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Los fuegos artificiales resonaron por todo el cielo, dentro del castillo se celebraba una pronta presentación de un nuevo pecado y el último.

Se iba a presentar a la última pecadora.

- Ella es Sakura, será el Octavo Pecado Capital. Sakura el escorpión del pecado original, sus delitos serán perdonados al formar parte de las tropas del reino.
Sakura se inclinó frente al Rey tal y como Merlín le había mencionado que hacer hace unas horas atrás.

- Como todo pecado, cada uno de ellos cuenta con un tesoro sagrado que logra expandir sus habilidades y tú, Sakura no serás la excepción.
Levantó la cabeza y pudo observar como un Gran Maestro se aproximaba y traían un estuche de metal con el logo del reino.

De abrió la misteriosa caja mostrando un hermoso Kunai con cadena de color dorado, parecía ser hecho y forjado por oro puro.

- Tesoro Sagrado "Metasona de Scorpions", ahora, Sakura repite el juramento
Tales palabras sin ninguna equivocación, la mujer recitó el juramento con seguridad y seriedad del caso aún manteniendo la posición de reverencia a su rey.

El arma que reposaba dió un sutil brillo acompañado de una leve vibración para la vista de los presentes Bartra sonrió confiado y levantó el brazo colocando su mano en la coronilla de Sakura.

- El tesoro sagrado te a elegido y el reino entero te aceptó. Se más que bienvenida Sakura el Escorpión.
Los bullicio de todo el gentío apareció y la presentación que había quedado más que perfecta.

- Hace un buen tiempo que no tenía miradas sobre mi persona

- ¡Sakura ahora eres parte de nosotros, que bueno!
Sobraba decir que Diana era la más animada ahí.

[•••]

- Pecados capitales tienen una misión, a las faldas de Britania de encuentra un pueblo que entre tantos rumores cuenta con un alma en pena que logró causar disturbios en los pueblerinos que pasan por ahí.
El equipo completo aceptó de la misión. Y partieron en ese mismo momento hacia el lugar en dónde tenían que resolver.

Sakura mientras corría sintió como todo su cuerpo había sido tomado por la gran mano de la gigante y la colocó en su hombro.

- No tenías porque subirme a tu hombro Diana, aunque es muy lindo el gesto.

- Somos compañeras Sakura, aunque me gustaría que seamos amigas, hay veces que Merlín no tiene tiempo para conversar o hacer algo de chicas.
Una "O" se formó en los labios de la octava miembro del grupo entendiendo a lo que se refería su camarada. Sakura quería saber si ya llegarían o faltan mucho para llegar a su destino, ella bien recordaba que no había prestado la atención necesaria al mapa o a lo que explicaba el Rey Bartra.

- Capitán Meliodas, podría ver el mapa
Meliodas asintió y de un gran salto le entregó justo a tiempo el mapa para caer con elegancia y tranquilidad a la tierra y seguir caminando.

- Ahí lo tienes Sakura, es el lugar en dónde tiene un círculo

- Ese lugar... No puedo regresar a Liones en plena misión verdad.
Comentó la de ojos esmeralda en forma de juego sin despegar su vista del mapa que tenía dibujado a todo Britania.
- ¿Por qué? ¿Conoces la zona?
No recibió respuesta así que optó por seguir caminando y hablando con Ban, aunque muy dentro suyo deseaba saber lo que estaba pensando Sakura y el porque tenía el rostro tan triste.

Pasó medio día desde que abandonaron Liones y parar su camino al notar como el pueblo en dónde marcaba el mapa aún seguía abandonado, y desde aquel incidente no había cambiado en lo absoluto. Es decir, todo estaba destruido.

Última Pecadora©✓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora