No es mi culpa que estes enamorada de mi o algo así

No nos desconozcamos

Pov ___
Estaba en mi cama, pensativa, ¿por qué Regina se comportó como una malcriada? ¿Qué culpa tiene Gretchen y por qué Cady siempre está involucrada de alguna forma? Que importa. Al menos Karen es la única que no tiene nada que ver con esto; Es muy buena y no puede estar de un lado, siempre está de ambos mandos. En fin, debo levantarme, es momento de que me arregle para ir a la escuela.

Mientras me aplicaba rubor alguien llamó a la puerta —Adelante— conteste, sin apartar mi vista del espejo.

Entró Gretchen, rápido me levanté y la miré horrorizada y confundida. Ella no es Gretchen, imposible, estaba con sus ojos llorosos. Pobrecita, de seguro lloro toda la noche por sus ojos hinchados.

—¿Te encuentras bien Gretchi? Sin ofender pero te vez terrible...

—¡Ya lo sé! Pero no puedo soportarlo, me empujó y abofeteó. ¿Qué harías tú si estuvieras en mi lugar? Después de todo tú eres la más cercana a Regina, necesito que me ayudes para que ella y yo podamos seguir siendo amigas, ¡mi estabilidad emocional depende de ello!— Gritó la última parte mientras sus ojos escurrían, los labios le temblaban y sus ojos decían más que sus palabras.

No podía creer que estaba tan desesperada por la amistad de Regina, me molestaba...ella no merecía la humillación que le hizo pasar George y no puedo creer que aún con lo que hizo la quiera.

—No puedo ayudarte mucho, Regina no me quiere hablar así que...— suspire —No soy de gran ayuda ahora.

Gretchen se negaba con la cabeza, se sentó en mi cama mientras se tapaba el rostro.

—¡Me rehúso a que Karen es la favorita ahora!

Solo la veía con tristeza y un poco de irritación. Me duele pero a la vez odio que ella insista con el tema, es como una niña que a fuerzas quiere que le compren el dulce que ella quiere.

—Lo intentaré pero no prometo nada, Regina es impredecible pero muy buena persona

La morena levantó la mirada y me sonrió —Me alegra que aunque sea una de las cuatro tiene corazón y no somos completamente de plástico— mencionó mientras me veía con un brillo en su mirar.

Ya en la escuela vi a Regina hablar con Karen, iba a ir hablar con ella hasta que Cady se me acercó.

—¡Buenos días ___! Ayer estuvo loca la fiesta, más por lo de Gretchen y Regina. Oye, ¿no crees qué deberíamos hacer algo al respecto? ¿Darle un trago de su propia medicina a George?— Mencionó Cady, quien jugaba con sus dedos.

Me estaba dando cuenta de lo hipócrita que es esa pelirroja —¿Con exactitud de qué hablas? ¿Qué planeas?— me detuve, tenía que escuchar su "plan" si podía ser útil de algo.

—Tu sabes, bajarla de las estrellas y...— dejó de hablar, volteó a ver un salón vacío donde estaban Damián y Janis susurrándole.

Pocos segundos Damián y Janis me notaron, solo se limitaron a sonreír —Ay hola ___, ¿ese es tu color de uñas natural?— señaló mis uñas Damián.

Revise mis uñas por un rato —Casi, casi...— respondí entre susurros.

—Te digo que necesito esas uñas, ¡contémplalas Janis! Son magníficas para una chica de plástico— al decir lo último Janis le dio un codazo en las costillas y este gruño.

—Ignóralo ____, es demasiado gay como para funcionar. Te robamos un rato a Cady, lo lamento pero, ¿puedes guardar el secreto?

—Si claro, y...¿ustedes me contarían qué traman? Últimamente Regina y yo no andamos en buenos términos y me gustaría ayudarles con su "plan" para bajarla del trono, según palabras de Cady.

Ambos miraron a Cady con un poco de desaprobación porque me comentó del plan, pero mi mentira fue convincente. ¿Quien sospecharía de ___? La única plástica con corazón igual al de un humano, un corazón que "sigue bombeando bondad"

—Confiamos en ti, en mi casa después de tu salida de compras y café con Regina. Por favor llega después de 3 minutos por que Damián y yo nos pondremos a ver una película que compró en el tianguis de mala fama— comentó Janis mientras se llevaba a Cady al salón vacío.

Damián sacó el disco y me lo enseñó —Es de Romeo y Julieta— mencionó.

Asentí solo para responder ante su comentario, la verdad no me importaba lo que fueran a ver. Lo que importa es saber que traman, y lo descubriré tarde o temprano.

Café con Regina
Silencio, la magnífica palabra para describir este momento de silencio largo e incómodo, solo viendo a nuestros alrededores. Prefería más el silencio mientras comprábamos ropa, ¿pero esto? ¡Es el infierno!

—¿No vas hablarme Regina? ¿Ni siquiera para agradecer por qué yo pagué todo?

Silencio, wow...que lindo

—No es eso, solo no quiero hablar contigo. No lo entenderías— al final contestó para luego darle un sorbo a su café.

Gire los ojos —¿Cómo quieres que entienda si no me dejas hacerlo? Por favor...yo, tengo información de Cady— Okey, no quiero delatarla ya que no quiero darle la razón a Regina. Pero...podría alterar la verdad, un poco

Me miro con atención, esperando a mi respuesta. Viéndome unos segundos para luego volver a ver el humo de su café —Escucho...— susurró.

—Se que trama algo, ¿qué es? No lo sé, pero Gretchen me lo contó

—¿Gretchen? Gretchen...

Veía su rostro pensativo. Si quería demostrarle al mundo lo falsa que es Cady necesitará a alguien que sea sus oídos cuando ella no escuche, sus ojos cuando ciega este.

—Estoy decidida, me disculparé con ella. Pero solo le enviaré una carta de disculpas y unos chocolates, ¿entendido?— Volvió a beber de su café.

—Entiendo— respondí para hacer lo mismo, beber de mi café, admirando el sabor de este.

—Por cierto...— Mencionó Regina entre susurros, como si quisiera encubrir lo que dirá, una sonrisa de dibujo en su rostro —¿Cómo te quedó el cuello después de lo de anoche?

Me puse roja, color carmesí. Me había olvidado de la noche agitada con ella después de unos tragos de más que tomé ayer.

—¿Cómo dijiste?

Regina rió, sentí su pie dirigirse a mí entre pierna mientras su rostro llevaba inocencia en sí.

—Sabes a lo que me refiero, te mordí fuerte...además, las amigas que se besan son la mejor compañía, y tú y yo somos la prueba viviente de ello— mencionó con una sonrisa picaresca, su tono coqueto mientras se relamía los dientes al acabar de hablar.