Los días habían pasado rápidamente para Kunhang. No eran tan aburridamente largos y repetitivos. Algo había cambiado en su rutina para que pensara eso y se debió a la aparición repentina de Dejun en algunos días.
Kunhang se dedicaba a salir un poco más que antes, no soltándose del todo pero teniendo un poco más de libertad en ese caso. Caminaba por los pasillos con la esperanza de tan solo saludar y de paso molestar a Dejun, algo que consiguió en algunas ocasiones cuando el chico iba a visitar a su amigo.
La sorpresa fue un día para Kunhang quien estaba tecleando el trabajo que debía hacer con las luces apagadas en su escritorio ubicado en su habitación disfrutando del frío insoportable que le aportaba el aire acondicionado. Se podría decir que estaba en su hábitat natural, tranquilo en su zona de confort hasta que empieza a escuchar toques del timbre.
Se levantó enseguida extrañado de la aparición de cualquier persona en la puerta. Abrió sus ojos lo más que pudo cuando vio en la puerta a Dejun con un sixpack agarrado con su mano izquierda y la otra apuntando hacia él, simulando una pistola.
—Estás obligado a tomarte al menos una cerveza conmigo Kunhang.
—Mmm, ¿y donde está tu agradable amigo?
—Yang salió de su casa, debe estar haciendo sus diligencias no sé, pero quiero beber y prefiero hacerlo con alguien. Vine hasta aquí y no quiero irme sin haber hecho algo al menos.
—Me agrada la idea...solo un poco. ¿Pero no has visto la hora? ¿No se te hace muy tarde?
—Me preguntas eso sabiendo que la mayoría de veces que nos hemos visto han sido en horas poco comunes. Me da igual la hora no creo que vaya a emborracharme demasiado.
—Eso dicen todos los bebedores.
—No puedo creer que los dos estemos hablando de esto, sabiendo perfectamente la realidad.
—Yo se la mia pero definitivamente no la tuya.
—Es buen momento para hacerlo, ¿no crees?
—Me gusta como suena, salgamos al balcón, hace más brisa.
Los dos fueron al balcón de Kunhang. Un espacio que había reservado únicamente para él pero que ahora también alojaba otra alma en pena que buscaba tener simplemente paz dentro de sí. Otra persona que buscaba la calma y tranquilidad en la compañía y el sentirse en sincronía con alguien más.
Un balcón, seis cervezas y dos extraños con problemas curiosamente similares pero distintos.
—Olvide como era estar con alguien, viendo absolutamente nada en concreto y diciendo lo primero que se me venga a la mente, como...ahora. —Dijo Dejun
—Ni me lo digas, creo que de hecho esta es mi primera vez, si me acuerdo bien.
—Que honor ser tu primera vez -Bromeaba el pelinegro.
—Deberías ser comediante, tal vez así no te sientas tan solo al tener un público.
—Usualmente soy el que se ríe del chiste, pero contigo me sale natural ser el centro de atención.
—¿Debería ofenderme o alagarme?
—Tómalo como algo positivo Kunhang. Realmente me pareces alguien curioso y divertido. El tiempo pasa rápido y cuando lo pienso se me hace increíble que tan solo nos conocemos desde hace unas semanas y de una forma tan aleatoria.
—Es como si fuera hasta planeado de lo curioso que ha sido todo esto pero debo decir que es bueno tener buena compañía después de tanto tiempo.
Entre tema y tema dejaban ver más vistazos de sí mismos. Dejando su corteza y escudo que los mantenían protegidos del exterior para dejar ver un lado más íntimo de ellos, quienes en realidad podían ser con la persona indicada. Dejando de lado sus problemas para llevarse en el momento sin siquiera pensar en ellos. Lastima que no podemos controlar la fluidez de nuestros pensamientos y cuando menos lo esperamos traemos nuestra realidad y problemas a la vista.
—Kunhang, ¿No tienes sueño? son las 3 de la madrugada, creo que debería irme asi duermes.
—No hemos bebido casi nada Dejun¿ ya te vas a rendir? —Respondía Kunhang tratando de evitar el tema.
—Estoy disfrutando de la sobriedad, ¡sorpresa! pero en serio voy a pedir un taxi, no voy a interrumpir tu sueño.
—No interrumpes Dejun. Realmente no suelo dormir a estas horas.
—¿Por qué? ¿Es trabajo o solo porque quieres?
—Es una condición. Por Dios...soné raro pero tengo narcolepsia, suelo dormir en el día o en momentos casuales sin controlarlo por lo que cuando llega la noche no suelo tener sueño. Hoy es una de esas noches.
—Es como no poder controlar tu propia vida.
—Lo es. He sentido que he perdido el rumbo con las otras personas, que no puedo ponerme al día con ellas. Me siento como un forastero viendo como todos viven de una manera tan fácil y les es normal el acoplarse pero para mi ya ni siquiera es una opción.
—Es algo que puede parecer trivial, falta de sueño o poco control sobre esto pero es algo que afecta el día a día de una persona. El insomnio me convirtió en alguien que nunca creí ser. Me hizo hacer cosas que ni siquiera imaginaba hacer.
—¿Tienes insomnio?
—Me diagnosticaron hace 1 año. Me acuerdo como me trataba de tranquilizar pensando que solo eran malas noches y terminaron siendo la bienvenida a la inconformidad de mi vida.
—Supongo que tenemos algo más en común.
—¿Cargar con enfermedades no mortales, que sí parecen serlo? no se si quiero tener otro punto así entre nosotros.
—Parece que fue bueno conocernos —Le decía Kunhang mientras se acomodaba un poco en el suelo que simulaba ser una cama para los dos jóvenes.
—Eso parece ser. Voy a tener el desarrollo de nuestra amistad en un rincón de mi corazón porque fue demasiado random. Todo por una cerveza, caídas y golpes por la basura, encuentros por el mismo coincidencial lugar y ahora míranos, hablando como si nada, mientras cada uno se crea un universo —Dejun suspiro y justo cuando iba a seguir hablando sintió una carga en su hombro derecho, al discernir que era, se dio cuenta de que era Kunhang, que se había quedado dormido en su hombro. Dormido y comido por lo que lo dejo ahí mismo sin moverse. Si no podría dormir en ese momento si dejaría que Kunhang lo hiciera, él merecía eso y mucho más.
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in my dreams - henxiao
FanfictionHendery sueña con que Xiaojun le corresponda. Xiaojun sueña con alguien que lo pueda salvar a si mismo.