"Enamorado tuyo" | Alviki

Besos.. quizás muchos.

La relación de Ricardo y Álvaro realmente iba mejorando con el pasar de los días, ambos iban trabajando poco a poco en el como manejar su relación y la confianza que hay entre estos dos.

Por lo general, Ricardo suele ser el que se guarda todos sus sentimientos negativos al no querer preocupar a Álvaro. Idea la cual no tranquilizaba para nada a Alvin; prefería que le contara el como se sentía a que se lo ocultara, cosa que le preocupaba aún más al darle a entender que no había algún tipo de confianza por parte de Riki. O por lo menos eso era lo que Álvaro entendía con eso.

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Álvaro se encontraba saliendo de la ducha después de varios rato estando ahí dentro, puesto a que su mente le había hecho sobrepensar justo en ese momento. Para su suerte, las pocas lágrimas que soltó se habían camuflajeado con el agua y no se notaba a la hora de que este salió.

El batero se había dirigido a su habitación para poder cambiarse en paz, más simplemente no tenía idea de que el rizado se iba a encontrar recostado sobre su cama mientras leía un pequeño libro que se había encontrado en la mesa de noche del contrario.

— Ah, hola, Alvin. — Enunció el Musso con una sonrisa sin prestarle atención a que este se encontraba prácticamente desnudo, siendo una toalla amarrada por la cintura la única prenda que lo cubría.

— ¿Qué hacés acá? No habías avisado que venías para acá.. — Fue hasta su armario, rebuscando entre su ropa algo para ponerse.

— Sí lo hice. El hecho de que no hayas visto mi mensaje no es mi culpa. — Se encogió de hombros, mirando el como buscaba la ropa.

— Mh.. — No agregó nada más en ese momento y, una vez tuvo su ropa ya seleccionada, se dió la vuelta para poder mirar a Ricardo.

Se quedaron haciendo contacto visual en silencio mientras que Álvaro esperaba a que Ricardo se retire de la habitación para poder colocarse la ropa.

— Este, eh, Riki.. ¿Será que puedo cambiarme? — Preguntó, dando a entender indirectamente a Ricardo que se fuera.

— Ah, adelante, Alvarito. — Dijo con una sonrisa.

El más bajo le devolvió la sonrisa, esperando a que Ricardo se levante y vaya a esperarlo a la sala. A sorpresa de este, el de lentes simplemente volvió su mirada al libro que tenía en manos para adentrarse en la lectura una vez más.

Soltó un suspiro pesado, saliendo de la habitación directo al baño para cambiarse. Ricardo le vió salir, medio confuso. A pesar de eso no le prestó mayor atención, lo dejó pasar como si nada y, nuevamente, empezar a leer.

Pasados los minutos, Alvin había vuelto al cuarto.

— Che, Riki, ¿no tenés hambre? —

— Meh.. no tengo ganas de cocinar ahora, la verdad. — Se encogió de hombros. Excusaba eso por el hecho de que cuando se encontraban juntos estos cocinaban en conjunto.

— Bue, pero yo te puedo hacer la comida. ¿Seguro no tenés hambre? — Fue a sentarse en la cama, al lado del rulado.

— No, no. Todo bien, tranquilo, Alvin. — Le sonrió.

— De acuerdo. Solo.. cualquier cosa decime. — Se acercó más a él para ir a juntar poco a poco sus labios con los del rizado.

Ricardo correspondió con una sonrisa, abrazándolo para poder pegarlo más a él. La situación se iba calentando de a poco y con los minutos los besos eran más duraderos, empezando a quitarse las prendas superiores y volver a juntar sus labios después de esto.

Duraron un minuto entero en uno de aquellos besos, Ricardo rodeando a Alvin por la cintura y este con sus manos posicionadas en la cabeza del rulado.

— Mhg, pará, Alvin, pará.. — Se separó un poco del beso, sacándose los lentes y dejándolos en la mesa de noche.

Entre esos besos pasaron a estar sentados a tumbarse en la cama, uno encima del otro y cada quien recorriendo el cuerpo de su contrario con sus manos.

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Vamozmarikonwz (q wea acabo d escribir aydys mandenme al pzikiatrw)