Infidelidad.

Furia.

Cuándo colgó Ben aventó su celular contra el suelo rompiéndolo, se oyeron unos pasos y Rey se asomó mientras le preguntaba:

-Qué sucede cariño?

Ben sonrió al verla y la agarra de la muñeca sentándola sobre él y abrazándola mientras le decía:

-No es nada.

-Ben, no me mientas; se qué algo sucedió, estás enojado.

Esté suspiro y dijo:

-Kydel le habló a Hux histérica de que yo quería el divorcio, estoy muy molesto.

Rey meditó sus palabras y dijo:

-Se que no tiene excusa pero yo hubiera hecho el mismo escándalo o peor.

Ben se rio y dijo:

-Yo jamás me hubiera divorciado de tí amor.

Ella sonrió y lo besó diciéndole:

-Tranquilo de acuerdo, no estés enojado; se que lo que hizo estuvo mal pero debes intentar entenderla.

-Rey, cielo no...

-Sí Ben, yo hubiera quedado destruida si tú me pidieras el divorcio.

-Hablamos de éso de nuevo- le dijo levantando la ceja.

Ella lo miró y le explicó:

-Mira se que lo que hizo estuvo muy mal, muy mal pero ella no sabe que hacer, es lo único que se le ocurre porque se siente perdida y que tú la vayas a dejar fue un golpe muy fuerte.

Ben la miró reflexionando sobre todo lo que acababa de decirle y dijo:

-De acuerdo, tienes razón pero no es excusa para lo que hizo, está demente.

-Entiendo éso, estuvo muy mal pero aún así si te pones en su lugar imagínate todo lo que piensa y siente, en su desesperación fue lo único que se le ocurrió.

El se le quedó viendo y le dijo:

-Sabes, eres tan sabia, agradezco habernos conocido.

Ella se rio y lo besó, luego le preguntó:

-Bajamos a cenar?

-Claro, vámonos.

Cuándo se dirigían al closet Rey le dijo:

-Además de que vas a tener que comprar un nuevo teléfono, podemos pedir una botella de vino y traerla a la habitación.

Ben sonrió y la abrazó haciéndole cosquillas, ella se rio y el la besó y luego le dijo:

-Claro.

La mirada que le dió la puso nerviosa y sonrió mientras le decía:

-Vamos a vestirnos, ya quiero cenar.

Ella agarró ropa interior de encaje y un vestido negro de cóctel, fue al baño a cambiarse mientras Ben se vestía ahí. Cuándo salió el la miró embobado y le dijo:

Estás preciosa.

-Gracias- le sonrió.

Ella fue a agarrar su bolso y metió algunas cosas que necesitaría. Ben se puso su saco y ella le señaló la corbata, al parecer la tenía chueca; el no entendió y se acercó a él y empezó a arreglarsela. Cuándo acabó le dió un beso y le dió la mano diciéndole:

-Nos vamos.

-Sí, vámonos ya!

Ella tomó su abrigo y salieron. Cuándo llegaron al restaurante estaba lleno de gente y Ben veía algunos con los que había hecho negocios.

Se sentaron y pronto les dieron las cartas, ordenaron su cena y Ben le preguntó cuándo trajeron el vino:

-Y tú trabajas Rey?

-Sí, soy diseñadora de interiores en una pequeña empresa que empezamos hace poco.

-Empezamos!

Rey se carcajeo y él la miró serio y ella le dijo:

-Estas celoso, no tienes porqué, somos varios y la formamos entre todos; no te preocupes.

-Hay hombres en tú trabajo!

Rey movió la cabeza y le agarró la mano diciéndole:

-Tranquilo cariño, te amo; debes confiar en mí yo jamás te engañaría.

Ben sonrió y le dijo a modo de disculpa:

-Lo siento, perdón; a veces no puedo controlarlos mucho, confío en ti, es inevitable que los sienta.

Ella se acercó y le dijo:

-Te amo Ben, eres todo para mí; jamás habrá nadie más, lo entiendes verdad- empezó a besarlo y a acariciarle la entrepierna.

-Rey a... mor...

-Espero que éso te quedé claro- le dijo alejándose y sentandose de nuevo.

Él sonrió y le agarró la mano diciéndole que la amaba, desde que la conoció sus celos salían mucho, sabía que debía controlarlos. No ser tan posesivo.

Otro capítulo.

Saludos Marí 😉.