Boy meets luv

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- ¿Por qué sigues esperando por él?

Kunigami le había preguntado a Reo mientras tomaban un café en el centro de París. El joven Mikage daba gracias por tener a alguien conocido en el mismo equipo con el que poder hablar libremente. Los sentimientos que tenía por Nagi, parecía que todo el mundo se daba cuenta de ellos exceptuando al propio Seishirou.

- Si pudiera pasar página ya lo habría hecho hace años.

- Reo, no puedes seguir viviendo como si este amor por Nagi no te estuviera matando por dentro. Tienes miedo de confesarle tus sentimientos para así no perder vuestra amistad, pero, a menos que sea mutuo, deberías intentar deshacerte de este enamoramiento, ya sea confesándolos o buscando a alguien que realmente te ame de la manera que tú quieres.

- ¿Crees que si le dijera lo que siento, Nagi aceptaría?

- A ver, teniendo en cuenta que tú eres el único que le daría todo hecho para que él no tuviera que hacer nada en la vida yo diría que por lo menos algo de cariño te tendrá, ¿no?

Reo exhaló un cansado suspiro y le dio otro sorbo a su café.

- Hace ya casi dos semanas que no me contesta las llamadas ni me manda mensajes.

- ¿QUÉ? ¿Nagi Seishirou no respondiendo tus mensajes? Eso sí que es nuevo.

- Ha estado saliendo con Isagi, pero lleva ya una semana sin dar señales de vida y tampoco ha publicado nada en redes sociales. Chigiri me ha dicho que es porque Isagi y él han estado saliendo por ahí, incluso ha llevado a Nagi a un pub.

- Reo... ¿Aún sigues con el tema de Isagi?

- Yo...

Los ojos de Reo empezaron a humedecerse. En momentos así, odiaba ser tan reconocido ya que no podría llorar en paz y que tendría que esconder su dolor hasta que llegara a su casa y se sintiera seguro debajo de las sábanas. Rensuke también postraba un rostro adolorido, al fin y al cabo era el único que sabía a cerca del estado deplorable de Reo en relación a Nagi. Fue un día después de haber tenido un partido contra Manshine, cuando Nagi prefirió llamar a Isagi en vez de pasar tiempo con Reo, a pesar de que llevaban un par de meses sin verse en persona. Cuando Kunigami entró a los vestuarios se encontró con Reo sentado en el suelo mientras lloraba desconsoladamente. El joven heredero había intentado esconder su patética expresión pero Rensuke no dudó en ofrecer su hombro para que llorara en él.

- Reo, odio verte así. Deberías intentar hablar con Nagi, sincerarte aunque para él sea un fastidio.

- ... Tengo miedo de eso precisamente, de que piense que solo soy un incordio y que siga adelante mientras yo me quedo estancado.

- Tienes que entender que, lleguéis a estar juntos o no, Nagi en algún momento desarrollará algún nivel de independencia, lo quieras o no. Es humano como nosotros e irá aprendiendo a partir de lo que experimente en su vida.

- ¿Pero y si piensa que mis sentimientos son repugnantes?

- ¡Para el carro! No te estoy diciendo que te confieses, solo que empieces hablando de como te sientes en relación a él como amigo, como te sientes ante esta distancia que está poniendo sobre vosotros. Una vez que hayáis arreglado eso podrás pasar a la parte de confesarte.

Reo se quedó pensativo unos instantes. Se había enfocado tanto en sus intereses románticos que había dejado de ver a Nagi completamente como su mejor amigo. Decidido, sacó su móvil del bolsillo y le mandó un mensaje a Nagi indicándole que iba a ir a Inglaterra de visita. No esperó a recibir respuesta, guardando de nuevo el aparato y cambiando de tema de conversación con Kunigami.