_Arge... _.
Mis ojos se abrieron, llevaba horas sobre aquel tren, esperaba haberme dormido la mitad del viaje. Mis dedos estaban rojos del frío, mis pies se entrelazan entre sí buscando el mínimo calor de mi cuerpo, mientras yo abraza con fuerza la mochila con mis pertenencias, la luz de la luna chocaba con los asientos vacíos de aquel solitario tren. Era solo yo.
No lo niego, fui capaz de correr hacia el maquinista y pedirle volver a casa. Me sentía raro por extrañarlo, recordaba los momentos alegres con él y para detener mi tristeza recordaba la razón por la que huía provocando más arrepentimiento. Después de todo seguía siendo solo un niño.
Escuchaba el chirrido del tren y como mi aliento helado escapaba de mis labios.
El tren había frenado.
Iba a comenzar a llorar. Tal vez por tristeza o por el interminable ruido blanco que yacía allí. Sentí un escalofrío en mi cuerpo y la poca luz del tren se desvaneció frente mio, unos ojos se clavaron en mi.
Levante mi vista y alguien frente mío contemplo mis lágrimas. Un hombre de pelo blanco y alto estaba expectante, buscando respuestas... o solo esperando que bajara pues a mi derecha la puerta abierta dejaba la luz y el sonido de la gente entraba frenéticamente. Era el conductor.
Agaché mi vista y me levanté de mi asiento dispuesto a retirarme. Su vista de ojos oscuros clavada en mi.
_ребенок // niño _.
Su ruso provocó un escalofrío en mi. Con pasos firmes se dirige hacia mí. Aguante la respiración y me agarro de la barra de metal con rigidez.
La distancia era aceptable, y con sus brazos atrás me examino.
_ты выглядишь одиноким // te ves solo _.
¿Por qué los adultos eran tan directos?
Mi vista se nublo y volteé hacia la estación, con gente yendo y viniendo, todos apurados para llegar a algún lugar y luego yo, sin idea de lo que me esperaba.
_Я тоже, мальчик. Но нужный человек всегда придет. // yo lo estuve, muchacho. Pero siempre llega la persona correcta _.
La persona correcta... ¿Por qué me decía esto?
Se acercó y su mano pasó por detrás de mi oreja, me quedé tieso, esperando que algo malo sucediera, pero frente a mí dos pedazos de cobre brillaban con la luz de la estación. Eran dos rublos rusos. Una sonrisa apareció en mi rostro y luego en la suya. Tome aquellas monedas en mis manos y baje los últimos escalones, pero su llamado hizo que volviera a verlo.
Sobre ese tren aquel hombre me dijo unas últimas palabras.
__береги себя, дитя... // cuidate, niño... _ _
︵‿︵‿୨ ୧‿︵‿︵
Camine sin rumbo, pasaba por las calles y tropezaba con la gente, algunas más malhumoradas que otras, pero notabas que todos eran iguales en algo, estaban con sus asuntos. La gente de Moscú era distinta a la de Kamenniki.
Tenía miedo de pasar la noche en la calle, de que él me fuera a buscar o que nunca encontrará a Nikita. Muchas cosas podían ocurrir en una noche.
_¿Qué estoy haciendo? _. Me dije a mi mismo. Y era cierto. Recién me daba cuenta que no sabía si ella realmente vendría, si tendría que dormir en las frías calles de aquella furiosa y desconocida ciudad. La gente caminando, riendo, hablando, los autos pasando, era demasiado para mi. Criarme en un lugar completamente opuesto al que estaba ahora fue un gran choque.
Y como si un Dios viera mi desesperación, la vi. Parecía que había un ángel a lo lejos, bajo la luz de aquellos faroles antiguos los copos de nieve se entrelazan en su pelo rubio, con un sobretodo bordo la muchacha que tanto espere se presentaba como un milagro en la otra vereda. Ella volteo y me vio, nos miramos y sonreímos.
Cruzo la calle que nos separaba y frente mío estaba ella.
_Август _.
¿Quién diría que mi nombre sonaría tan bien en sus labios?
_Мы столько о тебе слышали... // Hemos oído mucho sobre ti _. Dijo dulcemente.
El bullicio no importaba en aquella ciudad de Rusia al fin y al cabo, terminamos recorriendo Moscú con su mano en la mía, ella guiándome en su hogar. Fue esa noche cuando entendí las palabras del hombre en el tren, "Las personas correctas"
_¿Потому что ты краснеешь? // ¿Por qué te estás sonrojando? _.
_¿что? нет-нет, это ничего... // ¿Qué? no no, no es nada... _.
︵‿︵‿୨ ୧‿︵‿︵

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Un Viejo Mundo Para Un País Nuevo
Ficción histórica¿Qué harías si estuvieras desde que naciste encerrado con un hombre que te oculta del exterior? Escapar, obvio, es instinto querer vivir de otra manera, ver las cosas de otra manera, sentir las cosas... de otra manera. Argentina vivió con U.R.S.S d...