II: Privet Drive.

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El día más caluroso en lo que iba del verano llegaba a su fin, todo era silencioso de una forma tranquila y relajante para los habitantes de Privet drive, en el número cuatro de aquel barrio pequeño pero grande se podía ver a un muchacho de cabello negro y con anteojos grandes, despertanto por el llamado de una señora, estaba abajo de la alacena, con un gran dolor de cabeza abrió los ojos y pudo ver el interior de donde se encontraba, había un hilo colgando y con una mano tiro de aquel hilo y se iluminó el lugar solo para después de un rato, reconocer donde estaba.

"Oh merlin! No me digas que.."

Penso en su mente y después pudo escuchar como alguien saltaba encima de donde estaba y caía polvo, esperando que el dueño de eso pase a la cocina recién salió de donde estaba y pudo ver que estaba en el cuerpo de cuando tenía once años, como si su cuerpo se manejará solo avanzo a la cocina donde pudo ver a tia petunia y vernon y aquel niño llamado dudley, volvió a su pesadilla de once años y no sabía cómo.

Lo único que recordaba era haberse lanzado la maldicion Avada kadavra y ver todo negro para después despertar y ver que tenía once años denuevo, ¿Era suerte? Deberia estar feliz? Poder arreglar todo lo que ha hecho años anteriores? No lo sabia, estaba tan confundido y sumergido en sus pensamientos que ignoraba lo que le decían, preparo el desayuno y vio los miles de regalos que aquel mocoso niño caprichoso tenía, solo rodo los ojos y se fue a su "Cuarto" pues no tenía uno propio.

Recordo lo que pasaria después y decidio no ir, si bien ya sabia que hablaba parsel y que lo iban a culpar de lo que hizo decidio no hacerlo, al parecer sus tíos no le dijieron nada pues escucho como el auto arrancaba y ya nadie estaba en aquella casa, paso un corto tiempo donde harry se preparo su propio desayuno y lavo los platos para hacer que no lo hizo y sus tíos no lo regañaran, pudo ver cómo llegaba correo y espero pacientemente a que dudley, tia petunia y vernon llegaran y así fue, llegaron y se pusieron a hacer cualquier cosa.

— ¡Harry! Ve a recojer el correo, Ahora! — Con una voz irritante mando a harry a recojerlo, el de lentes sabiendo lo que pasaria vio la Carta de Hogwarts y la escondio en donde dormia y las demás cosas se las dio a su tío vernon para luego irse a debajo de la alacena y leer la Carta.

No hizo falta leer todo pues sabia lo que decía y solo con un lapiz que tenia aseguro su ingreso a Hogwarts para después darselo a la lechuza que estaba afuera y arreglarse (si es que podía) un poco.

Se dio cuenta que sus ojos eran más claros y brillantes, casi y se acerca al color de la maldición Avada kadavra y no sabia si estar bien con eso o no.

Intento controlar su magia y intentar que cosas se muevan, fue difícil para el y mucho, pero poco a poco a lo largo de dos horas logró hacer un avance con eso y estuvo orgulloso de eso, intentaría hacer magia sin varita.

Al llegar la noche y ya todos los habitantes de Privet drive estén dormidos harry abrió la puerta de donde dormia en silencio y con mucho esfuerzo de su magia deseo que la puerta que estaba asegurada con llave se abriera, al principio no lo logró ...

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Al llegar la noche y ya todos los habitantes de Privet drive estén dormidos harry abrió la puerta de donde dormia en silencio y con mucho esfuerzo de su magia deseo que la puerta que estaba asegurada con llave se abriera, al principio no lo logró pero cuando escucho el sonido se alegro y abrió la puerta, hizo un gran ruido pero no desperto a nadie.

Se mio, Malfoy | Harco |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora