El Guardián del Fin de Siglo

capitulo 41

Los tres se reunieron con los otros cuatro el segundo día después del desmayo de Jacob, cuando su fiebre empezó a subir y bajar. Las acciones de Derick mejoraron gradualmente el estado de Jacob, y Noah, que había estado preocupado por él, respiró aliviado.

Después de observar la condición de Jacob durante uno o dos días, el grupo, sintiendo que los días se estaban volviendo cada vez más fríos, se apresuraron a moverse. Quizás porque no quería ser una carga, Jacob siguió silenciosamente al grupo sin hacer ningún sonido.

"Creo que llegaremos al refugio en uno o dos días más."

"Haa......."

Llegar al refugio no fue el final de la historia, pero sí les hizo sonreír, pues se alegraron de haber puesto fin a este horrible viaje, aunque sólo fuera por un momento. En cambio, Noah, que sabía lo que sucedería en cuanto llegaran al refugio, no podía estar contento.

Sí, es inevitable.

Tenía que llegar al refugio y reunirme con los hermanos Newman, y cuando me enterara de todo lo que sabían, vería el fin de este maldito mundo.

Y eso, Y eso es todo.......

De hecho, Noah sabía mejor que nadie que la historia estaba lejos de terminar, pero le gustaba cómo sonaba, así que la meditó y se quedó profundamente dormido.

Al día siguiente. Noah se despertó jadeando tras una pesadilla antes del amanecer.

Maldición.....

Recordando los detalles de su pesadilla, Noah se frotó las sienes contra su palpitante dolor de cabeza. Después de frotarse la sien durante un rato, frunció el ceño al sentir dolor en la garganta. Comprobando una vez más los rostros de los hombres dormidos, Noah salió del campamento para beber agua.

Cuando salí del cuartel, vi a Calyps haciendo guardia. Calyps miró a Noah mientras se acercaba y se llevó un dedo a los labios en señal de silencio.

¿Shh? ¿Quieres que me quede callado?

Asintiendo al gesto de silencio, Noah siguió nervioso el gesto de Calipso y miró al otro lado del río. Estaba muy lejos, pero pudo ver deambular a una gran sombra negra de unos 3 metros de altura. Aunque no podía distinguir su forma exacta desde aquella distancia, Noah tragó saliva ante su grotesco aspecto.

¡Un zombi mutante......!

¿Por qué hay zombis mutantes ahora? Recordando la pesadilla que acababa de tener, Noah sintió que el corazón se le hundía con cada movimiento de la gran sombra y el cuerpo se le puso rígido de miedo. Mi cuerpo se congelo de miedo. Calyps tomó la mano temblorosa de Noah como para calmarlo y lo sentó a su lado.

"Shhh, está bien."

"Snif!*"

n/t: onomatopeya de inhalar o tomar aire.

"Cálmate, Noah. no pasa nada".

El calor de su mano, la voz grave que le tranquilizaba, sacaron a Noah de su pánico.

"Sí, los zombis no pueden cruzar el río."

Es decir, esa cosa no podía hacerles daño. Al recordarlo, Noah dejó escapar el aliento que había estado conteniendo y se relajó lentamente. Recuperando la compostura, Noah miró al otro lado del río con aire observador y luego volvió a mirar a Calyps, sorprendido.

¿Cómo sabe que a los zombis no les gusta el agua?

Se suponía vagamente que este sería el caso, pero como no era seguro, Noah también estaba mirando a los zombies con dudas.