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Aquel suceso aún estaba intacto en las mentes de estos dos, Bill cada ves que recordaba lo sucedido no podía evitar sonreír, al igual que Krister.

Las clases nuevamente empezaron, todo normal.
Extrañamente Bill no había estado asistiendo últimamente.

Caminaba por los pasillos vacíos ya a la salida ya que había terminado mi día aquí en la escuela, pero, iba perdida en mis pensamientos a causa de no saber de Bill.

Me preocupaba, los mensajes tampoco los leía y menos respondía, cuando él siempre lo hace.

-¡Krister!- Se escuchó la voz grave de Tom llamándola haciendo que ella al instante se diera vuelta.

-Oh, Tom, hola- Saludó ella amablemente mientras él le daba una leve sonrisa.

-Hola, sabes, tenía pensado ir a tomarnos un café y luego si gustas te puedo llevar a tu casa.- Ofreció muy amablemente el mayor a lo que la menor sin dudarlo acepto.

Estos iban de camino ya a su destino con un pequeño tráfico a causa de la nieve que había, haciendo que algunos autos anden más lento.

-¿Que pasa, Kris? Estas muy pensativa- Pregunto el mayor mientras la observaba.

-Oh, es que Bill no a venido a la escuela, y me preocupa, tampoco a contestado los mensajes...-Respondió aquella mientras jugaba levemente con sus manos y suspiraba.

-Oh, así que Bill...-

La menor lo miro confundida, mientras esté daba una sonrisa ladina al poco a poco saliendo de sus sospechas.

-Me contó que estaba con Natalie, así que debe estar pasando el rato con ella...-Añadió Tom a lo que Krister abrió sus ojos como plato.

-Oh...-Musito mientras bajaba su cabeza y la giraba para rodear sus ojos y que el mencionado no lo notara.

-Deja de ocultarlo, Kris-

-¿Ocultar que?-

-Que te gusta Bill, que te gusta mi hermano.-

A las palabras de Tom, Kris quedó atónita, solamente bajo su cabeza mientras relamía sus labios al no saber que decir.

-Se que está mal, ¿está bien? No tienes por qué recordármelo.-

-Kris...-

-No me juzgues por favor....-

-Nunca te juzgaría...-Recordó.

-Se que está mal...-

-¡Obligaron a Bill a que le pidiese matrimonio a Natalie!-

A sus palabras el auto se detuvo de un instante indicando que habían llegado, la menor quedó sin palabras, lo observó con sus labios levemente abiertos al igual que sus ojos.

-¿Que?...-

-Esto no te lo debería contar yo, pero sé que estás preocupada, lo e notado. - Revelo Tom mientras al final de sus palabras, dio un suspiro de preocupación y tiraba su cuerpo al asiento del conductor.

Krister solamente lo observaba con impresión, simplemente aun no podía analizar sus palabras dichas, su cuerpo antes estando tenso, ahora se relajó y también se dejó caer en el asiento del copiloto, mientras se llevaba una de sus manos a su boca y estructuraba levemente sus cejas hacia arriba.

Tom me conocía muy bien, sabía toda mi vida, todo lo que me sucedía, él realmente es como un hermano mayor para mi.

-Vayamos ya por el café, y te puedo contar un poco sobre esto...- La menor asintió con su cabeza para luego bajarse del auto e ir a la cafetería.

𝐎𝐋𝐃𝐄𝐑...; Bill KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora