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Sali corriendo de esa aula para poder llegar a tiempo a clases pero me choque con alguien antes de llegar.

Marcus: oh, cuidado vecina. - él me mira -

Marcus: ¿qué ocurrió?

T/n: terminé con Hunter.

Marcus: ¿luego de esa maravillosa presentación? - dijo sarcástico y yo lo golpeo -

T/n: ¡oye! No seas malo.

Marcus: seamos realistas.

T/n: bueno, quizás tengas razón. - ambos nos reímos -

Marcus: feliz cumpleaños, T/n.

T/n: gracias, Marcus. Puedes venir a mi fiesta de cumpleaños super secreta mañana por la noche. Que por cierto, es en tú casa.

Marcus: ¡oh, no! ¡T/n!

T/n: ¡lo siento! Se que no es lo tuyo eso de socializar. Pero no es mi culpa, Max se ofreció sin aceptar un no por respuesta.

Marcus: típico de Max. Bien, allí estaré. Tecnicamente, llegaré antes que todos. - me reí ante su comentario -

T/n: bien, debo irme. No quiero llegar tarde a clases.

Marcus: nos vemos vecina. - él hace una seña con dos de sus dedos para despedirse -

Al terminar esa clase teniamos el almuerzo escolar. La verdad es que tenía bastante miedo de lo que pudiera ocurrir, aún no les dije a las chicas de que termine con Hunter. No tenía idea de lo que podría pasar ya que estamos en el mismo grupo de amigos.

Busque mi almuerzo y me senté junto con las chicas. Ellas actuaban bastante normal ya que al parecer no se habían enterado. Todas estaban hablando de diferentes temas al mismo tiempo y yo tenía mucha ansiedad pensando en como debia decirlo. Entonces decidi quitarme la bandita de un solo tiron.

T/n: ¡terminé con Hunter! - todas se quedan calladas mirandome anonadadas -

T/n: luego de su presentación, le dije que debiamos hablar y se lo dije. - ellas siguieron shockeadas -

T/n: ¡digan algo! - todas se empiezan a mover -

Abby: eh.. ¿qué decir? Wow.

Max: ¡¿cómo es posible?! ¡acaba de hacer la cosa más romantica que he visto!

T/n: no se trata de lo que tu opines, Max. Desde un principio no debi estar con él sabiendo que rompería su corazón. Solo me deje llevar por lo que decia la gente y estuvo mal.

T/n: él es un gran chico y sabía que era ir a por lo seguro. Algo estable y perfecto. ¡pero la verdad es que yo no soy así! Lamento si las decepcionó, si no quieren ser más mis amigas solo para no traicionar o incomodar a Hunter, está bien. Voy a aceptarlo.

Max: ¡no, T/n! ¡¿de qué estas hablando?!

Norah: ¡no digas eso!

Abby: ¡¿estás loca?!

Max: jamás te dejaremos.

Abby: no vas a deshacerte de nosotras tan fácil. - las cuatro nos abrazamos -

Luego de clases y del trabajo me fui a mi casa algo cansada para cenar. Mi madre hizo desayuno de cena, lo cual nos gustaba bastante de pequeños.

Georgia: cuentamelo todo. ¿Cómo te fue en la escuela? ¿Ocurrió algo interesante? - le doy una gran mordida al waffle -

T/n: estuvo bien. Genial. - dije con la boca llena -

Georgia: ¿qué te ocurre? - suspiré -

T/n: terminé con Hunter.

Georgia: oh, no me agradaba de todos modos. ¿Lo odiamos?

T/n: no, no. Es solo cosa mía. Él no hizo nada malo.

Georgia: ¿y por qué le terminaste?

T/n: en realidad no me gustaba. Eso es todo.

Georgia: okey, rompecorazones. ¿Quién lo diría?

T/n: ¡mamá!

Luego de cenar me fui a mi habitación y me recosté en mi cama para usar el teléfono. Al rato pude sentir como se habría la ventana y vi como Marcus entraba a mi habitación.

T/n: wow, veo que ya se hace rutina.

Marcus: no me canso de la rutina. - él se tira en mi cama y me da una hoja doblada -

T/n: ¿qué es esto? - comencé a desdoblarla y vi un dibujo de mí -

Marcus: feliz cumpleaños, vecina.

T/n: oh por dios, Marcus. Esto es hermoso, ¿acaso pintas?

Marcus: al parecer no sabes mucho sobre mi después de todo.

T/n: pues me encantaría saber más. Me encanta. Muchas gracias, de verdad. - lo abracé -

En ese momento cara a cara. Pude sentir la tensión que había entre nosotros, y no era nada fácil de ignorar. Él comenzó a besarme poniéndose sobre mí.

Marcus: ahora que te tengo, T/n. No planeo dejarte ir. Tú eres mi mayor droga.

T/n: tú no eres bueno para mi, Marcus. Pero te deseo tanto. - dije mirándolo a los ojos -

Él sonrió y volvio a besarme mientras bajaba sus pantalones. Corrió mi ropa interior y metió su miembro en mi sin previo aviso, en ese momento me aferré muy fuerte a su espalda dejando marcas en ella. Mientras él salia y entraba dentro de mi pasaba sus manos por todo mi cuerpo, y nos besabamos con toda la pasión del mundo. Cuando el ritmo fue mucho más rápido lo rodee con mis piernas y lo traje más a mi para continuar besándolo. Ambos tuvimos nuestro orgasmo quedando tirados en la cama.

En ese momento estando con él, porfin me pude sentir en paz. Quería quedarme aquí, en Wellsbury. Creo que ya era hora de parar de viajar por todos lados.

Muchas gracias por leer, pueden votar y comentar lo super agradeceria, pronto estare subiendo más, los amoo

𝗚𝗶𝗻𝗻𝘆 𝘆 𝗴𝗲𝗼𝗿𝗴𝗶𝗮 || 𝑴𝒂𝒓𝒄𝒖𝒔 𝑩𝒂𝒌𝒆𝒓 𝒚 𝒕𝒖 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora