MULTICOLOR (LARRY)

Capítulo 3

-¿Y...ahora qué?- dijo Anne- No tenemos a donde ir, no tenemos ni un quinto, y está claro que no podemos volver a nuestras casas.

-No te preocupes Annie. Te dije que los protegería y eso haré.- no se escuchaba más que seguridad en la voz de Bennet- Hay una cabaña que antes le pertenecía a mi abuela, la heredé y lo mejor es que nunca la registre en la compañía.

Anne suspiró con alivio. Para estos tiempos, si le hubiera dicho que irían hacia una cueva y comerían piedras, lo aceptaría con todo gusto.

Al final, la cabaña era perfecta para la situación. Estaba ubicada en medio del bosque, rodeada por inmensos árboles y el follaje de las plantas era muy espeso, tanto que la camioneta no podía pasar entre ellas y la tuvieron que dejar en la parte trasera de la cabaña cubriéndola con ramas y hojas. A lo lejos se podía escuchar un arroyo.

-¡Dios mío esto es simplemente perfecto!- dijo con asombro Anne -Este lugar es fantástico.

Bennet sonrío orgulloso. -Ven, Anne, tengo que mostrarte algo.

Entraron en la cabaña que al parecer se encontraba abandonada por mucho tiempo, pero se mantenía firme y estable, la madera de la que estaba hecha no estaba podrida, los muebles solo tenían polvo encima, y había un pequeño baño del cual milagrosamente todavía salía agua, pero si se encontraba totalmente sucio. Una cocina con una estufa, un pequeño refrigerador que servían aún porque al parecer estaban "nuevos" porque tenía pinta de nunca haber sido usados. Dos habitaciones que se encontraban al final del pasillo, eran de mediano tamaño, cada una con cama, espejo y gabinete.

-Bienvenidos a nuestro nuevo hogar- dijo suspirando Bennet.

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Los meses pasaron lentamente, la primavera dió paso al verano, el verano al otoño y el otoño al invierno. Así como las estaciones cambiaron, la familia Johnson-Styles cambió. La hermosa Anne fue madurando poco a poco al igual que Bennet, algunas arrugas se formaban debajo de sus ojos, su esbelta figura se fue perdiendo poco a poco, más a causa de la poca comida que comía, pero aun así ella era feliz porque todo el dolor por el que había pasado fue superado esos 10 años gracias a su hermoso ángel, Harry.

Harry, el bello niño que nació siendo diferente a los demás, fue creciendo bajo el amor y el aprecio de Anne, su madre, y bajo la educación, respeto y ética de Bennet, y a pesar de que éste no fuese su padre, él lo quiso como uno.

Los primeros 9 años de vida de Harry, Bennet se ocupó de conseguir todo lo necesario para que éste y Anne pudieran vivir sin ningún problema, a pesar de que después del accidente del hospital donde supuestamente él y los demás que estaban en el piso DECT habían muerto por causa de la gran explosión en la máquina principal, o eso era lo que había escuchado.

Con el tiempo aprendió a ser sigiloso a la hora de conseguir algo, ya que a falta de dinero él tenía que robar, (aunque le parecía una falta de ética y una falta de respeto hacia todo lo que creía) desde pequeños negocios hasta grandes edificios. Todo lo hacía de manera profesional ya que había obtenido experiencia, salía de noche cuando era la hora más fácil para hacerlo y regresaba en la mañana con ropa, juguetes, comida y chucherías para su hijo, su amada y su pequeño hogar. La mayor satisfacción que obtenía de todo eso era ver la cara de alegría Harry y Anne al ver todo eso.

Anne a través de los años fue abriéndose más a él, ella al fin pudo volver a abrir su corazón a alguien más, sabía que estaba vez nada iba a pasar, y él trataba de aprovechar su amor y procurar que existiera siempre. Pero él no podía evitar sentir esa sensación de peligro, ya que Harry el pequeño niño que había nacido con 6 colores diferentes, era dañino para la OPM y al que ver crecer a su hijo, no sólo lo educo con todo el conocimiento básico, sino que lo estudió detalladamente y descubrió que el pequeño era Homosexual. No sabía exactamente la causa del porqué la cura no le sirvió a él, a pesar de ver el gran espectáculo de colores, él tenía la esperanza que la cura actuara, pero nunca lo hizo.