capítulo 14.

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¡Nooooooo! ¡Alejo! ¡Alejo por favor despierta!. Gritaba Villa sacudiendo a su amigo por los hombros.

Maldita sea, todo esto es mi culpa. Aguanta por favor alejo, la ambulancia ya viene. Pedía el chico desesperado sin dejar de mover al ojos marrones.

¡Tú me lo advertiste!, ¡tú me lo advertiste y yo no quise escucharte!; alejo por favor no te mueras porque si te mueres no me lo voy a perdonar nunca.

Pasaban los minutos y la ambulancia no llegaba, así que Villa como pudo lo cargó, se lo llevó lejos de allí y trató de detener la hemorragia él mismo mientras que llamaba a su padre.

Qué demonios pasó Juan Pablo villamil Cortés?. Preguntó Mauricio en cuanto llegó a donde estaba villamil.

El ojos verdes comenzó a relatar lo sucedido sin olvidar ningún detalle y en cuanto terminó, Mauricio tomó a Alejo entre sus brazos, lo montó al carro y junto con villamil se lo llevó directamente al hospital.

  Definitivamente estás loco Juan Pablo villamil Cortés. Reprochó Mauricio una vez que internaron a Alejo en emergencias y los chicos se quedaron en la sala de espera.

  ¡Yo no lo vi papá! ¡Te juro que si yo hubiera visto que él estaba allí no hubiera disparado al aire!.
  Es que por Dios Juan Pablo ¡No debiste haber aceptado eso en primer lugar!.

  Bueno bueno, deberían calmarse un poco este no es momento para regaños. Trató de tranquilizarlo Simón quien había llegado junto a Mauricio pero no se bajó en ningún momento del carro.

  Ojalá que no le pase nada alejo porque no me lo voy a perdonar jamás. Decía villamil al mismo tiempo que Simón lo tomaba entre sus brazos y le acariciaba la cabeza con cariño.

  Pasaban las horas y los chicos nada que tenían información sobre Alejandro.

  Voy a intentar ver si puedo tener información sobre Alejandro, ustedes dos se quedan acá y no se me muevan. Anunció Mauricio y los villargas solo asintieron con la cabeza en modo de respuesta.

  Mauricio desapareció por el pasillo y mientras los villargas esperaban, el ojos verdes recibió una llamada de malaver la cuál por supuesto decidió ignorar.

  Ya era la tercera vez que Pedro llamaba y Por ende la tercera vez que Juan Pablo lo ignoraba. El teléfono de villamil no dejaba de sonar, así que Simón decidió tomarlo y contestar.

  ¡Mire imbécil pendejo desgraciado hijo de puta! hágame el favor y no vuelva a molestar a Juan Pablo porque de lo contrario me veré obligado a acusarlo con Mauricio y con la policía. Y sin esperar ningún tipo de respuesta por parte del contrario y sin decir más nada, simplemente colgó.

  Muchas gracias Simón, la verdad es que no sabía cómo hacer para que Pedro dejara de molestarme.

  Luego de un rato, Mauricio volvió a donde estaban los chicos y les dijo que Alejandro había reaccionado pero que no sabían si iba a estar bien.

  Necesito verlo papá. Pidió villamil con los ojos cristalizados.

  Entonces ve, creo que tienes muchas explicaciones que darle. Respondió Mauricio seriamente.

  Villamil se dirigió lentamente a la habitación en la cual Alejo se encontraba y al entrar, lo vio acostado con los ojos entre cerrados y algunas máquinas conectadas.

  Lo siento. Susurró el menor acariciando la cabeza del contrario.

  Yo sé que un lo siento no va a resolver todo esto pero te juro que me siento mal al verte acá, en esta situación. Ahora me doy cuenta que debí haberte escuchado desde el primer instante en el que me hadvertiste que Pedro no tenía buenas intenciones pero supongo que me dejé llevar por la ambición y  me convertí en un completo materialista y superficial. Por favor necesito que me digas que carajo estabas haciendo tú ahí, porqué me seguiste o es que acaso Pedro te obligó a ir; necesito que me lo digas por favor, estoy decidido a dejar toda esta mierda de una buena vez pero no te niego que tengo mucho miedo a la reacción de Pedro y que le haga algún daño a mí papá, a los Vargas o incluso a ti. El mayor detuvo el monólogo del ojiverde apretando su mano fuertemente y levantando el dedo índice para hacerle una señal que le indicaba que guardara silencio.

  Escucha Papo, en este momento no sirve de nada lamentarse por lo que pudo haber sido y no fue, ahora es momento de intentar seguir adelante y aprender de los errores que hemos cometido para no volverlos a cometer en un futuro. La razón por la que yo estaba allá, era porque sabía a lo que te ibas a enfrentar, puesto que antes de que Pedro te llamara para que entregaras la droga a ese cartel, había llamado a la policía por ende, yo sabía que ellos llegarían al mismo tiempo que tú y no podía permitir que ellos te atraparan; intenté detenerte antes de que entraras pero ibas tan rápido que no te importaba que esos oficiales estubieran detrás de ti y el que te estaba persiguiendo cuando señalaste la bodega no era el policía, era yo, solo que no podía hablarte y sabía que no me escucharías por lo asustado que estabas. Mira Juan Pablo, no quiero que pienses que te odio porque no es así, yo sabía que esto podía suceder y aún así preferí ponerme a mí en riesgo que dejar que tú salieras lastimado; estos policías créeme que no iban con la intención de hablar contigo. Explicó el ojos marrones y Villa por su parte no paraba de llorar como un niño pequeño cuando lo alejan de sus papás.

  Espera ¿No se supone que Pedro es el dueño de este cartel? entonces ¿por qué haría algo así? Digo, llamar a la policía en el momento en el que uno de los tuyos está cumpliendo con su trabajo no creo que sea muy inteligente de su parte, a menos que...

  A menos que quisiera desaparecer te; exactamente eso era lo que quería porque se enteró de que gracias a ti Isaza, makis, Camila, Olga y Natalia abandonaron el cartel y por eso estaba dispuesto a destruirte sin importar nada. Debo confesarte que yo también tuve la oportunidad de uir pero no lo hice porque sabía que tú seguías allí y necesitaba hacer lo que fuera para que te alejaras de todo esto.

  Cálmate Papo, te prometo que yo voy a estar bien y en cuanto salga de acá, vamos a hacer caer a malaver de una buena vez para que ya no siga aprovechándose de chicos jóvenes como tú y como yo que lo único que quieren es salir adelante y lo que consiguen es una vida más miserable de la que llevaban. Prometió el mayor y Villa solo asintió y se fue para que Alejo descansara un rato.

  Pasaron alrededor de dos semanas y Alejo se encontraba en su casa ya bastante recuperado. Por suerte para todos, La bala solo lo había rosado, por lo tanto, no le había causado ningún daño del que se pudieran lamentar.

  Juan Pablo villamil se encontraba caminando por las calles cuando de repente sintió que alguien lo venía persiguiendo. El chico aceleró su paso, mas de pronto el sujeto logró alcanzarlo Y aunque el ojiverde corrió y corrió lo más rápido que pudo, el otro fue más ágil y con un movimiento estratégico le bloqueó el camino, lo dejó inconsciente y finalmente se lo llevó en una camioneta completamente negra.

  Te metiste con quien no debías, ahora atente a las consecuencias querido villamil. Esas fueron las palabras del secuestrador, antes de acelerar y desaparecer en las frías y oscuras calles de Bogotá.

nostalgia (Villargas / Isamil).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora