Metanoia

CAPITULO 1

Dylan estaba por irse, nos despedimos, pero no queríamos dejarnos, aunque sabíamos que nos veríamos al día siguiente...

Habíamos pasado todo el día juntos, saliendo de la escuela fuimos a comer, y luego en casa vimos películas con mi mamá, y me ayudo a hornear unas galletas, fueron su idea, la escuela me tenía estrenada y el me conocía tan bien que sabía que hornear me ayudaría a relajarme.

Al final nos despedimos, me abrazo fuerte y me dio un beso en la frente, si tan solo ese abrazo hubiera durado tan solo unos segundos más.

A la mañana siguiente me levante puntual 5:30, para comenzar con mi rutina diaria e irme a la escuela, le escribí a Dylan con un" buenos días", usualmente él es el primero en enviarme mensaje, pero algunas veces se queda dormido y no le tome importancia. Termine de estar lista y baje a desayunar con mi mamá, en casa éramos solo ella y yo.

Salimos de casa, peleándonos por quien pondría el radio ese dia, ganó ella, a base de trampas como siempre, puso las noticias y puso en marcha el carro. En camino a la escuela le puse atención a mi celular. Ya eran las 6:40, y aunque Dylan se quedaba dormida a veces, no se le hacía tarde, y para esta hora ya tuviéramos una larga conversación sin fin ,tenía una espinita muy en el fondo, sin embargo no le tome importancia seguí poniendo atención a mi celular, hasta que escuché una noticia que raramente me llamó la atención, informaban sobre un accidente, que tuvo lugar la noche anterior, al parecer un conductor en estado de ebriedad se había impactado con otro carro en el cual iba un joven, ocurrió un accidente catastrófico y trágico, según como lo describió el conductor de la radio. -nos informan que ambos conductores Andrew N. y Dylan Young se encuentran gravemente heridos ...- escuché su nombre y todo se paralizo, pensé tal vez era otra persona, casualmente con el mismo nombre, mi madre, quien había estacionado el carro, me miraba, yo estaba en shook, mantuvimos silencio unos minutos, mi madre rompió el silencio preguntándome si quería ir a casa a lo cual me negué quería ir a la escuela y demostrar que era otro Dylan, que era otra persona y solo eran coincidencias.

En la escuela todos me miraban, me preguntaban si estaba bien, si era cierto lo que se decía.

Después de 3 horas de clases, me di cuenta de que, si era el, que yo solo estaba en negación, incluso cuando llegue y no lo vi sentado en su lugar, apartándome, me convencí de que no era real, Me bastó un mensaje para que mi mundo se viniera abajo. Era su mamá...

Finalmente salí de ese estado de shock, de negación y llore, no me importo el maestro parado al frente, no me importaron mis compañeros, ni mis amigos...

Los días pasaban y yo siempre estaba en el hospital a su lado, no quería dejarlo, fueron los días más largos y eternos, me negaba a todo y tenía esperanza, su cuerpo estaba en coma, había pasado por mucho, ¿Por qué él? Me preguntaba internamente.

-Cariño, deberías descansar, yo me encargo, por favor-dijo su mamá, Joanne o como le decía yo, Anne.

-Deja le termino de leer este capítulo y te prometo que me voy a descansar-le conteste de vuelta a lo que ella contestó con una sonrisa. Termine de leer el capítulo de su libro favorito, Harry Potter, le sonreí como si pudiera verme -Mañana vuelvo eh, no creas que te desharás fácil de mi-me incline y lo bese en la frente- mañana continuamos con la sesión de lectura, te amo- le dije y lo observe unos segundos, se miraba tan indefenso con miles de máquinas conectadas a él, un sentimiento de tristeza me inundó y salí del cuarto-ahora si Anne, nos vemos mañana-le dije a su mamá y la abrace

-Adiós linda, cuídate al regresar a casa, nos vemos mañana-dijo y me dio una sonrisa cálida, que me abrazo el corazón

-Les traeré galletas -le dije antes de darle otro abrazo de despedida

-Me parece bien, tus galletas nunca las podría negar, como le encantan a Dylan-dijo, y sonreí algo triste, mis galletas, sus favoritas, me remote a la última vez que lo vi bien, despidiéndose de mi antes de partir a su casa, acabamos de hornear galletas, y se había comido hasta las que aparte para su familia,

-Hasta mañana -le dije y participe camino a la salida.

Si tan solo hubiera sabido lo que me esperaría al día siguiente...