SesshomaruxNaruto (Yaoi) Un Nuevo Comienzo

XIV

- ¿Te parece una buena idea secuestrarme?- que patético.

- Aunque no lo creas, ser patético me ayudará -respondió en seco Sesshomaru.

- Idiota, suéltame o te mataré -amenazó Naruto intentando zafarse de las cadenas que sostenían sus manos, pies y cuello- ¡Suéltame!

Sesshomaru permaneció en silencio.

-Suéltame, ¡odio estar atado!

Sesshomaru miró a Naruto, sin expresión alguna y se acercó unos pasos .

-Callate, solo estas fastidiando.

-Hasta que no me sueltes no lo dejaré de hacer -respondió Naruto jadeando del cansancio, empezaba a estar eufórico, tenía una sensación extraña, una que le traía recuerdos.

Sesshomaru pateo sin piedad la cara de Naruto, diez veces seguidas, eso contó el chico que ahora escupía sangre.

-Eso bastará, si quieres repetirlo vuelve a abrir la boca -sin más Sesshomaru se fue.

***

Qué estoy haciendo aqui, ¡maldita sea como odio caer en estupideces como estas! Lo detesto, lo detesto, odio estar encerrado, como un animal, como un mounstro.

Naruto comenzó a forcejear, patear, a moverse sobre el suelo que iba rasgando sus ropas, no podia mas del cansancio, se sentía mal, ahora estaba mas lejos de su objetivo, debil, como un premio, sin saber si lo irían a "rescatar", no sabría si podría irse de ahí, estaba preocupado, el contrato de sangre que hizo con Inuyasha no fue más que una vil excusa para no dejar que escaparan, Inuyasha no moriría, Naruto jamás podría matar a alguien solo para fines propios, eso no lo haria digno de su sueño.

Otra vez, ¿Estoy solo?

***

-Amo, ¿no cree que fue un poco duro?

- No hay que meterse en asuntos de adultos, Rin -contestó Seshomaru enojado.

-Esta bien..

-¿Qué hará con ese sujeto Amo, lo matará? -cuestionó ahora Jaken.

- Eso es asunto mío.

...

Dos meses pasaron en donde dos hombres, se hicieron amigos de Inuyasha y su grupo, como imaginan fueron Inuyasha junto con los demás que se relacionaron con Kakashi e Iruka, al ver que tenían el mismo objetivo, avanzaron juntos, cada uno con distintos fines, puesto a que de cierta forma Inuyasha, y los demás solo querían salvar su vida, eso era lo que pensaban ahora que sentían tan presente a la "anunciada" muerte por no cumplir su trato con Naruto, justo por eso Kakashi e Iruka no revelaron información que los comprometería a ellos o a Naruto.

Pero lo importante no era eso, era que, desde que Sesshomaru se llevó a Naruto, este no había vuelto a aparecer, para dar un aviso, para amenazar, para un intercambio, para nada, se había esfumado, no habían encontrado un resto, una señal o pista de donde se podrían encontrar, su busqueda consistía en sentir el Chakra tan fuerte que debía tener Naruto, lo que no sabian era que estaba sellado, y solo habrían caido en cada uno de los engaños que el hermano de Inuyasha había puesto.

***

-Come, ¿Quieres morir?

- Creo que muero con cada cucharada.

-Eres realmente estúpido -has lo que quieras, en cuanto tenga lo que quiero, no importara como te entregue, sin un brazo, o muerto del hambre.

Naruto lo miró con recelo, con enojo, ya habia perdido la fe de que lo rescataran, ya había aceptado que estaba solo, sus conductos de chakra estaban cerrados, Sesshomaru se había encargado de eso, al parecer, lo había estado investigando, ¿Para que lo queria?, ¿Lo iba a matar?, ¿Lo iba a investigar? No entendía que pasaba.

A pesar de eso, tomó la cuchara con sus delgadas manos y se llevó la comida a la boca, estaba temblando del frío, hace cuatro semanas Sesshomaru lo obligó a quitarse la ropa, no toda, solo su capa y camisa.

- Quítatelo

-¿Para qué? -respondió Naruto con aire de desobediencia

Sesshomaru lo pateo, vio que la violencia era la forma en que el chico se podía manejar más fácilmente; sin embargo, Naruto no accedía rápido.

Despues de ya casi desmayarse del dolor el rubio no tenía fuerza para resistirse, recostado sobre la tierra se quitó la capa que cubría su rostro, Sesshomaru no apartó la mirada, lo tomó de la espalda y le quitó la camisa, se sorprendió al ver su pecho e immediatamente lo soltó y se paró.

-Te quedaras así, insolente.

Después de ese día Sesshomaru no apartaba la mirada del rostro de Naruto cada que le dirigía la palabra, cosa que a Naruto no le resultaba incómodo, Sesshomaru era atractivo, solo por eso se lo pasaba.

En cuanto a Kurama, desde que Naruto habia perdido la fe en salir de ahí, no habían vuelto a hablar, Naruto no quería hablar con nadie, y Kurama no le iba a insistir, después de eso, Sesshomaru cerró sus vias de chakra y no volvio a tener contacto con él.  Realmente se sentia solo, Sesshomaru era su única compañia y no podía decir que la mejor, hablaban poco y se entendían a golpes, bueno, él, él entendía a golpes.

Duro tres horas comiendo, el cuerpo le picaba, los brazos le dolían y su estomago estaba cerrado, ya eran las cinco de la tarde, Sesshomaru llegó con valdes de agua y le dijo que se bañara, Naruto no tenía fuerzas para negarse y lo hizo, también se vistió con ropa que le había dejado y estando a punto de acostarse sobre la tierra mojada sintió un golpe en la nuca y cayó dormido.

***

Una oscuridad envolvía las manos de Naruto, no se podía ver ni escuchar nada, pero el vacio era palpable, así eran todos lo sueños de Naruto, un mundo monótono en el que no se podía ver ni a sí mismo, caminó unos cuantos pasos,  intentando salir de ahí, no le gustaba soñar, antes era una escapatoria, pero ahora, ni dormir lo hacía sentir bien, solo lo cansaba más, queria despertar, entre tantos pasos escuchó una voz, pero no cualquiera, era la suya

Naruto, oye, ¡Naruto! Despierta, tienes que ir, no puedes dejar todo así, no lo permitiré, ¿cómo vas a dejar todo asi?, ¡tienen que!, ¡tienen que!, ¡ellos deben pa-!

-Despertaste, dormiste cinco días -habló Sesshomaru mientras observaba como Naruto manejaba su respiración.

- ¿Dónde estoy? -Naruto observaba su alrededor, una gran habitación con una vista al mar, estaba recostado en una cama, y Sesshomaru secaba su sudor con un pañuelo- no me toques, ¿qué planeas hacer teniéndome aquí?

- Naruto Uzumaki, ese es tu nombre ¿No?, déjame presentarme adecuadamente, soy Sesshomaru, el rey de los demonios.

- ¿Y eso qué?, ya sabía como te llamabas.

- Lo sé, pero me parece más formal.

-¿Intentas ser amable conmigo después de lo que hiciste?

-Si, aprecio que veas mi esfuerzo, Naruto -se acercó- verás, tenías que ser intercambiado, pero como vimos, nadie te ayudó, ya conseguí una nueva espada entonces ya no te puedo intercambiar...

-Entonces suéltame -levantó la voz.

- No puedo, llamaste mi atención, no me disculparé en como te traté, pero intento compensarlo.

- ¿Quieres que te agradezca?

- Quiero que me pagues

- Ni siquiera debería, idiota, ¿creés que voy a hacer lo que dices?

- Exactamente, vi que tenías una especie de energia recorriendo tu cuerpo, con unos cuantos toques agote su circulación, si quieres recuperarla, tendrás que hacerlo.

-Cómo fue que pasaste de amenazar a Inuyasha a amenazarme a mí - Sesshomaru no respondió- está bien, ¿Qué quieres?

- A ti