-Amor descanza, has tenido un día muy largo y cansado- me dice acercándose a mi.
-Creo que sí, incluso creo y te escuché decir mi reina- lo miro.
-Si lo hice. ¿Estás celosa?- pregunta acercándose a mi.
-Para nada, solo se me hizo extraño- lo miré.
-Rachel Berry, acepta que estás celosa- ríe y besa mi frente.
-Bueno, el punto aqui es ¿A quién le has dicho mi reina?- levanto una ceja.
-A mi madre, vendrá el fin de semana ¿Lo olvidaste? - pregunta confundido.
Oh rayos, la cena en familia era este fin de semana y no habia avisado a Will.
-Will vendrá de seguro, me encojo de hombros-.
-¿Vendrá con Emma?- pregunta.
-No creo, Shelby vendrá y ellas no se lleban muy bien que digamos- hice una mueca.
William Berry y Shelby Corcoran son las personas más encantadoras de las que he podido conocer y tengo la suerte de que ambos sean mis padres. Sin embargo, tanta dulzura por parte de ellos era demasiado en mi familia, por lo que decidieron separarse. Ahora Will tiene otra esposa Emma, la cual me cae muy bien y es como mi segunda madre. Pero Shelby la odia, el odio es mutuo de parte de ellas.
-Es que nunca había escuchado que le digas así a tu madre-digo volviendo al tema mientras me encojo de hombros. -Solo es eso- sonrío.
-Bueno, tu eres mi amor, mi cielo, mi todo Rachel- besa mi frente. -Te amo mucho pequeña-
-Y yo a ti Jesse- cierro los ojos al sentir su beso en la frente. -¿No quieres venir a dormir conmigo un rato?-
-Suena tentador- ríe -pero tengo trabajo que hacer Rach- hizo una mueca.
-Solo es un rato, además no solo se puede dormir en una cama- digo juguetona y veo como se queda con la boca abierta. Lo que hace que ría.
-Esta nueva Rachel Berry me gusta- bromea y se tumba a mi lado.
-Pervertido- río.
-Tú pervertido- empieza a besarme el cuello y yo cierro mis ojos sintiendolo.
De un momento a otro escucho sonar una celular. ¿Un celular? Ese tono era mio, me separo de Jesse y él me ve confundido.
-Ahora vuelvo, no te muevas- le digo y salgo en busca del celular.
-¿Hola?- contesto sin ver el número.
-Rachel, soy Burt. Finn está metido en problemas, está detenido. Yo acabo de salir de viaje y no se a quién recurrir. Por favor- me suplica.
-Claro, no se preocupa señor. Yo me encargo-
-Muchas gracias, sabía que podía confiar en ti. Hasta luego Rachel y nuevamente muchas gracias-
-No hay de que- ambos colgamos y suspiro. Adiós noche desenfrenada con Jesse.
-¿Todo bien amor?- pregunta Jesse desde mi habitación.
Camino y me recuesto junto a él -Tengo que sacar al niño de papi de los problemas en que se metió- digo mirándolo.
-Oh...eso quiere decir que no habrá Rachel juguetona hoy- lo golpeo con mi codo.
-Tonto, debo irme. Prometo recompensarte cuando vuelva- acaricia mi mejilla.
-No te vallas, solo quiero pasar un rato así contigo. Tu y yo mirándonos y hablando de la vida- coloca un mechón de cabello tras mi oreja.
-Se lo prometí a mi jefe- suspiré.