°Oɴᴇ sʜᴏᴛs° •Lᴇᴠɪ ᴀᴄᴋᴇʀᴍᴀɴ• [LevixLectora]

𝙈𝙮 𝙡𝙤𝙫𝙚

Tiempo: Después del retumbar
Au: Shingekinokyojin

Era de madrugada, el sol recién comenzaba a salir y el cielo seguía de un color anaranjado.
Mientras bajaba de las escaleras por un poco de agua vi una sombra sentada junto a la ventana, podría reconocer ese cabello en cualquier lado.

-¿Insomnio otra vez? -pregunté Mientras termino de bajar las escaleras- Te eh dicho que puedo darte unas pastilla para eso, Levi.

El pelinegro sigue viendo por la ventana y luego de unos segundos me mira por el rabillo de su ojo sano, aún así, No habla.

El pelinegro se queda callado, sentado en su silla de ruedas con una manta sobre sus piernas. Luego de unos segundos, habla.

- No necesito esa porquería -dice el pelinegro con su típico tono frío- Dormir es para débiles. -sigue viendo por la ventana-.

- Levi -bufo- Si no descansas tu mente los dolores de cabeza serán más constantes -digo mientras camino hacia el- ¿Oh acaso estas pensando en algo? -me paro a su lado-.

El pelinegro sigue viendo por la venta en silencio. Cruzo mis brazos en espera para obtener una respuesta de su parte.

- Mira, yo quiero ayudarte -digo- Pero no es fácil cuándo no hay comunicación -suspiro-
Se que no quieres hablar y que queres estar solo, pero no puedo dejarte así -silencio- Es solo que no puedo.

Silencio de nuevo.

- Me preocupas -miro por la ventana- Realmente lo haces.

Silencio, lo único que se escucha es el canto de los pájaros. Sigo viendo por la ventana hasta que logro escuchar la voz de levi.

- ¿Por qué? -dice el azabache- ¿por qué te importa?

- ¿Uh? -sorprendida- Bueno, hemos pasado muchas cosas juntos y eso es muy especial. -una sensación caliente sube a mis mejillas- Realmente, hemos pasado la mayor parte de nuestras vidas juntos -rasco mi nuca- Te considero como mi familia, alguien especial en mi vida y corazón.

Finalmente el pelinegro mira hacia arriba, aún es muy apuesto, aunque tenga ciego su ojo derecho y tenga algunas cicatrices en su cara.

- ¿Familia? -dice con su voz fría, mirándome a los ojos con su ojo-.

- Si -digo un poco nerviosa- Somos familia, siempre lo fuimos -lo miro directo a los ojos, se ve tan cansado-.

Levi no dice nada, solo sigue mirándome fijamente. Sus nudillos se vuelven blancos al apretar tanto los antebrazos de su silla.
Luego de unos minutos por fin habla.

- Volví a tener otra pesadilla -dice el azabache- La misma de siempre -sus cejas se frunzen un poco y sus labios se curvan para abajo en una línea-.

-Me arrodillo y quedo a la altura de sus piernas- ¿Otra vez? -cuidadosamente agarro una de sus manos, a la que le faltan dos de sus dedos-.

El azabache se tensa un poco al sentir tal tacto, y su mano se pone algo rígida. Pensando que va a sacar su mano, este solo la mira por un momento y luego me mira a los ojos.

- Bueno, yo no se nada de pesadillas -digo mientras miro nuestras manos- Pero supongo que un té te puede reconfortar -Lo miro- ¿que dices?

- Supongo que esta bien -dice un poco grave-.

- Muy bien -digo mientras sonrio- ya vuelvo -suelto su mano, me levanto y camino hacia la cocina lentamente-.

Mientras me dirijo hacia la cocina, puedo sentir sus ojos en mi. Recorriendo mí espalda, y me hace sentir escalofríos.

Al entrar a la cocina, me dirijo hacia la estufa y pongo a calentar agua. Mientras esta se calienta, saco dos tazas y sacos de té.

Una vez el agua ya hirbio, la sirvo dentro de las tazas junto al saco. Y les agrego algo de azúcar.

Regreso a la sala, me siento en el sillón frente a una mesa de café. Dejo la taza de Levi frente a la mía.

Las ruedas de su silla crujen contra el suelo mientras se acerca a la mesa de café, agarra su té y toma del mismo. Mientras yo tomo del mio.

Suspiro, nada era mejor que tomar un té en la sala de madrugada, Y junto al hombre que amo.

- Sabe bien -dice el pelinegro, este toma de su té mientras me mira-.

- Me alegra que te guste -tomó de mi té- Aunque no fue mucho esfuerzo.

El azabache solo asiente mientras sigue tomando de su té, sus ojos se vuelven más suaves. El ambiente era silencioso, pero para nada incómodo.

Noto algo extraño, Levi se tapa la mitad de la cara con la taza cuándo toma de su té. Pero jamás lo habia visto hacer eso antes.