🕸️Capitulo 5🕸️

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"Antes, mi corazón estaba envuelto en la soledad del bosque y la incertidumbre, pero ahora, entre risas compartidas, historias tejidas con amor y la amistad que se erige, encuentro una felicidad auténtica gracias al amor de mi madre y a mi primera...

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"Antes, mi corazón estaba envuelto en la soledad del bosque y la incertidumbre, pero ahora, entre risas compartidas, historias tejidas con amor y la amistad que se erige, encuentro una felicidad auténtica gracias al amor de mi madre y a mi primera mejor amiga. A través de estas experiencias, descubro que la aceptación y el cariño transforman mi vida, y deseo que encuentren también un refugio de alegría y comprensión en sus propios caminos."

Bajo el cálido sol del mediodía, Selene se encontraba junto a su madre en el apacible patio, rodeadas de filas ordenadas de cultivos que crecían con el amor y la paciencia que ambas les dedicaban. Cada planta era un testimonio de su trabajo conjunto, creciendo sanas y fuertes.

Entre risas y conversaciones tranquilas, madre e hija compartían el tiempo mientras recolectaban los frutos y verduras que habían cuidado con esmero. La canasta se llenaba con la abundancia de la cosecha, pero un pequeño suspiro escapó de los labios de Selene, como una melodía suave en medio del bullicio de la naturaleza.

Amelia, notando el suspiro de su hija, detuvo su tarea y la miró con intriga y preocupación. Sus ojos se encontraron, y en ese momento de conexión silenciosa, el amor y la complicidad entre ambas se hicieron más palpables que nunca. Sin palabras, Selene compartía sus pensamientos mientras el viento mecía suavemente las hojas de los árboles, y el aroma fresco de la tierra cultivada llenaba el aire.

-Mientras ambas recolectaban los frutos en el apacible patio, Amelia notó el suspiro de Selene y, con cariño, le preguntó- ¿Qué pasa, mi pequeña loba? Tus suspiros hablan un lenguaje que solo mi corazón quiere entender. ¿Hay algo que quieras compartir conmigo?

Amelia, notando la expresión preocupada de su hija, la miró con curiosidad. Selene, con timidez, decidió abrir su corazón y confiar en su madre. Recordando la vez que llegó tarde a casa, Selene confesó su pequeña aventura en la aldea, describiendo cómo defendió a una niña de unos niños malintencionados.

Madre, ¿recuerdas cuando llegaste a casa y te abrace preocupada pensando que algo malo te habia sucedido? Yo..fui a la aldea y la recorri buscandote, pero en el transcurso conoci a una niña que era molestada por otros niños..cuando la defendi, ella se convirtió en mi amiga y he estado visitando la desde entonces..yo no queria ocultarte esto, enserio lo siento..-dijo apenada la menor-

La confesión resonó en el aire, pero en lugar de enojo, la mirada de Amelia se llenó de comprensión y cariño. Colocando una mano con ternura en el hombro de Selene, le aseguró que siempre podía confiar en ella.

Selene, mi dulce loba, siempre puedes confiar en mí. Estoy agradecida de que hayas encontrado una amiga y que seas valiente al defenderte a ti misma y a otros. No necesitas disculparte, estoy aquí para apoyarte y amarte siempre -dijo Amelia con una sonrisa tranquilizadora-

🦴༺༄𝐸𝑛𝑡𝑟𝑒 𝑙𝑎 𝑂𝑠𝑐𝑢𝑟𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑦 𝑙𝑎 𝐿𝑢𝑧༺༄🦴[One Piece]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora