Lovesick Girls - Adaptación [FreenBecky]

21

Freen despertaba por el llamado de Becky, ella había despertado más temprano para poder darse una ducha y al ver que la castaña seguía durmiendo, se acercó para levantarla moviendo su hombro entre toques.

Vaya, hasta cuando dormía traía los ceños fruncidos.

—Freen — volvía a llamar.

—Déjame dormir — la castaña se quejó, buscó la sábana con los ojos cerrados y al encontrarla, se cubrió por completo.

—Ya debes levantarte, es tarde — respondió Becky.

Freen, dudosa pero aún enfadada, se arrastró a su celular que estaba sobre la mesita de noche y observó la hora: 4:20 a.m.

—¿Estás idiota? ¡Son las cuatro de la mañana! — reprochó Freen volviendo a cubrirse.

—Levántate — Becky ordenó, pero la castaña la ignoraba — Freen — ocurrió lo mismo — No me obligues a usar la fuerza — advirtió, no recibió respuesta, Becky bufó y metiendo sus manos por debajo de las sábanas, tomándola de los tobillos —   ¡Levántate! — jaló pero Freen se sujetó del respaldo de la cama con fuerza.

—¡Déjame dormir! — que quejaba en berrinches.

—¡Freen! — Becky jaló con más fuerza que la castaña se elevó por unos segundos.

—¡Ya déjame! — Freen removía sus pies — ¡No tienes derecho de tocarme! — la empujó con los pies, logrando librarse y envolverse de nuevo para dormir.

La rubia bufó y se levantó las mangas, se detuvo a su lado y tiró la sábana de un movimiento.

—¡Oye! — Freen se quejó. Becky tomó sus manos y la llevó a ella rápidamente, colocándola sobre su hombro y sacándole de una vez por todas de la cama —   Ya te crees mucho con esto, ¿Verdad? Te aprovechas porque tienes fuerza — Freen colgaba resignada y con un puchero — Babosa.

—Niñita — respondió Becky al llegar al pequeño baño, la dejó en el suelo y le tendió una toalla — Ahora báñate.

Freen la recibió de mala gana y Becky salió del baño, la castaña giró para bañarse cuando quedó con la boca semiabierta al ver solo una tina con un balde llena de agua.

—Y si te quejas te baño yo misma — advirtió Becky detrás de la puerta, Freen se cubrió la boca de inmediato, negando.

Becky la dejó sola y se acercó a la cocina para ir preparando el desayuno, cuando se aguantó la risa al oír el grito de Freen.

—¡ESTÁ HELADA!

Bueno, tal vez no debió ponerle hielo unos minutos antes.

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—¿Y aún así te atreves a decir que esa chica no es una mala compañía? — Billy la observó desde las escaleras, su hermana estaba a punto de volver a escaparse hasta que se detuvo en la puerta al escuchar su voz.

—Billy...— decía nerviosa.

—Te escapas de casa, llegas tarde, llegas ebria, desobedeces a tu familia y vas a calles peligrosas, en algún momento te pasará algo, Jannine, y no vengas a llorar cuando nos necesites. Sabes que es lo que ella busca realmente, no eres ingenua, en cuanto te saque el suficiente dinero y ya no le sirvas, te dejará.

Sin esperar respuesta de su hermana, Billy le dio la espalda para retirarse.

—Ella no es así...— pronunció con temor, antes que su hermano desaparezca de su vista — Ella es diferente...

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Sólo minutos después, Freen mirada el desayuno que estaba sobre la mesa.