¿Es amor o sabor? [Cakeverse]

Líder

—De hecho, no—ChangMin mira al rededor y da vuelta en un pasillo— No sé dónde está tu aula.
—Maax—Joy se queja— ¿Como no lo sabes? ¡Estudiaste aquí!
—Si, pero en el edificio sur, este es el norte, nunca había entrado aquí.
—Voy a llegar tarde.
–Que no, la universidad es predecible. Vamos hacia allá.

Caminan por donde ChangMin indica y, finalmente llegan al aula indicada en el horario de Joy. Con 5 minutos restantes para la hora de llegada, los pasillos ya están vacíos, así que ChangMin se siente más tranquilo de caminar por esos pasillos.
Despide a Joy con un rápido beso y ella entra casi corriendo.

ChangMin entra hasta las 8 de la mañana, son 6:55 y se pregunta que va a hacer en ese tiempo si MinHo entraba hasta las 11.

Supone que ir a la cafetería por un café le sentaría bien con el frío que tenía.
Se sentó en silencio y sacó su computadora para organizar sus archivos y mantener el aparato lo más despejado posible porque no sabía que tanto haría en la oficina.

Cuando faltaban 20 minutos para su hora de entrada, va hacia el edificio central y llega con 8 minutos de sobra.

Lo recibe un hombre que se presenta como el encargado del área y entonces ChangMin informa que es el nuevo pasante.

—Shim ChangMin.
—Sé quién eres, muchacho. De hecho, hasta el semestre pasado toda la universidad sabía quién eres.
—¿En serio? ¿Por MinHo?
—Claro, ¿cómo no conocerlo?
—No pensé que ustedes se enteraran de los rumores de alumnos.
—Claro que lo hacemos, debemos tener a los estudiantes influyentes bien detectados. Te volviste uno. Pero justo de eso quería advertirte. Entiendo que tu relación con MinHo comenzó hace un buen tiempo, pero ahora eres parte del personal, no puedes ir tan libremente por ahí con MinHo que es un alumno.
—Lo supuse —Asintió — No se preocupe... Lo mantendremos en bajo perfil... Tan bajo como los seguidores de MinHo nos los permitan.
—Perfecto, entonces comenzaré a explicarte que hay que hacer, ven aquí.

ChangMin le sigue y por un largo rato escucha lo que el hombre tiene que decir y presta atención a lo que tiene que hacer.

En un momento divaga pensando en si MinHo ya estará en el campus y en que tiene que hablar con él al respecto. No quería causar problemas en ese lugar, de ellos dependía su título universitario.

Cuando el horario marca las 4 de la tarde, su turno en si primer día laboral está terminando. No hizo mucho, pero se le dijo demasiado.

¿Lo recordará todo mañana?

Claro que no.

Pero ya vería que hacer.

"El día fue realmente agotador. Lamento no esperarte, pero iré a casa"

Envía el mismo mensaje a ambos y sube al bus para ir de vuelta a casa y poder descansar. Sin embargo, al día siguiente, en su hora de comida, busca a MinHo para hablar con él.
Se encuentran en la cafetería del edificio sur y ChangMin le explica que deberán mantenerse un poco alejados dentro de la universidad.
MinHo entiende, es lógico, así que, después de almorzar juntos, ChangMin lo deja y MinHo va hacia donde sus amigos suelen reunirse.

—¿Que quería? —Pregunta TaeMin al verlo volver.
—En las oficinas le dijeron que no podemos frecuentarnos mucho en el campus por la política de no salir con alumnos.
—¿O sea que volverás a pasarla con nosotros en las horas libres?
—Si.
—Al fin—Exclama Key —comenzábamos a considerar sacarte del grupo.
—¿Sí? ¿Tú y quien más? —Responde de modo altanero—¿El fantasma de tus cartas?
—Las cartas no tienen fantasmas, idiota

Ambos ríen y la plática sigue. Poco después, MinHo tiene que ir a sus entrenamientos por lo cual se retira.
Se cambia en los vestidores y sale a la cancha para el calentamiento.

— En dos semanas hará el reclutamiento de los nuevos miembros— Informa el entrenador— Así que tendrán dos días libres este semestre.
—¿Dos? —Pregunta un joven —Eso es genial.
—Si, al parecer este semestre hubo bastantes nuevos interesados.

MinHo puede agradecer porque ahora que no podía estar mucho con ChangMin, sus amigos habían comenzado a hacer planes y dos días sin prácticas significaba dos días saliendo temprano de clases, lo cual le agradaría mucho a los chicos.

—Vamos, MinHo —Xiumin palmea su espalda— Sal de tus pensamientos, el entrenador te llama.
—Oh, ya voy, ¿a su oficina?
—Si, corre. Con suerte nos traigas buenas noticias.

MinHo asiente y corre atravesando la cancha hasta llegar a la oficina del entrenador, este le invita a sentarse y comienza a explicarle que este semestre acaba la sanción impuesta por la liga de universidades, así que volverán a las competencias. Por ello, se le da la lista de los jugadores.

—Como cada liga, el líder del equipo cambia, y este semestre el puesto es tuyo, muchacho.
—¿De verdad? —Sonrió emocionado— Gracias, entrenador. Daré mi mejor esfuerzo.
—Así tendrá que ser, confío en ti, MinHo. Ahora, anda a seguir con el entrenamiento.
—Si, entrenador. Gracias en verdad.

MinHo sale y de inmediato todos quieren saber que ha pasado adentro.

—¡Este semestre volvemos a las liguillas universitarias!

Aquel informe emociona a todos. Además de ello, informa que es el nuevo líder y es felicitado para después volver a su entrenamiento.

MinHo cree que este semestre va a ser magnifico. Se aseguraría de llegar, al menos, a las clasificaciones más altas. Conocía muy bien a sus compañeros de equipo y cree que todos son capaces de trabajar en conjunto por un logro como ese.

—Les vamos a enseñar de qué estamos hechos. Nos sancionaron injustamente porque éramos demasiado buenos, chicos. Ahora de vuelta, les mostraremos que solo nos volvimos mejores.
—Ya lo verán —Apoya uno de sus compañeros.
—Les patearemos el trasero—Amenaza otro chico.
—Podemos ganar, Chicos. Así que estos meses más que nunca debemos esforzarnos.