El Omega del Alfa [2ho]

Capítulo 27

Jongho quería salir de ahí...

Todo estaba bien, al menos eso creía el menor, pues los tres omegas junto a San habían retomado su rutina escolar.

Claro, Yunho se opuso diciendo que no era seguro, pues el beta que lo había molestado seguía merodeando por ahí. Al final Jongho tuvo que recurrir a decirle que aceptaría las condición que él quisiera.

- Estoy algo cansado- dijo Hongjoong, mientras recargaba su cabeza en sus brazos cruzados sobre la mesa de la cafetería.

- No recordaba el estrés académico de esta manera- suspiró Yeosang.

- Tranquilos, no es algo del otro mundo, así que resistan un poco más, solo quedan unas dos horas- dijo Jongho, intentando de alguna manera, animar a los mayores.

- Admito que también estoy algo cansado, no recuerdo que en mi instituto, los alumnos se comportaran de esa manera- dijo algo molesto por la atención que recibía.

San se sentía algo incómodo, algunos de los estudiantes se la pasaban susurrando a sus costados. Era ridículo, y quería gritarles a todos que se buscaran una vida.

Un grupo de omegas se acercó a la mesa donde se encontraban. Por el aspecto de esas chicas, San supuso que no eran muy agradables.

- Vaya, vaya... Pero si es el trío de los mejores amigos, ¿Cómo están?- sonrió Eunhye, una omega realmente hermosa y con un aroma muy llamativo y peculiar, chocolate con un toque de menta.

Ella era hija de uno de los empresarios más grandes de Corea, y por ello, ella presumía de su buena posición económica y sentía que debía ser tratada de manera especial. Algo que a los tres omegas les disgustaba.

Los omegas por su parte suspiraron. San frunció el ceño, no sabía quienes eran esas omegas fastidiosas, ya que jamás las había visto.

- Hola Hye, ¿Qué se te ofrece?- le preguntó Hongjoong irritado.

- Yo solo pasé para saludar a mis queridos omegas favoritos- dijo y sonrió de una manera forzada.- Ademas, he oído que Yeosang ya pudo enganchar a un alfa, aunque muchos dicen que se trata de uno más de sus clientes que lo mordió por equivocación, sé muy bien que sin importar de quien sea, un omega debe estar orgulloso de mostrar su marca- dijo burlona, remarcando la palabra orgulloso y sus amigas soltaron pequeñas risas.

Todos se encontraban al tanto de que Yeosang había vuelto con una marca en su cuello, pues a pesar de que Yeosang se encontrará en una situación algo difícil para él, era feliz por poder llevar esa marca que tanto había anhelado y jamás la ocultaría. Aún si sus compañeros no lo entendían.

- Bueno...- suspiró Yeosang, no tenía caso discutir con la reina de las humillaciones públicas, así que solo desistió por el momento- Estoy feliz de decir que aunque haya sido una equivocación, mi alfa me trata muy bien, así que no le veo problema- sonrió, pero sus ojos no se veían brillantes.

- ¿Ustedes quienes son?- le preguntó San, metiéndose de repente a la conversación, él sabía que para Yeosang no era muy fácil hablar sobre su marca, y su lobo se había molestado por la forma en la que la chica lo había atacado frente a todos. Hye lo miró de arriba a abajo y sonrió con burla.

- Soy Lee Eunhye, y ellas son mis amigas, la verdadera pregunta aquí, es ¿quien demonios eres tú?- respondió de mala manera.

- Choi San, ahora pierdete- le dijo algo fastidiado y la omega abrió los ojos sorprendida para seguido de eso, ponerse a reír, San frunció el ceño, era evidente que se encontraba molesto.

- Que buen comediante eres, muy bueno, Yeosang, ¿Dónde puedo conseguir un perro guardián como éste?- señaló y volvió a reír, su séquito río junto a ella, era obvio porque ni siquiera las había presentado con sus nombres, solo eran omegas de relleno para hacerla destacar.

San sintió su pecho gruñir, pero Yeosang le tomó del hombro para retener cualquier ataque, Hongjoong suspiró y se levantó junto a Jongho. Por su parte Jongho se colocó frente a los chicos para calmar las cosas. Hongjoong solo cruzó sus brazos y espero cualquier acción de parte de la omega.

- Hye- le llamó y la omega inmediatamente le prestó atención- Se está haciendo tarde, y si quieres comer algo, será mejor que te apresures- dijo actuando con falsa tranquilidad, algo que realmente sorprendió al beta.

Sin embargo, lo que más le sorprendió fue cuando la omega se sonrojó y asintió con una sonrisa radiante, ¿Es que acaso esa omega era bipolar?

- Oh, lindo, tienes razón, espero no haber interrumpido tu almuerzo, y mi hermano espera que puedas ir alguna vez a visitarnos, le he hablado maravillas de ti y quisiera conocerte.

- Lo pensaré, ahora solo desaparece, ¿de acuerdo?- dijo cansado.

- Si, ¡Ya escucharon!- gritó a sus amigas para después despedirse de Jongho y desaparecer.

"¿Qué carajos acaba de suceder?, ¡No tiene lógica!, ¡Estúpidos omegas!" Pensó molesto el beta para dirigirse hacía Jongho buscando una explicación.

- Ella es una de mis compañeras- dijo y después se alejó, Yeosang fue detrás de él, definitivamente no le agradaba hablar de ella, por lo que miró a Hongjoong. Sabía que le diría lo que acababa de pasar. Hongjoong suspiró.

- No le digas nada de lo que acaba de suceder a Wooyoung o Mingi, y mucho menos a Yunho- le advirtió y San asintió confundido.- Ella está enamorada de Jongho.

- ¿¡Qué!?- preguntó sin creerlo- ¡Pero es obvio que odia a los hombres omegas!.

- Lo sé, sin embargo, Hye no acepta que Jongho es un omega y cree que todo es gracias a que se junta con nosotros.

- Eso es imposible, solo con oler el aroma de Jongho debería saber que es un omega- respondió San, pero Hongjoong negó.

- Tiene fantosmia- explicó Hongjoong, pero San solo lo miró más confundido, así que aclaró un poco su garganta-. La fantosmia es un transtorno del olfato, es la sensación de percibir un olor que en realidad no está presente, así que aunque Jongho tenga aroma de manzana y frutos rojos, en la mente de Hye, su aroma natural es de café con chocolate- le explicó.

- ¿Entonces solo confunde el aroma de Jongho?- preguntó y Hongjoong negó.

- Confunde a la mayoría de las personas, pero por alguna razón, Jongho es el único que ha recibido un aroma agradable- dijo con una risa-. La mayoría recibe olores simples o desagradables, como Yeosang, quien le dijo que su olor a césped no le era de su agrado- recordó.

- Si, si, pero eso que tiene que ver con qué a Jongho no le agrade su presencia, jamás lo había visto portarse así.

- Oh, te diste cueta- dijo Hongjoong y su semblante se volvió serio- Si, a Jongho no le agrada mucho porque el señor Lee quiere forzarlo a casarse con ella.

San se ahogó con su propia saliva y miró sin poder creerlo hacia la linda omega egocéntrica que se encontraba en una mesa lejana, riendo y haciendo comentarios.

- El señor Lee sabe que es un omega, ¿Verdad?- le dijo San y Hongjoong asintió. Eso debía ser una locura.

- Claro que lo sabe, pero dice que no le interesa, pues Hye es una omega, princesa de papá, y cualquier cosa que quiere la consigue, además de que el señor Lee es una persona de mente abierta.

- Si, tampoco el problema en una relación omega-omega, pero no creo en eso de forzar al amor- dijo obvio.

- Yo tampoco- finalizó- San, tú sabes lo que podría pasar en caso de que Yunho se entere, ¿cierto?, Por lo tanto, queremos evitar cualquier encuentro desastroso, Jongho tiene miedo de que Yunho resulte herido, el señor Lee es una persona peligrosa, no tanto como Yunho, pero no debemos tentar a la suerte- le dijo, y con eso, el timbre sonó para regresar a sus clases.

San no pudo concentrarse, era obvio que se había enterado de algo inmenso, y sabía las razones por las cuales no decían nada, sin embargo el sabía que no era toda la información, había algo más.

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