores porque ese día fue su perdición, fue el día exacto donde se arruino la vida, aunque por otro lado quizás fue el destino pero él no cree en esas tonteras, si hubiese alguna opción de cambiar el pasado sería definitivamente en cambiar el día en que conoció a Pedro González por "accidente"

Odia la vida que ha mantenido a su lado es un ser tan...¿dulce?, que solo estar a su lado le da una dosis de diabetes, intenta comprender como es que siendo un alfa sea tan empalagoso como un omega, es absurdo y nunca lo entenderá aunque lo único que le admira es esa manera tan dominante que es en la cama, es lo único que le encanta,pero más le encanta su polla grande, es tal como a él le gusta

—Cariño te he traído rosas —Pablo le miro de arriba a bajo, luego miro fijamente el ramo de rosas color rojas, luego le miro a los ojos

—No me gustan las rosas —rechazo con indiferencia, paso a su lado con el vaso de agua que tiene en mano, sin voltearse a verle, Pedri se quedo allí parado con una sonrisa avergonzada

Así han sido los doce meses de casados, Pedro intenta consolarlo pero Gavi siempre lo rechaza diciendo cualquier excusa para no tenerle cerca, para cualquier alfa al primer rechazo se hubiese rendido, ya que el orgullo de ellos es muy grande o en algunos, porque Pedro es un alfa que a pesar que Gavi le ha rechazo más de una vez, sigue insistiendo porque realmente le interesa ese pequeño gruñón, que parece que no tuviese un corazón

Y si lo tiene definitivamente es de hielo , ya que es más frío que este mismo

Cogio el primer florero que estuvo a su alcance, metió en este el ramo de rosas, luego lo acomodó frente a la ventana que da al jardín, lugar perfecto para él, ya que es donde más Gavi mira y está allí por un largo tiempo, aún no sabe porqué, pero debe de ser por alguna buena razón, quizás le gusta admirar las flores bien cuidadas

—Joven Pedro, ya ha acabo mi turno, debo irme —Se dio la vuelta encontrándose con la dulce viejecilla, la que se encarga de la cocina —La cena ya está, es solo cuestión de servir, perdón que no lo haga pero ya es mi hora de irme y...

—No hay problema, puedo hacerlo yo, si quiere puede llevarse un poco para usted también —Le respondió con tanta amabilidad que la voz tan sutil del alfa le dio paz, le regalo una sonrisa

—Muchas gracias joven —Le agradeció, Pedro asintió con una sonrisa tierna

Salió de la cocina para darle espacio en servirse a gusto, camino hacia la escalera, subiendo escalón por escalón con la esperanza que Pablo no esté encerrado en su habitación con seguro, ya que  cada vez que hace eso es un reto muy grande para poder comunicarse con él, recorrió unos cinco pasos el pasillo hasta estar frente a la puerta del omega, golpeó una  vez de una manera sutil para no asustar o molestar a Pablo

—Pablo, venga, la cena esta lista, si no es una molestia me gustaría que cenemos juntos —Escuchó música baja y tranquila desde el otro lado de la puerta, pero no escuchó algún ruido proveniente de Gavi, volvió a golpear esta vez un poco más fuerte —Pablo por favor responde —

Después de unos segundos la puerta se abrió de  golpe , asustando un poco al alfa, quien se hizo hacia atrás

—Perdonad si te he molestado pero...

—Si no es nada importante por favor vete —Le Interrumpió, Pedro pasó saliva con dificultad, no puede dejarse ver débil delante de un omega

Aunque para él eso de que los omegas, siempre deben ser sumisos es algo ridículo, no le agrada que muchos alfa, los vean solamente como juguetes sexuales, que los vean inferiores y que los traten como si no valiese nada, realmente eso le hace pensar demasiado sobre en qué sociedad tan mala es en la que viven, aunque tecnológicamente han avanzado, como seres humanos se quedaron atrás

—Pablo quiero que cenemos juntos, claro si te apetece —Gavi le cerró la puerta de un portazo,  dándole así su respuesta, dio un suspiro triste y se dio la vuelta caminando de nuevo hacia la planta baja

Por más que se esfuerce no puede hacer que Pablo le trate bien, que le tenga confianza, pero sobre todo que entienda que él no tuvo la culpa sobre el matrimonio que congeniaron ese veinticuatro de diciembre

Bajo a pasos lentos sin ánimos, nuevamente comerá sólo, quisiese  poder derritir ese corazón de hielo que tiene el omega, pero aunque ha hecho de todo nada da frutos, siente que en vez de avanzar esta yendo más hacia atrás, algo que le frustra cada vez más,viven un año juntos como una pareja casada, pero no sabe absolutamente nada de Gavi más que su nombres y apellidos, pero algo más de él  no sabe absolutamente nada, porque este no quiere abrirse en conocerse

Fue a la cocina, se sirvió la comida que Margara dejo, primero se sirvió el arroz y luego el salmón, no sabe que tipo de comida es esta,  pero si que tiene una pinta muy buena, agradece haber encontrado a la beta, porque de lo contrario ya hubiese muerto del hambre, puesto que no sabe cocinar ni un huevo,  termino de servirse y se fue a sentar en la soledad del gran comedor que tiene, dio un suspiro bajito y cogio el tenedor lo enterró en el arroz, cogiendo un poco, lo llevo a su boca dando así su primer bocado

Justo su móvil empezó a sonar, así que con cuidado de no derramar ninguna migaja, busco su móvil entre el bolsillo de adelante, al encontrarlo lo saco y descolgó

—Hola —Saludo, esperando respuesta

—Hola hijo, ¿como estáis? —La voz de su padre le hizo sonreír, siempre le llama en el momento más adecuado

—Bien padre,¿tú? —

—Me da tanto gusto que estéis bien por fin —Pedri se encabizo, apretó su mano por encima de su muslo

–Si supiese

Pensó

—Si padre, estoy feliz  junto con Pablo —Fingió sonar lo más feliz que pudo, para tapar  que su voz no está apunto de quebrarse porque esta cenando en una soledad que solo le consume su energía, donde quisiera estar en compañía del omega que esta encerrado en la habitación

—Me lo saludas, te llamo para saber como te sientes y porque mañana necesito que vengas a mi oficina —

—¿Es importante que vaya? —Pregunto cansado, siguiendo apretando la mano por encima de su muslo

—necesito que me ayudes con los inventarios así que sí —

—Vale, mañana a primera hora estaré allí —

—Bueno, me tengo que ir, recordad la fiesta de navidad...

—¿la fiesta de navidad? —

—Si, la celebraremos en vuestra casa, por favor venid con Pablo —Pedri trago en seco, convencer a su omega será algo imposible, será la primera navidad en que son invitados de honor y Pablo no es alguien que le guste salir de casa para ir a eventos donde hay mucha gente, así que duda que quiera ir a un lugar donde toda la familia González estará reunida

—Por supuesto padre allí estaremos —Dio su respuesta y se corto la línea, dando por finalizada la llamada, volvió a lo suyo con un nudo en su pecho

Miro alrededor todo esta en silencio, lo único que se logra escuchar es la brisa fría que atraviesa las afueras del hogar, si pudiera pedir un deseo definitivamente seria, que Pablo le tenga un poco se simpatía y quizás cariño para tener una buena relación, porque sí

Pedro se enamoró de Gavi, sabe que es un riesgo grave pero...

Decidió arriesgarse por ese omega gruñón

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