ᕦ⁠༼⁠✩Rey Vampiro✩⁠༽⁠ᕤ kookjin

🍷Capítulo 11🍷

El vampiro mira la cara sonrojada del alfa ,su frente sudada con mechones de cabello pegados ahí además de sus labios entreabiertos e hinchados, su respiración agitada y ojos amarillos casi dorados.

Orbes penetrantes y brillantes.

Jungkook sonríe relamiendo sus labios pues Jin es un alfa realmente atractivo, además de ser fuerte y feroz. Un ser que da pelea y también es peligroso.

Un ser perfecto para ser su compañero.

—No, alfa no hagas eso —pide Jeon sin dejar de mirar al hermoso ser en su cama.

—Ven aquí —ordena el alfa con su voz de mando, una que es muy seria y algo ronca.

La piel pálida del vampiro se estremece ante tal orden, sintiendo al mismo tiempo como su miembro totalmente erecto duele más.
Jamás en su vida recibió órdenes de alguien y cualquiera que se atreviera a hacerlo, era hombre muerto pues no había manera de que el hijo heredero al trono le hicieran tal falta de respeto.

Sin embargo escucharlo a él literalmente ordenarle que vaya a su lado, era algo que Jungkook de verdad quiere hacer y ese el gran problema, que esta seguro de que él de verdad podría hacer cualquier cosa por SeokJin, desde que lo vio y sintió su aroma lo supo.

Supo que ya no había manera de que ese ser extraordinario con aroma único no estuviese a su lado, tanto que puso en peligro aquel tratado de paz pues por supuesto que había razones de sobra para continuar con la guerra, pues Jungkook tomo al único hijo alfa heredero de la gran manada Kim.

El vampiro sin pensarlo más se acerca al alfa quién en un rápido movimiento lo tumba en la cama, Jungkook le sonríe mostrando sus colmillos y toma con sus manos la cintura de su alfa.

—Mío —añade SeokJin.

—¡Oh si todo...

Jungkook gruñe cuando Jin baja en cuestión de segundos a su cuello, después siente como por primera vez alguien muerde su cuello, siente con detalle como los colmillos del alfa perforan su carne, después SeokJin saca sus caninos y lame la herida mirando con fascinación como ya ha marcado a su pareja.

—No estarás con nadie más —ordena el alfa con ojos dorados y brillantes.

Jeon se siente emocionado ante las palabras tan posesivas del alfa, pues es claro que ahora mismo SeokJin es más bestia que humano, es el alfa lobo quien está ahí mirándolo de manera intensa.

—Soy todo tuyo alfa. Y tú tampoco tienes permitido estar con alguien más —deja en claro el vampiro.

Jungkook tira del cuello del alfa y choca sus bocas ambos peleando por dominar el acto, sin embargo Jeon es más rápido y cambia posiciones ahora es el alfa quien esta bajo suyo. Sintiendo como el pene nuevamente erecto de Kim choca contra la suya, Jeon no podría pedir mejor pareja.

Kim SeokJin es perfecto.

Así que Jeon también baja al cuello del alfa y lame la piel clara, deleitándose con las glándulas que liberan el exquisito aroma a vino, es tan jodidamente estimulante que siente sus ojos cambiar a un rojo intenso al mismo que sus colmillos crecen.
Después muerde la tersa piel de su cuello y prueba su sangre, Jin grita por el dolor sin embargo gruñe porque Jungkook comienza a hacer fricción con sus miembros erectos.

La sangre es caliente y deliciosa mezclada con ese aroma peculiar, Jungkook se sentía en el mismo cielo pues en su paladar era la cosa más exquisita, jodidamente increíble y perfecto.

Sin embargo saca sus colmillos y chupa la poca sangre que sale de la herida, después captura los gruesos labios y lo besa con profundidad, sin dejar de mover sus caderas hasta que escucha el bajo gruñido del alfa, pues él se había venido y Jungkook necesito solo unos movimientos más para también alcanzar el orgasmo más jodidamente bueno que ha tenido en su vida.

SeokJin de pronto se sintió débil y el ardor en su piel ya no estaba, ahora se sentía liviano, su cuerpo ya no ardía.

—Tranquilo alfa, descansa —consuela el vampiro depositando un suave beso a la frente de SeokJin.

Un día después Jin finalmente despierta pues la luz del día entra por las grandes ventanas de la habitación, atravesando las delgadas cortinas extremadamente blancas y delgadas.

No tiene idea de cuánto tiempo ha pasado pero se siente mejor, al parecer su celo se ha calmado así que sale de la cama y toma una ducha de agua tibia. Después sale de la habitación y ve a dos mayordomos afuera esperándolo.

—Buenos días mi señor —saludan ambos haciendo una reverencia.

—Buenos días.

—Su majestad se encuentra en el jardín principal para tomar el desayuno con usted, por favor acompáñenos —indica uno de ellos.

SeokJin los sigue por los enormes pasillos del palacio, todo en su interior de verdad que parecía irreal, todo era majestuoso y extravagante. Un par de minutos después finalmente llegan a un hermoso jardín con rosas perfectamente cuidadas, pasto verde, árboles hermosos un paisaje bastante increíble.

Sin embargo el estómago de Jin se apretó cuando noto al mismo joven junto al vampiro, aquel chico sonriendo dulcemente y tratando de abrazar al pálido.

Jamás en su vida sintió celos, nunca experimento aquello que tanto mencionaban acerca de perder el control, pero estaba pasando pues SeokJin puede sentir como sus ojos se tornan amarillos y en lo único en lo que podía pensar era en arrancarle cada extremidad a ese chico.

Después solo paso pues aquel chico estaba siendo ahorcado por Jin.

—No lo toques —lo amenaza fuerte y claro.

El pobre chico tenía la cara roja debido a la falta de oxígeno, además de estar muerto de miedo pues el rostro del alfa demuestra cuan furioso esta.

Mientras tanto el vampiro sonríe feliz y se acerca a SeokJin, lo abraza y besa su mejilla.

—Él no me importa alfa, soy tuyo tengo tu marca —le recuerda.

Esas palabras bastaron para que SeokJin volviera en si soltando de inmediato al chico, para luego mirar al vampiro y ver que de verdad él tenía una marca en su pálido cuello, su marca.

—No, eso no puede ser posible, yo no debí —las palabras de Jin son de incertidumbre y confusión.