𝗘𝗩𝗘𝗥𝗟𝝠𝗦𝗧𝗜𝗡𝗚

Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ VI: Dᴇᴄᴇᴘᴄɪᴏ́ɴ

Hacía bastante tiempo Levi olvidó lo que significaba y producía la tranquilidad. En sus semanas no existía un día libre o un descanso, ni siquiera de un par de horas seguidas. La presión de cada día parecía aumentar conforme el tiempo avanzaba. Aunque completara los pendientes del día la mañana siguiente encontraba sobre su escritorio una pila de documentos igual o más grande que la del día anterior. Completar el trabajo se volvía inhumano, sobre todo tras establecer un horario de llegada a casa en el cual su familia lo esperaba a las nueve treinta en punto. Anteriormente, acabar su trabajo resultaría estresante, si, pero posible debido a que no tenía la preocupación de cumplir un horario en casa. Sin embargo, las llegadas en la madrugada y salidas antes de que su esposa o hijo despertaran le traían problemas con ____ que ahora podía evitar. Al principio le pareció que podría lograrlo, actualmente se cuestionaba si realmente sería capaz de mantener el ritmo de vida que llevaba.

Cuando llegaba a casa pretendía que todo marchaba excelente, el trabajo era sencillo y él estaba feliz de volver temprano. Mentía en cada respuesta que daba:

—¿Qué tal el trabajo?

—Bien, lo mismo de siempre

—¿Comiste algo?

—Claro, como todos los días. A la hora de la comida sin falta

—¿Quisieras platicarme algo?

—Tranquila, mocosa. No ha surgido nada nuevo

Ocultaba el estrés y preocupación de saber que en su oficina los documentos invadían su escritorio entero. Disimulaba los insoportables dolores de espalda y cuello, a los que se sumó un malestar estomacal causado por los pocos alimentos que consumía entre largos periodos de tiempo. Guardó silencio de todo lo que rondaba en su cabeza como una tormenta persistente y caótica.

Pensar que muchos actores envidiarían su actuación digna de un premio le provocaba risa de sí mismo.

«—Quizá debí ser actor»

Durante las noches en vela, acostado junto a ____ sintiendo sus brazos rodeándolo, se preguntaba si su actuación verdaderamente era convincente o si su familia no le otorgaba la atención necesaria para percatarse de cómo se sentía. De algún modo eso lo enfurecía.

«—¿Acaso no les importo?»

Concluyó que sus pensamientos resultaban absurdos y contradictorios, si quisiera que su familia se diera cuenta entonces no pondría tanto esfuerzo en fingir. ¿Quería, o no, que ellos creyeran su mentira?

Recibir la invitación a la cena de navidad significó un poco de satisfacción en medio de la frustración y molestia. Sus constantes, desgastantes y estresantes esfuerzos finalmente le traerían el cumplimiento de una meta que se propuso desde que constituyó la empresa. Parecía no notar que también significaba más trabajo, más fingir, más mentiras.

Sábado, una semana antes de la cena

Últimamente, más seguido que de costumbre, le costaba demasiado mantener su actuación. Se volvía un reto fingir perfección y que las cosas marchaban viento en popa. Tenía instantes en los que sentía su cuerpo tan tenso que no lograría retener las emociones que peleaban y desgarraban su interior por salir a la superficie. Sin embargo, continuaba esforzándose por hacerlo, por mantener de pie ese impecable personaje que moldeó. ¿Por qué? Porque es lo que debía hacer por su familia; por eso mismo, dentro de la habitación que compartía con ____, luchando por contenerse comprimiendo los puños con fuerza, reteniendo cualquier impulso que lo incitará a perder el control de sus emociones, respirando lentamente recuperando la expresión de calma fingida que dibujaba en cada ocasión que las cosas iban mal, pero él debía disimular y tolerarlo; se preguntaba porque su esposa no intentaba hacer lo mismo por él. ¿Por qué solo él tenía que esforzarse tanto?