25 de julio del 2015
Supiro fuertemente viendo la cantidad de papeles que deja mi querido—notese el sarcasmo porfavor—jefe en mi escritorio
Lleva solo un mes en la empresa y juro que parece que me hace hacer o volver a hacer todo a proposito, si algo no le gusta, si la palabra no es la apropiada, si la hoja no la imprimi del tamaño corecto, en fin, cualquier cosa, estoy cansada, fisica y mentalmente
Me pongo a trabajar en los dichosos papeles y en algunos pendientes como la agenda del jefe, entre otras cosas mas
Llevo tanto tiempo sumida en el trabajo que no me doy cuenta de la hora que es, la hora del almuerzo, pienso en si debetia almorzar o no, tengo mucho trabajo todavia, talvez deberia adelantar un poco para no llevarme trabajo a casa
Si eso hare, no quiero mas trabajo, asi que me sumergo otra vez entre los papeles sin darme cuenta de lo que sucede a mi alrededor ni del tiempo, estoy tan concentrada en el trabajo que n o me doy cuenta de que alguien esta atrás de mi hasta que volteo y lo veo ahí, lo cual me asusta y doy un pequeño brinco en mi asiento
respiro hondo, ¿Qué clase de fetiche tiene de aparecer de repente? es que, ¿acaso disfruta asustarme o lo hace con todos?
—¿ ya ha terminado su trabajo?
me volteo hacia mi escritorio y ruedo los ojos
— ya casi he terminado señor
no lo veo pero puedo jurar que sonríe, así que volteo a verlo y exactamente esta sonriendo
— no la he visto moverse de aquí en un buen rato dígame, ¿ya ha comido?
me sorprende que sepa que no me he movido de aquí, acaso, ¿me ha estado vigilando? es que acaso también tiene fetiches con vigilar a sus trabajadores
—no señor, necesito adelantar trabajo, tengo mucho
le dije entre dientes, claro que tenia mucho trabajo, mas del que nunca había tenido, era bueno tener mucho trabajo, pero era estresante tener tanto y mas con el jefe que tengo, es una persona egocéntrica pero sin duda es un buen empresario, los ingresos ha subido estos últimos dos días y los clubs nocturnos han tenido mas invitados y clientes
es increíble lo que ha logrado en tan solo unos días, no cabe duda que es un gran empresario que de seguir asi llevara el legado Evans a otro nivel, eso era seguro
—bueno, yo ire a almorzar, ¿por que no me acompaña?
rio, ¿yo? ¿acompañarlo a almorzar?, no
—muchas gracias por la invitación, señor, pero estoy muy ocupada como puede ver
señalo la pila de pápele que tengo todavía por corregir
— insisto, puede seguir mas tarde
no, no me sentaría con el en una mesa, ¿para que? ¿para hablar? y ¿de que hablaríamos?
—no, insisto, no es una buena idea señor
el me ve fijamente y enarca una ceja
—¿por que seria una mala idea?
suspiro, ¿por que simplemente no me deja en paz?
—la gente puede pensar cosas que no son, señor, prefiero evitar cotilleos de mi
el solo rio de lo que le dije, y miro a su alrededor antes de inclinarse hacia mi, quedando a escaso centímetros de mi cara, podía sentir su respiración, la mía creo se había detenido, su mirada bajo a mis labios como si fuese a besarme y no puede evitar que la mía también bajara hacia sus carnosos pero nada femeninos labios