Libro 4 de la saga "Maldito Romance" para leer este libro debes leer los 3 primeros
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La sensación de tener lo que más amas en la vida pero a la vez ver cómo es imposible hacerlo completamente tuyo por el hecho de ser llamados primos sin una...
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—¿Estás lista?— mire a Rouse aplicarse un ligero brillo en los labios, aparte de eso solo llevaba pestañina y un poco de rubor... Para nuestra buena suerte tenemos una piel casi perfecta, y digo casi porque existen ocasiones en dónde nos sale uno que otro granito indeseado
—Vamos— por su cumpleaños, Rouse había recibido un auto como obsequio de sus padres, este sería el primer día en que llegaríamos sin chofer, sin el señor Cameron y sin Jacob, sería un día divertido y bastante tranquilo
—¿Que les sucedió a las niñas que conocía hace dos meses?— Monserrat se acerca con alegría y nos deja un beso en la mejilla que seguramente notará el resto del mundo por ese labial rojo escarlata
—Monseeeeee— Rouse la abraza y la arrastra al interior del edificio dejándome parada intentando limpiar el desastre de mi mejilla
—Hola— al fijarme bien me encontré con el atractivo rostro de Santiago
—Hola Santi ¿Que tal estuvo tu verano?— él sonríe
—No mejor que el tuyo por lo que veo... Parece que fuiste a un laboratorio para cambiarte de pies a cabeza— no fue chistoso pero me río solo por educación
—Sigo igual, no exageres— continúe mi camino con él siguiéndome justo detrás
—¿Ahora me dirás qué no has notado esos cambios en ti?— sentí su mirada recorrerme una y otra vez como si fuera un filete recién preparado
—¿Cuáles? ¿Que me crecieron las tetas, el trasero y soy más apetitosa para pervertidos como tú?— lo corte y seguí mi camino hasta mi casillero, no quería ser grosera pero si no lo paraba en seco él me seguira jodiendo la existencia
No muy lejos de donde conversaba con Santiago estaba Jacob quien por alguna extraña razón parece olvidar lo mierda que fue la noche anterior
—Se noto lo enamorada que estabas del Francesito— el comentario de Jacob a mi lado ni me inmutó, lo ví espiar la conversación con Santiago
—No es de su incumbencia— seguí caminando con él a mi lado —¿Que quiere?
Lo mire a los ojos molesta, si, estaba enojada por lo idiota que había Sido anoche y porque no me dejaba nada fácil eso de olvidarme de él
—¿Ya no me tuteas? Parece que ese francés te cambio por completo... Dime una cosa ¿Que tanto tocó tu cuerpo? ¿Ya no eres virgen?— una bofetada callo en su cara cuando lo tuve de frente
—Vuelve a dirigirme la palabra y el próximo golpe lo reciben tus bolas... Si ya te saque de mi corazón puedo sacarte de mi vida... No es amenaza, es advertencia
El timbre sonó así que corrí a mi clase sin poder guardar mis cosas en el casillero por culpa de ese idiota
El día transcurrió con completa normalidad, algo de cálculo, castellano, ciencias y química fueron mis distractores. Para mí suerte Jacob estaba en un salón distinto al mío al igual que Rouse por lo que me ví en la obligación de socializar con Ruby y algunas de sus amigas
—¿Ya pensaste en un grupo para el emprendimiento de este año?— pregunta Alejandra, una de las amigas de Ruby
—No, aún no tengo nada pensado
—Oigan chicas ¿Que les parece si vamos por un café al centro comercial? Nos haría bien una tarde de chicas
Todas estuvimos de acuerdo y nos pusimos en marcha, entre tiendas caras, una pastelería y una película en el cine se pasó la tarde. Volví a mi casa con ganas de preparar algo rico de cenar
—Llegue— al entrar escuché una conversación bastante acalorada entre mi madre y mi tía Laura, deje mis cosas sobre el sofa y me acerque a la oficina del primer piso
—No, no tiene derecho... Laura, eres mi mejor amiga, como mi hermana pero tú hijo no puede pretender que por ser un Evans puede venir y pasar encima de mi hija
—Lo se Jessi, y creeme que he intentando hablar con él de mil maneras, pero no sé que más hacer... No me gusta ver la forma en que Tamara sufre por él
—¿Sufre? Ella está agotada, ¿Sabes lo doloroso que es para mí escucharla llorar horas infinitas cada noche? ¿Cómo le ruega al cielo dejarlo de amar? Es mi pequeñita, y estoy segura que tú harías lo mismo por Rouse...
—¿Que? ¿Que estás pensando?
—Mi mamá y yo notamos que conoció a alguien en Francia, se veía más feliz estando allá, eso es lo que necesita... Estabilidad emocional, no puedo seguir escuchando como llora por culpa de un inconsciente como lo es tu hijo
Las palabras de mi madre me helaron la sangre, no podía estar pensando en enviarme lejos, ella sabe que mi vida está aquí, mi mejor amiga, el voleibol, todo por lo que he peleado
—No es la solución, Jessi, ella es la que debe elegir, tiene toda su vida construida aquí, solo te pido que hables con ella y juntas tomen una desición
—No, yo sé que ella se negara, está tan aferrada a Jacob que se negara a la posibilidad de irse
—¿Y no piensas que tal vez no se querrá ir por su mejor amiga? ¿O tal vez por el voleibol? Su familia está aquí
—Su familia soy yo y si es necesario me iré con ella
Un silencio de pura tensión se hizo en la habitación, no podía creer que por mi culpa mi madre este a punto de dejar a su mejor amiga, a su empresa y a su vida por unos estúpidos sentimientos no correspondidos
—Bien, es tu vida y tu hija, haz lo que creas conveniente
Cuando presentí que la tía Laura estaba por salir me aleje de la puerta y subí las escaleras rápidamente, me encerré en mi habitación y en medio del silencio sentí como mi mundo se caía a pedazos
—Por mi culpa— todo esto es mi culpa
Corri al baño y me sumergí en la tina después de llenarla de agua caliente, después de salir de las calles y finalmente ser feliz junto a una familia lo arruine todo
—Todo por amor, todo por el maldito amor de Jacob Evans, un maldito Amor Prohibido
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De un bloqueo sale un hermoso capítulo lamento mi larga ausencia
No sé que sucede conmigo últimamente, tengo pareja pero a pesar de que me hace feliz no he logrado sentirme en completa plenitud de escribir algo decente
Pronto subiré nuevos capítulos Los amo Habichuelitas
