De tí

Perdóname

Llegaron el segundo y tercer día de clases. En ninguno tuvo éxito en arreglar sus ideas, pero, no quería preocupar a nadie de más. Solo mantuvo una sonrisa he intento aparentar que todo estaba bien, sus amigos incluso llegaron a pensar qué había hecho las paces.

Claramente no, pero todo se lo guardaba a la almohada, en ninguna de esas tres noches había logrado dormir temprano. Durante el día podía distraerse de pensarlo. En las noches esferas cuando venía el problema, se quedaba solo con esos pensamientos, realmente necesitaba disculparse, la culpa lo estaba carcomiendo más de lo normal y no entendía por qué.

Igualmente, ya era el cuarto día desde el inicio del ciclo escolar. La rutina diaria no cambió, y para este punto estaba algo cansado. En la escuela, su hermano había notado ésto, por lo qué dejó a un lado su trabajo de Presidente para enfocarse en su hermano menor, después de todo, Kou era una de las cosas más importantes para el, aunque no lo pareciera todo el tiempo.

- "Alguien te ha Estado molestando, ¿Kou? Por qué sabes que en ese caso yo podría.." -

- "No, nadie me ha molestado Teru. ¿Por eso querías hablar?" -

Aunque a Kou no le molestaba el qué su hermano mayor le diera atención. Simplemente sabía que si le contaba sobre Mitsuba, el solo se quedaría con la parte de qué había sido insultado y bueno, eso probablemente causaría más problemas.

- "¿Entonces es por las tareas? ¿Los profesores son difíciles? ¿Necesitas una tutoría?" -

- "Acabamos de empezar, no es nada de eso, pero ¿Por qué lo preguntas?" -

- "Te vez algo cansado en realidad, ¿es qué haces mucho trabajo en casa? Si es así sabes que yo podría.."--

- "No, tú ya tienes bastante trabajo Teru, y tampoco es eso. Realmente estoy bien, no se de qué hablas." -

Kou, le sonrio a Teru radiantemente, y incluso si este seguía sin estar satisfecho con las respuestas del menor, verlo sonreír así le tranquilizaba.

- "Esta bien, pero, si algo te molesta puedes decírmelo ¿Sabes?" -

- "¡Si! Lo se Ter..-" -

Y la mala suerte del joven parecía regresar. Sin avisó, alguien lo había empujado cuando estaban pasando cerca de unas escaleras. Por suerte no eran muy largas, pero ya había impactado contra el piso.

Y llámalo tonto pero, mientras veía confundido hacia arriba, pudo ver a la chica más linda qué había visto en su vida.

Y luego se desmayó entre los gritos de su hermano y la conmoción de la gente.

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Había despertado en algún punto del camino en el qué su hermano lo llevaba a la enfermería. Se veía bastante preocupado y el no pudo evitar intentar convencerle de qué no era la gran cosa, además de algo de dolor muscular, no había nada mal y podía inclusive caminar bien, lo único a resaltar era una gran herida en la frente pero esta era cubierta fácilmente por su pelo.

He inclusive así, terminó en la enfermería. Teru quería quedarse más tiempo a su lado, pero, tenía qué volver a clases, por lo qué le encargó a la enfermera qué lo cuidara y se despidió de el, prometiendo ver cómo se encontraba al llegar a casa.

Kou veía esas medidas un tanto exageradas. De todas formas estaba cansado y adolorido, así qué no le importaba perder algo de clase para relajarse.

Tomó algo para el dolor le desinfectaron y colocaron una curita. t
Tal vez descansaría unos 10 minutos y regresaría a clase.